Martes. 5 de junio de 2012. Palabra por palabra. Miguel ángel lino*. Visión
académica alfonso lizárraga bernal*. Nací en los ochenta. No recuer- do haber
visto ...
14-A Editorial
General Visión académica
Palabra por palabra
alfonso lizárraga bernal*
Miguel ángel lino*
Cuentacuentos
E
n cada casa en donde hay niños pequeños debería existir un cuentacuentos. Lo natural es que se turnen el papá y la mamá de los pequeños; pero también los hermanos mayores deben entrarle al quite. El tema es que lo niños cuenten con un cuentacuentos de cabecera. Leer, lo digo continuamente y no he de cansarme, es una necesidad tan ingente como dormir y comer bien: Nutritivo, variado y a sus debidas horas. Lo que servirá para formar hábitos e ir cincelando a una persona sana, tanto en su desarrollo físico como en su nivel intelectual. Pero, por lo que se ve y más por lo poco que se lee, en México no tenemos aprecio ni cuidado por lo que nuestros pequeños ingieren tanto en productos chatarra, como en entretenimiento virtual que los deforma y daña. Los llena; pero no los nutre. En este punto y sin exagerar, no bastará con decir “pobrecitos de los niños”; sino pobre y hasta miserable de nuestro país con un casi nulo hábito de lectura y desesperanzador grado cultural. Casi está extinta aquella costumbre de los padres que les leían a su hijos en voz alta un cuento por noche (no el mismo todos los días) como nutriente de la imaginación, creatividad y desenvolvimiento de sus hijos...”, aquéllos los de entonces ya no somos los mismos”. Pero –ya sé- volverá la burra al trigo: “Es que a mis hijos no les gustan los cuentos bobos; ellos ven las telenovelas o juegan a matar alienígenos en híper violentos juegos de video”... “Además –dirá el No Lector aunque lo maten- a mí nunca me leyeron de niño y ni falta me hizo”mientras aprieta desaforado el control remoto de su “televisionz(s)ota”. Cierto. A muchos no los educaron así: con habituales lecturas incluidas. Las consecuencias están en las calles haciendo manifestaciones para que no les hagan la Evaluación Docente Universal, porque “es una trampa del sistema que quiere lesionar mi autoestima, deteriorar mi imagen pública y contravenir mis logros sindicales”... ¡Qué atrevida es la ignorancia! Y, en muchos casos, tal vez porque no les leyeron cada noche un cuento. Porque no los hicieron amigos de los libros y sus infinitos beneficios. Porque no lo cultivaron. Porque los dejaron crecer como hierba silvestre que lo único que hace es impedir que otras variedades surjan y florezcan. “¡Todos igual de ignorantes, nomás faltaba!” ... Mejor dedicaré el espacio que resta en mi artículo para comentar lo que NO sucede en México: “El Día Cervantino de Literatura Infantil y Juvenil”; que para beneficio de otros sí se celebró -del 30 de mayo al 2 de junio- en treinta ciudades en donde se habla español como primera, segunda o tercera lengua alternativa. Claro, en nuestro país no tenemos tan raras aficiones. Con éste, van cuatro años de ese peculiar Cervantino que tiene en la actividad de los cuentacuentos uno de sus mayores atractivos, que además de ser una actividad lúdica es formativa. Que enaltece a los que cuentan como divierte a los que oyen contar. El cuentacuentos no es un lector plano y sin emoción. Para nada. Debe representar con su voz, gestos y movimientos corporales a los personajes y situaciones que el argumento describe. Si no, no tiene chiste. Aquí le dejo la recomendación de dos cuentos clásicos: “El sastrecillo valiente”, de los hermanos Grimm y “El traje nuevo del emperador”, de Hans Christian Andersen. Y otros contemporáneos: “La peor señora del mundo” de Francisco Hinojosa y el libro con tres cuentos “El ratón de supermercado” de Jorge Ibargüengoitia. Déjelos volar y vuele con ellos, siendo un entusiasta cuentacuentos. Correo electrónico:
[email protected] *El autor es profesor de Redacción Creativa de Cetys Universidad.
Martes
5 de junio de 2012
L
a semana que transcurrió ha sido candente desde todo punto de vista; además de los bombazos a Sabritas por de los aconteceres político electorales. Las luchas magisteriales de Oaxaca, Michoacán y Guerrero, entre otros Estados, contra la Prueba Enlace, se dan en un contexto altamente candente. Los maestros denuncian el falso discurso oficial de preocupación por la calidad educativa. La Evaluación Universal, no detona la calidad, sino que es una estratagema para establecer criterios jurídicos que permitan doblegar la voluntad magisterial. En medio de este clima, surgen otras “llamaradas” políticas. Fox declara su apoyo a Peña Nieto, hecho que manifiesta el decadente estado de ánimo que ronda en las altas esferas del PAN. A su vez, expresa la gélida soledad de Josefina Vázquez Mota, quien no ha sido capaz de concitar el apoyo dentro de sus propias filas partidistas. Fox, con su habitual desfachatez declarara que “el puntero de las encuestas… será el próximo presidente de México…” y que “será el ganador y…debemos apoyarlo para que se puedan resolver los problemas…”. Este hecho está precedido de otro no menos importante, Manuel Espino, exp residente del
Aumenta la temperatura de la caldera política
PAN se incorpora a la campaña en favor de Peña Nieto. Estos personajes, si bien no son altamente influyentes en la promoción del voto, si tienen suficiente fuerza para provocar duros golpes a la moral entre las filas panistas. La desmoralización asume la cara de pragmatismo y al mismo tiempo de polarización. Tales declaraciones indican que la derecha se dispone a cerrar filas a favor de Peña Nieto ante el importante golpe proporcionado por los jóvenes “Yo Soy 132” y sus consecuencias en el electorado nacional. El impacto provocado por los jóvenes en el electorado nacional ha cimbrado a las altas esferas de poder, quienes sentían asegurado el triunfo. La situación se polariza, por un lado queda claro que los peores personajes se adhieren a Peña Nieto, incluyendo a Rosario Robles (con su desprestigiada cauda), que también se integra a la campaña del priísta. Y, por otra parte, la juventud estudiosa del país se agrupa en favor de Andrés Manuel López Obrador, al igual que la gran mayoría de intelectuales comprometidos con la idea de un proyecto distinto al neoliberal. Dos polos con distinta moralidad y con distintos compromisos. Los jóvenes son el futuro y son los que
Tío & Vato Héctor castro V. y Javier aznar*
N
ací en los ochenta. No recuerdo haber visto un movimiento de jóvenes que surja en el seno universitario y que se reproduzca en varias ciudades del país. Tres lecturas. Una: Emoción. Un país en el que abundan problemas de cualquier índole, impunidad, educación o desigualdad y que no sólo se quede en la crítica pasiva, eso, me emociona. Me emociona aun más que sean los jóvenes que se organicen, convoquen y que sea un balde de agua fría a quien sostiene que predomina la apatía o somnolencia en nuestra generación. Dos: Excelente bandera a enarbolar. Que se rete y cuestione el monopolio de los medios de comunicación es justo y necesario. El movimiento se ha manifestado en contra de un candidato. ¿No sería más contundente si sólo fuera en contra del monopolio de los medios? Repruebo tanto el que se beneficie a un candidato vía los medios, como la campaña negativa que genera temores, algunos fundados otros no, así como rencores. Tres: Gracias Internet. Como diría Hillary Clinton “cualquiera con un iPhone, con un blog, puede poner en marcha algo escandaloso”. Los alcances que pudiera lograr tener el movimiento, si la noticia no se retoma por la prensa, difícilmente logrará permear y aun más incidir en el electorado de un cierto sector. En México sólo el 35% tiene acceso a Internet, esto es 40 millones de los 112 que somos (Asociación Mexicana de Internet/2012). Esto según un indicador alentador, ya que el Inegi establece que sólo el 22% tiene acceso a internet (2010). Si bien de ese porcentaje más del 90% tiene una cuenta de una red social, el
tienen derecho a definir el mundo en el que quieren vivir. Los otros, son los emisarios de intereses mezquinos, vinculados al imperio del norte. ¿Quién triunfará? Va nuestra apuesta a favor de la juventud y sus vínculos con López Obrador, quien ha logrado integrar un equipo de intelectuales de probada integridad moral. ¿Será capaz el pueblo de distinguir la necesidad de ensamblar su voluntad en este proceso electoral, con los jóvenes y a favor de un proyecto distinto al neoliberal? La polarización tenderá a agudizarse, los jóvenes cuentan con su fuerza moral propia de quien tiene el futuro en sus manos, y se apoya en el poderío de las redes de Internet; y se enfrentan a las televisoras con su poder manipulador. De semejante y desigual confrontación, nos parece que la energía y creatividad está de parte de los jóvenes; no obstante, se enfrenta a experimentados sinvergüenzas, con dinero, poder y fuerza trasnacional. Por esta razón las Televisoras presentarán en trasmisión estelar el próximo debate entre candidatos presidenciales, seguramente incrementará el termómetro político del país. *El autor es catedrático de la UPN campus Mexicali.
Algo va mal
impacto es pequeño en comparación con el que tiene la televisión (93% en 2010 según el Inegi). Riesgos: Ser manipulado, distorsionar sus objetivos. ¿Realmente es un movimiento genuinamente estudiantil? LA CRÓNICA estableció ayer que algunos de los manifestantes no tienen claro las pretensiones. Las marchas #YoSoy132 son un actor más en estas elecciones. A pesar de que sean utilizadas en beneficio de un candidato restando relevancia la demanda anti monopólica, dichas marchan son un indicador de que “algo va mal”. Esto, es un buen termómetro para quién gane las elecciones el próximo mes. Un México en el que sus jóvenes, su ciudadanía es más participativa y esperemos con mayor incidencia ante un presidente que ya no puede ni debe hacer, dejar de hacer o propiciar lo que la mayoría no queremos. VATO Corren tiempos difíciles y la gente se echa a las calles para hacerse oír. En Madrid y en la Ciudad de México. En Barcelona y en Nueva York. En Valencia y en Berlín. Básicamente, en todas aquellas ciudades en las que la voz del pueblo se oye, valora y respeta. La democracia es lo que tiene.Enlospaísescondictadoresprotegidos en castillos de marfil es difícil hacer llegar los gritos hasta la alcoba del mandamás. En España, el movimiento 15M ha gozado en los últimos tiempos de una enorme popularidad. Las calles fueron tomadas hace ya más de un año por el pueblo, en un desesperado intento por ser oídos y respetados ante esta crisis que arrasaba todo a su paso, cual caballo de Atila. Hoy, un año más tarde, las calles se siguen llenando para exigir un cambio mientras que la crisis,
por su parte, también sigue arrasando a su paso, haciendo gala de una dramática tozudez. Servidor, hizo caso omiso en su día de su misantropía crónica y su fobia a las multitudes, y salió a la calles de Madrid para observar de cerca este movimiento tan interesante. Ríos de tintas y toneladas de papel se han escrito en España y el resto del mundo analizando estas manifestaciones. Desde intensas y sesudas interpretaciones sociológicas a injustas generalizaciones realizadas a la ligera. No es mi intención descubrirles la pólvora ahora. No obstante, si bien es cierto que hay que celebrar siempre la posibilidad de salir a la calle y expresarse libremente, al mismo tiempo, conviene ser críticos para lograr extraer de este movimiento algo más que simples estadísticas con las que hacer alarde de la capacidad de convocatoria. En ocasiones, durante estas manifestaciones, se observa mucho ruido y pocas nueces. Mucha vuvuzela y poco futbol. Mucho bongo y poco poso. Mucho grito de guerra y poca estrategia militar. Mucho señalar el problema y poco plantear soluciones. Mucho hablar y poco escuchar. Y así, es muy difícil hacer la transición del Mundo de las Ideas al Mundo de las Cosas, esa dualidad de la que hablaba Platón, y por la que hay pelear. Como decía aquel eslogan del mayo de París: Seamos realistas y pidamos lo imposible. Pero antes de pedir, tengamos claro el qué, el cómo y el por qué. Y, entonces, pidamos. Y no paremos hasta conseguirlo. TÍO Héctor Castro Vizcarra. Abogado por la Escuela Libre de Derecho.
[email protected] twitter: @castrovhector Javier Aznar. Economista por Icade.
[email protected]