Psicodrama en la Universidad II (Pdf) - Zuretti

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Jacobo Levy Moreno en artículos de docentes del curso y profesionales del exterior que nos han enviado su valioso material para incluirlo. El psicodrama ...
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El presente ebook, está disponible en www.zuretti.com.ar, ( PUBLICACIONES)

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PSICODRAMA EN LA UNIVERSIDAD

II CURSO DE POST GRADO: - PSICODRAMA CLÍNICO - SUPERVISION Y TÉCNICAS PSICODRAMÁTICAS SECRETARÍA DE POSTGRADO FACULTAD DE PSICOLOGÍA UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES Ciudad Autónoma de Buenos Aires República Argentina

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Psicodrama en la universidad II / Mónica Zuretti ... [et.al.] ; compilado por Cristina Elisa Moreira ; dirigido por Mónica Zuretti. - 1a ed. - Buenos Aires : Criseli, 2010. Internet. ISBN 978-987-25753-0-4 1. Psicodrama. I. Zuretti, Mónica II. Moreira, Cristina Elisa, comp. III. Zuretti, Mónica, dir. CDD 616.891

Fecha de catalogación: 23/03/2010

La presente compilación ha sido elaborada por la Lic. Cristina Elisa Moreira. Buenos Aires, marzo de 2010.

INDICE

Cap.

1.1

El Curso de Postgrado

11

1.2

Los docentes

13

1.3

La modalidad de trabajo

14

1.4

Los autores de los trabajos

15

Haciendo memoria…

16

Mis días en Beacon

17

2

3

8

Presentación

1

Pág.

2.1

Autora: Mónica Zuretti 2.2

Congreso de Psicodrama en Argentina, 1969

38

Autora: Mónica Zuretti 2.3

El Psicodrama en la Argentina

56

Autora: Mónica Zuretti

3

ALGUNOS CONCEPTOS FUNDAMENTALES

65

DE PSICODRAMA 3.1

Acto creador

66

Autora: Mónica Zuretti 3.2

Matriz, grupo e inserción sociométrica

71

Autora: Mónica Zuretti 3.3

El cuerpo y la matriz de identidad Autora: Mónica Zuretti

2

72

INDICE Pág.

Cap. 4

4.1

El enigma humano y el psicodrama

80

Sumersión y Emersión en la concepción moreniana

81

Autor: Salvatore Pace ITALIA 4.2

Lo humano en psicología y psicoterapia

90

Autor: Dr. Luis de Nicolás y Martinez ESPAÑA 4.3

Lo humano en la escena psicodramática

118

Autora: Dra. Mónica Zuretti ARGENTINA 4.4

¿Existen matrices y roles anteriores a la matriz de

137

identidad a los roles psicosomáticos? Autora: Elba Martinez Picabea de Giorgiutti ARGENTINA 4.5

Psicodrama divino tesoro

152

Autora: Lic. Débora Penna ARGENTINA

5

APLICACIONES EN PSICODRAMA

3

158

INDICE Pag

Cap.

159 5.1

Intervenciones creativas en contextos educativos Autora: Dra. Natacha Navarro Roldán ESPAÑA

5.2

Cuáles son los Factores Terapéuticos en Psicodrama –

180

Observaciones y Análisis del Trabajo en Grupos en el Centro Psicodramático Orpheus Autoras: Galabina Tarashoeva- Katerina Ilieva BULGARIA 5.3

Mi experiencia con el Psicodrama

196

Autora: Fany Roxana Aguirre Núñez PERU

6

202

RELATORIAS

Autora: Ximena Alexandra Armas Melo ECUADOR

4

203

1 PRESENTACIÓN

5

A modo de prólogo Queremos

expresar

nuestro

profundo

agradecimiento

a

nuestros

colegas

psicodramatistas de la red internacional, quienes nos han acercado sus trabajos para publicar en esta colección de ebooks que estamos desarrollando.

En esta segunda entrega, contamos algunos aspectos teóricos de la metodología de Jacobo Levy Moreno en artículos de docentes del curso y profesionales del exterior que nos han enviado su valioso material para incluirlo.

El psicodrama moreniano, además de contener un método y una técnica precisa, está basado en una concepción del hombre, su libertad y su posibilidad de crear y ser creativo.

La labor de un psicodramatista moreniano, debe respetar todos aquellos aspectos que conciernen a la libertad y deseo de cada paciente, interpretando aquello que quiere mostrar en su relato de la escena traumática de la cual devendrá un trabajo psicodrámatico.

Si bien constituye un un reto para los profesionales, no deja de ser una posibilidad de ayudar a poner en acto cuanto el paciente quiere resolver, explíctamente.

Para ello se establece un contrato.

Cada elemento, cada situación, cada característica de ese momento, debe ser respetado por el Director de psicodrama, sin forzar, sin imponer.

No es posible agotar en un instructivo preciso, la metodología y filosofía moreniana. Intentarlo, sería reducirlo.

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Esta formación se nutre de sus escritos, sus verbalizaciones y acciones en la enseñanza en Beacon, que aspiramos sea reflejada en el curso de postgrado, concientes de que estamos lejos de agotar su mensaje.

No obstante, sentimos que el esfuerzo es válido y que pretende ser fiel a sus enseñanzas.

Desde la publicación del primer ebook de la serie PSICODRAMA EN LA UNIVERSIDAD en abril de 2009, hemos recibido comentarios estimulantes de distintas partes del mundo así como trabajos para publicar en los próximos ebooks. También este ebook “ha viajado” al Congreso de Quito, Ecuador en abril,

fue

presentado en el Congreso de Psicodrama de Roma en agosto y en los últimos días de enero de 2010 ha sido presentado en el marco del Foro de Porto Alegre--Brasil, en el sector CULTURA.

Agradecemos a todos los colaboradores que han acercado sus trabajos para darlos a conocer a través de esta serie, quienes nos alientan a continuar en esta tarea de difusión del psicodrama moreniano.

Cristina Elisa Moreira Marzo de 2010

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1.1 EL CURSO DE POSTGRADO El curso de Psicodrama Clínico, se comenzó a dictar en el año 2005, como parte de la oferta de cursos para graduados de la Secretaría de Postgrado de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires.

Los objetivos del Curso son:

OBJETIVO GENERAL 

Enseñar el Método Psicodramático en su teoría y práctica para promover el aprendizaje de los diversos procedimientos que permiten al método ser un instrumento de aplicación múltiple ya sea en clínica, como en la orientación psicológica a organizaciones grupos o familias

OBJETIVOS ESPECIFICOS: 1) Hacer conocer el método psicodramático, creado por Jacobo Levy Moreno y desarrollado a través de casi cien años como una unidad teórica práctica de gran utilidad en la clínica psicológica. 2) Explicar las diferentes técnicas diagnosticas individuales o grupales existentes dentro del psicodrama 3) Desarrollar en los participantes un instrumento útil en clínica para el tratamiento individual o grupal 4) Diferenciar las aplicaciones particulares del método como tratamiento de pareja y familia. 5) Conocer las distintas aplicaciones en el ámbito social, escolar y organizacional

Se matriculan alumnos que cuentan con título de grado de Psicólogos o Médicos.

Previo a la iniciación de los cursos, deben concurrir a una entrevista con los integrantes de la cátedra, para su admisión. 8

El encuadre del curso contempla la asistencia semanal obligatoria de los inscriptos al 75% de las clases semanales del período lectivo, la lectura del material propuesto por la cátedra y la presentación de un trabajo monográfico al finalizar el curso.

Estos son los requisitos formales para su aprobación y así obtener el certificado emitido por la Universidad.

Desde el inicio, hemos contado con alumnos matriculados procedentes de Méjico, Perú, Ecuador, Panamá, España, Colombia, a los que en el períodon lectivo 2009 se han sumado dos alumnas procedentes de Dinamarca, además de los alumnos locales.

Un porcentaje alto, ha cursado ya más de dos seminarios y se han inscripto al cuarto, pues desearían que este curso se constituya en una carrera de especialización.

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1.2 Curso de Postgrado que se dicta en la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires, está a cargo de:

DOCENTES

DOCENTE RESPONSABLE Dra. MONICA ZURETTI

EQUIPO DOCENTE Lic. PAULA MARTINOIA Lic. CLAUDIO OJEDA

DOCENTE INVITADA Lic. DEBORA PENNA

DOCENTE VISITANTE Dra. ESTELA PAN

Creemos importante mencionar los aportes de psicodramatistas del exterior que han visitado nuestros cursos y compartido algunas de nuestras clases, acercándonos sus aportes y experiencia.

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1.3 Modalidad de trabajo en el Curso de Postgrado La propuesta de desarrollo del curso, es afín de a los lineamientos del psicodrama: activa y vivencial.

Desde el primer encuentro se ponen en acción las técnicas psicodramáticas para que cada instancia de aprendizaje encuentre la teoría en el correlato de la vivencia activa.

Esta modalidad vivencial y activa hace que la matriz grupal se constituya desde el trabajo conjunto.

A partir de la segunda clase, cada encuentro se inicia con una breve relatoría de lo desarrollado en la clase anterior, para recopilar cada instancia vivenciada y reconocer los distintos conceptos desarrollados en la acción psicodramática.

Al finalizar el trabajo psicodramático de cada clase, se comparten las impresiones de los presentes respecto de las escenas trabajadas.

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1.4 Los autores de los trabajos. En este segundo libro, contamos con trabajos de profesionales psicodramatistas de distintos países. En todos los casos contamos con la autorización de cada uno de ellos para la publicación de sus trabajos en este libro. Dra Mónica Zuretti Argentina Dra. Elba Martinez Picabea de Giorgiutti Argentina Dra. Natacha Navarro Roldán España Dr. Luis de Nicolás y Martinez España Dr. Salvatore Pace Italia Lic. Débora Penna Argentina Dra.Galabina TarashoevaDra. Katerina Ilieva Bulgaria Lic. Fany Gutierrez Perú Dra. Alexandra Armas Melo Ecuador 12

2 Haciendo memoria

13

2.1 Mis días en Beacon, el descubrimiento de otras dimensiones. Autora: Mónica Zuretti Al terminar mis palabras sobre mi experiencia con Moreno, anteriormente

para

la

Biografía

que

fuera

publicada

que escribiera en

el

Portal

www.dePsicoterapias.com, me doy cuenta que ellas no agotan lo vivido en aquellos días en el Moreno Institute en Beacon New York, en el valle del Hudson, espacio de múltiples escenas.

Decido así continuar contando y compartir poco a poco como van surgiendo experiencias, ideas, recuerdos.

Vuelvo a Buenos Aires con un título: Director de Psicodrama, otorgado por nada menos que J. L. Moreno y firmado por él, un entrenamiento diferente que nadie tenía hasta ese momento.

Una comprensión del psicodrama que no era común en nuestro medio. Entender que la vida y el psicodrama se unían se complementaban, no era posible actuar profesionalmente de un modo y vivir de modo diferente. Fue empezar un largo camino de satisfacciones y dificultades que, en este momento, cuarenta años después aparece en mi memoria y me lleva a describir mis experiencias de aquella época.

No olvidemos que no había internet, ni chat, ni era fácil hablar por teléfono. Sólo era posible mandar pequeñas cosas de regalo para que no me olvidaran.

Voy entrando lentamente en los recuerdos y aparece el primer día de mi estadía en el World Center of Psychodrama.

Mi habitación en la que dormiré como en las largas estadías en conventos, durante 14

toda mi permanencia en Beacon, estaba en el segundo piso al fondo, es una habitación pequeña, pero para mí con una gran ventaja, es la ultima.

Una pared da hacia el exterior, la otra contacta con otra habitación, ambas dan a un pequeño salón o pasillo. A veces, todo ese espacio es sólo para mí.

Considero afortunado que mi habitación estuviera al final de la casa, porque con el tiempo descubrí que es importante tener espacios donde poder aislarme de los demás, de sus palabras, de sus energías y esa pequeña habitación me lo permitía.

Había un constante subir, bajar, correr intercambiar en todo el edificio, porque los grupos trabajaban intensamente. El trabajo no se limitaba solamente al tiempo de trabajo formal sino también al compartir, discutir, entender, a veces sesiones informales.

La primera mañana en Beacon me encuentra con un desayuno americano me limito a dos tostadas y café con leche, luego entendí que si quería sobrevivir en aquella cultura tenia que adecuarme a sus modos y costumbres, que incluyen un modo particular de alimentarse. Finalmente, con el cambio, por primera vez en mi vida aumento algunos kilos.

Al despertarme aquella primera mañana me encontré dentro de esa casa muy grande y descubrí que si me detenía delante de la ventana de la planta baja y miraba hacia fuera entre árboles y plantas de otoño, había un punto que si lo seguía en línea recta hacia adelante apuntaba al Sur, hacia casa, a 7000 millas de distancia. Cuántas veces me detuve allí con nostalgia, sintiendo que la dirección espacial me comunicaba, que el dolor en el pecho, que nació en aquellos días y permaneció por muchos años, era el instante de toma de conciencia de la gran distancia y reaparece al recordar.

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Después del desayuno nos dirigimos al teatro.

La emoción y la expectativa de entrar en un recinto que tenia el origen y la historia me embargaba.

Entramos por una puerta lateral y nos encontramos inmediatamente en el estrado de tres niveles, de madera cálida redondo acogedor a pesar de estar oscuro y aún frío.

No había luz porque solamente se iluminaba al encender la larga fila de luces de diversos colores que recorrían el frente, que lo iluminará según la escena. Con el tiempo y sobre todo aquí en el Sur, donde no son tantas las posibilidades de tener un espacio con estas características, nosotros dramatizamos donde sea y como sea, por así decirlo en la cabeza de un alfiler.

Pero allá, entrar al teatro, correr a la botonera, encender todas las luces y respirar hondo era un ritual.

En general, el que tenía que dirigir era quien lo hacia y si no algún otro quedaba a cargo de ese manejo de luces que nos permitía entrar en mundos de múltiples dimensiones.

Desde un sol radiante que aparecía ante nuestro conjuro, hasta la más absoluta oscuridad.

Mientras fuimos un grupo pequeño, nos sentábamos en torno al escenario en el último escalón. Moreno a veces, Zerka habitualmente o el Director a cargo se sentaba en el escenario y comenzaba la sesión.

Con la ternura que muchas veces expresa Zerka en el trato con su gente solía colocar un bolso lleno de golosinas allí en el medio del teatro que se transformaba 16

rápidamente en un ritual de alimento y calorcito de infancia en general nadie comía muchas golosinas, pero allí estaban para un momento donde un bocadillo de azúcar era necesario.

Al mirar hacia arriba el balcón de los Dioses sostenido por dos columnas llamaba intensamente a ocuparlo.

Siempre tuve la sensación de que lo más importante era subir por una de esas columnas y encontrarme allí arriba mirando el mundo, recién hacia el final de la estadía logre hacerlo con ayuda, proeza que esta documentada en una foto denunciante, pero Zerka nunca me vio hacerlo. No olvidemos que no me resultaba fácil, educada en colegio de monjas alemanas, concretar acciones que rompieran las reglas de lo establecido.

Sin embargo, debieron pasar veinte años para que Yuniko Isoda una joven japonesa realizara la misma proeza pero sin ayuda y subiera con tranquilidad al balcón por una de las columnas, en una visita al teatro reconstruido al otro lado del río. Habían cambiado los permisos y derechos que se otorgaban las mujeres de expresarse con libertad aún en Japón. Me asombró oír que Zerka le decía: “es la primera vez que veo a una mujer que sube de esa forma” .Pensé… yo también subí así… pero luego recordé que a mí me dieron una mano, nunca lo confesé y la foto está guardada.

Quisiera saber si puedo transmitir la intensidad del momento de entrar en aquel recinto por primera vez.

Con el tiempo comprendí de energías y secretos, sé que aquel teatro como tantos otros lugares sagrados, llevaba grabado en sus paredes, en cada una de sus maderas las escenas que habían pasado por él.

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Recuerdo del Teatro de Psicodrama del Moreno Institute – Beacon

Estaba construido con las dimensiones áuricas. El arco que formaba el balcón tenia las dimensiones del arco medieval que permite dentro de sí la imagen de la estrella de cinco puntas representante del hombre. El círculo del palco escénico estaba formado por doce triángulos de madera, dentro de dos círculos concéntricos que lo rodeaban y que permitían la existencia de las diferentes dimensiones, que se expresarían al ponerse en movimiento la magia del como sí.

Psicodrama en el Teatro reconstruido en Boughton Place

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Zerka Moreno, Gong Shu, Mónica Zuretti en el teatro reconstruido en Boughton Place

Mi primera dramatización transcurre a los pocos días, caldeada por distintas circunstancias.

Debo hablar en inglés siempre. Hay momentos en los que mi cabeza deja de pensar, es una muy extraña sensación, como si aquellas neuronas que se usan para un idioma diferente del materno tienen menos resistencia al agotamiento, al estrés. ¡Qué lección fue esta propia experiencia!

Mas adelante me ayudó a comprender, conocer y acompañar, situaciones de otros, que se encuentran atrapados en un lenguaje que no los representa, del cual no tienen las huellas grabadas en sus células, por más que lo manejen con solvencia.

También esta situación me facilitó posteriormente para trabajar en otros idiomas sin dificultades, puesto que el idioma materno del psicodrama fue de allí en adelante: el inglés, que grabándose en cada sesión recuperaba una memoria desde el nacimiento a las líneas genéticas. Con el tiempo se integró el italiano, pero esa es 19

otra historia.

Mi único respiro en aquellos momentos, era tomar un taxi para ir hasta el pueblo y hablar con el chofer puertorriqueño unas palabras. Sin embargo, como mi presupuesto era realmente mínimo, lo mejor era caminar hasta el Main Road unas diez cuadras, mirar un poco allí o allá, el post office a veces un café caliente, porque hacia ya frío y luego volver en taxi realmente un lujo de pocas veces, pero las pocas palabras en castellano lo justificaban.

La noche anterior a mi primer psicodrama, comencé a caminar al atardecer, oscurecía, lentamente bajaba la pequeña colina, sobre la cual se erigía el Instituto, por un camino rodeado de árboles que aún verdes comenzaban a perder las hojas.

Era la hora en que tenía un rato de descanso, antes de la sesión con Moreno a la nochecita, en la casa alrededor de la mesa del comedor. Se llegaba a la pequeña casa de la portería donde habitaban los Moreno, a veces, sabíamos si estaban o no por las luces o el auto. Se pasaba delante de ella y al atravesar el portón llegabas al 259 de Wolcott Street. SI al salir tomaba para la derecha, llegaba a un puente sobre el río, en cambio si caminaba hacia adelante llegaba al pueblo. Esa noche, pocos pasos al salir del predio del Instituto, solamente a unos metros, un perro negro se coloca frente a mí y no me deja seguir.

La sensación de estar atrapada sin salida fue demasiado fuerte y a la mañana siguiente, el teatro me encontró en un mar de lágrimas, que no lograba detener.

Zerka, que en ningún momento me había empujado a trabajar hasta entonces, me tomó de la mano, me hizo dar los dos pasos para subir el ultimo escalón del escenario y allí surgió la escena que debía trabajar. Mis montañas cuando era chica, mis temores me llevaban a Buenos Aires, al dolor de la distancia, a la necesidad de cambiar cosas en mi vida. La sesión me dio la certeza interior, que el camino elegido 20

me permitiría ser mejor terapeuta, entender mejor mi vida, mis cosas que ese era el comienzo de un camino psicodramático que tendría muchas escalas, pero que siempre seguiría creciendo.

Fue mi primer dramatización allá, y a ella siguieron muchas.

Aprender psicodrama en el Moreno Institute era enfrentar tus propios temores, tus fantasmas, tus proyectos. Psicodrama se aprende haciendo psicodrama decía Moreno.

Cada escena personal trabajada en el escenario abre la puerta a múltiples escenas de otros que podrán ser trabajadas sin temor posteriormente.

No es solamente leer aprender, teoría, técnica y práctica. Es crecer cada día un poco.

Cuando en nuestro yo, en el desarrollo de nuestros roles desde los psicosomáticos a los sociales, hay algún aspecto sin trabajar, este seguramente interferirá en nuestro trabajo como Director.

Lo más peligroso en el desarrollo de una escena es que ésta entre en el agujero negro de la personalidad del Director, porque equivocadamente tratará de solucionar las cosas desde sí mismo, sin entender por dónde debe hacerlo el Protagonista.

Como es imposible resolver todos nuestros conflictos, lo más importante es aprender a no mezclarlos con los de nuestro Protagonista y aún, a veces, a decir no puedo dirigir esta historia porque me es demasiado cercana. Si la dirijo estar en dialogo interior constantemente para aclarar las interferencias. Esta fue la primera lección del trabajo psicodramático en la Meca.

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Aclaremos constantemente la transferencia, porque ésta no es propiedad del paciente o del Protagonista. El Director puede transferir sus emociones tanto y cuanto el Protagonista, debe constantemente estar atento a la transformación y a la creación de la tele.

Recuerdo la primera dramatización en la que fui Directora de una sesión publica en el teatro de Beacon, ya la situación de sesión abierta caldeaba en el Director novato toda las fantasías persecutorias, de examen, de prueba con lo cual los recursos creativos y de espontaneidad disminuyen. Eran estas las situaciones que debían ser enfrentadas y superadas en nuestro constante entrenamiento.

Mi Protagonista era israelí, estaba de visita en los EE.UU. y se había permitido estos días en el Moreno Instituto

Al comenzar la dramatización presenta a su familia: marido, dos hijos e inmediatamente surge el temor a cuando los hijos deban entrar al servicio militar y participar en la guerra.

La imposibilidad de manifestar, en su cultura, este temor en la medida en que su país depende, de la posibilidad de reacción de su gente, por lo cual no puede ni conversar de esto con sus seres más cercanos.

La imagen más terrible es la de su hijo frente a un escuadrón de egipcios que le cortan las piernas, para mí es una escena tan espeluznante que no sé realmente que hacer o como salir de ella. Hago una reflexión, en este momento, mientras releo lo escrito: “Qué increíble, describo esta escena en un momento histórico igualmente terrible, si miramos las escenas de Gaza “

Volviendo a mi relato de la sesión pública. Se bloquea totalmente mi creatividad, de algún modo seguimos adelante con ayuda de Zerka, logramos así que comparta sus 22

temores con su marido, es fundamental para ella descubrir que él también teme y está totalmente de acuerdo con la necesidad de cuestionarse y discutir opciones.

Lo más impactante en mi recuerdo es la frase de Zerka más tarde, durante el procesamiento en que me dijo: -“Mónica olvidaste que debías introducir en la escena a un personaje que ella había traído desde el principio, el marido, con quien debía conversar para poder tomar decisiones de vida. A veces las dificultades de la propia vida, - en ese momento yo estaba enfrentando mi propio divorcio, - oscurecen las posibilidades de acompañar y crear en el escenario psicodramático “-

Desde entonces entendí que no hay dificultad mayor para un Director que sus propios puntos oscuros, de allí la necesidad de trabajar constantemente con uno mismo.

Pero también aprendí que no se puede separar la propia realidad vital de aquello que uno debe hacer y que, como psicodramatista, debe estar siempre atento.

En mi primera dramatización como Protagonista comprendo el proceso de caldeamiento. El inespecífico, todo aquello que sucedía en aquel momento y que iba despertando en mí, memorias, recuerdos de situaciones semejantes, actuales que reconectaban emociones muy antiguas, que van constituyendo esa escena, que será la síntesis de aquellas que se asemejan por tener una estructura similar. El caldeamiento especifico será el que le abrirá la puerta del escenario a esas escenas dolorosas que lentamente mostrarán dónde y cómo deben ser sanadas.

En mi primera dramatización como Director aprendí la profunda relación tele entre Protagonista y Director, la relación intima entre ambas estructuras de roles.

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La necesidad de aclarar internamente las escenas paralelas que se abren en el imaginario del Director, para no permitir que sean éstas las que ocupen el escenario, sino las que pertenecen al Protagonista. Enorme desafío de generosidad y de atenta escucha al otro, que es quien debe ocupar el lugar de prominencia.

El Director a pesar de un nombre tan rimbombante es quien acompaña el proceso, quien dirige la escena pero quien sigue con fidelidad el argumento que pertenece a otro. Todas las experiencias que durante el tiempo que estuve en Beacon acumulé empiezan a tomar dimensión dentro de mí y a expresarse a medida que voy escribiendo después de tantos años.

No olvidemos, que aquello que todos los alumnos de psicodrama hacían alternadamente en más de dos años asistiendo a clases y sesiones, una a tres semanas o un fin de semana cada tanto, yo lo realice desde noviembre a abril en trabajo constante.

No salí nunca del Instituto si no era para asistir a las sesiones de Psicodrama público en New York. En las semanas, muy pocas, en las que no había alumnos o sólo había muy pocos, trabajaba más con Moreno en sus escritos o con Zerka en la oficina.

Teníamos tres sesiones diarias: Psicodrama a la mañana de nueve a doce, que se realizaba con Zerka o alguno de los alumnos aventajados o aun de los Directores ya formados que solían visitar el instituto y a Moreno en esa época. Así fue como tuve la oportunidad de trabajar con Haskel. En una escena muy importante donde se cuestionaba el rol del Director y la participación de Moreno en la formación de los alumnos, sus intervenciones fueron criticadas y cuestionadas.

Para mí fue muy importante el ver con que solvencia un tema que podía ser

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polémico, se trabajó psicodramáticamente aclarando diversos aspectos, después se discutió el tema con Moreno a la noche.

L. Yablonsky psicodramatista de las primeras épocas quien había realizado una investigación sobre el tratamiento de la drogadicción, que había participado en Sinanon, que tenia una bellísima historia de amor pues había conocido a su mujer durante ese tiempo y habían formado una pareja que realizara muy interesantes trabajos sobre ese tema. Solía llegar al Instituto para hacer largas entrevistas con Moreno y pasar algún tiempo en el teatro con nosotros. Su personalidad carismática y su creatividad daban a las sesiones de psicodrama características especiales.

Era en realidad muy notable cómo cada uno de los alumnos de Moreno que dirigía psicodrama, tenia características propias si bien mantenían la metodología clásica, no se detenía ante innovaciones que les resultaran útiles, lo que los hacia muy distintos entre sí, Moreno siempre admiraba esta la creatividad de sus alumnos ya que sostenía que todos somos genios, que basta ayudar a desarrollar esa genialidad o al menos no obstaculizarla. Ronal Robbins, que posteriormente fue un conocido bioenergetista y tuvo el arte de combinar ambos procedimientos con mucha solvencia, me acompaño en los primeros días, fue muy importante su actitud tranquilizadora.

No nos olvidemos que yo entraba en un mundo totalmente desconocido, que tenia reglas de juego diferentes. El asombro frente a una cultura donde las familias se desestructuraban y se reestructuraban con una facilidad muy diferente a la de nuestro mundo católico cerrado de aquel entonces.

Aparentemente con más libertad pero también con una distancia y una lejanía que yo no conocía. Donde los hijos se alejaban de los padres al terminar el colegio y desde allí en adelante perdían el contacto diario de la convivencia. Recuerdo que su presencia hizo menos fuerte el shock de la primera sesión en Nueva York. 25

Yo no conocía la metrópoli que con el tiempo entendí era la Roma del siglo veinte, y las situaciones que ocurrían en ella eran de dimensiones totalmente diferentes a aquellas que ocurrían en este alejado Sur.

El Centro de Psicodrama era un espacio múltiple donde se encontraban los más conservadores con los más revolucionarios de los miembros de la sociedad americana que se expresaban en las múltiples escenas a desarrollarse. Así fue como los primeros objetores de conciencia se encontraban dramatizando su posición, las distintas situaciones entre los distintos colores de la piel, los grupos hippies y los wasp un mundo que hasta ese momento para mí era totalmente desconocido. Cosmovisión Moreniana Moreno nos esperaba cada noche en la mesa del comedor, a veces con un libro en la mano, en general algo que acaba de salir, algo interesante, a veces mirando el diario con alguna noticia que quería compartir con nosotros.

Zerka en general

sentada bajo la luz con alguna tarea en su mano. Le gusta hacer pequeñas manualidades, uno tiende a ayudarla, porque siente que con una mano es imposible, pero ella de ninguna manera espera esa ayuda, es mas prefiere hacer ella las cosas porque las hace mejor.

Si uno se ofrece lo acepta inmediatamente, por ejemplo para enhebrar una aguja, todo en esa casa se desarrolla como si no hubiera nada de extraordinario en que, los que se reúnen alrededor de esa mesa son una familia extendida que tiene representantes de distintas profesiones países y razas.

Este escenario de la vida real, muestra como es la visión del mundo para Moreno. Una unión entre el pensamiento y los sentimientos que den forma a diferentes estructuras de relación que permitan crear nuevos vínculos. Allí oímos todas las noches un aspecto de la cosmovisión Moreniana que va tomando forma en mi pensamiento y en mi posterior modo de entender el mundo. 26

Foto: Mónica Zuretti, Jacobo L. Moreno Zerka Moreno, Marta Pundik. Año 1969 en el living y biblioteca de la casa particular de Moreno en el Predio del Moreno Institute, Beacon New York Wolcott Ave

Lo sagrado forma parte de lo cotidiano y de aquello que vamos creando cada día.

Creatividad y espontaneidad aparecen en sus palabras, no como algo especial privativo de algunas personas especiales, los artistas, sino como una característica natural del ser humano que debe cuidar y desarrollar.

En el círculo de la creación, el acto creador que lo modifica tiene lugar porque una dosis de espontaneidad permite a aquel que está frente a una acción responder con una respuesta correcta, diferente a otras anteriores o una respuesta nueva correcta para la necesidad del momento.

Es el resultado de esta conjunción creativo espontánea la que permite, el constante desarrollo del Universo, que incluye en su devenir estos seres particulares que son

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los humanos. Justamente es esa característica la que permitió al homo faber comenzar a cambiar su entorno y crear nuevos elementos acompañando su propio crecimiento.

Esta fue al mismo tiempo su gran habilidad y su peligro, porque esta posibilidad de crear de forma y manera diferente, lo diferenció de los otros seres del planeta o tal vez del universo, llevándolo a una absoluta confusión en cuanto a sus deberes y derechos.

Moreno cuando escribe las palabras del padre incluye en sus poemas los seres múltiples que lo acompañan y toda la creación entra en el mundo de lo milagroso en un constante intercambio.

De allí en adelante la Creación como circular, pero que en un instante de creación se transforma en espiral y camina hacia el crecimiento y el cambio.

A veces ese instante es impedido en su movimiento y queda detenido esperando el próximo movimiento… Si comprendemos así la visión cosmológica de Moreno no nos es difícil entender aquello que él considera el desarrollo humano inserto en diferentes matrices. Espacios tiempos creativos que dan a quienes las comparten la posibilidad de crecer en conjunto.

Surge entonces la imagen de este ser humano, como uno más en el contexto de la

creación que puede repetir las palabras del padre porque es también parte del padre y de su creación.

La imagen de un Dios que no es lejano o distante sino presente en cada día, en cada movimiento de éste: su universo. Los personajes de este universo establecen cómo todos los elementos que lo constituyen -átomos y moléculas-, giran como los 28

planetas y se mantienen en conexión por una fuerza poderosa semejante a la gravedad, que llama tele “La percepción correcta del otro que incluye la percepción que el otro tiene de mi”

Por eso es de suma importancia comprender el círculo de las matrices que van armando sucesivas espirales cada vez que se da un cambio existencial Para Moreno el ser humano se desarrolla en sucesivas matrices desde la matriz cósmica, de la cual se desprende para permitirse la aventura de encarnar en un planeta que lo recibe en su forma humana.

Plantea que el nacer no es un acto casual, decidido por otros seres que tienen el total del poder, sino que es una acción consensual donde la participación activa de aquel que es el Protagonista de esta gesta, es indudable.

Seguramente en este planteo encuentra grandes oposiciones, porque es fácil decir yo no elegí nacer, pero para un Protagonista de psicodrama, la pregunta es, cómo, por qué cuándo y cómo elegí nacer de esta manera. Porque en las múltiples elecciones posibles fue ésta la matriz genética que expresará mi necesidad de crecimiento.

Un ser que llega al mundo y da el salto fundamental de pasar de la matriz cósmica a la matriz genética elige en su estructura los elementos necesarios para su desarrollo. Este concepto, que en el momento en que Moreno hablaba era absolutamente desconocido, es ahora comprensible. Las proteínas que forman nuestro DNA. Se atraen o rechazan de manera tal que algunas estructuras se manifiestan y otras no.

La historia de esa matriz genética, quedará grabada en cada una de las células que la conjunción de los tres seres incluidos en la creación de un ser humano ha elegido manifestar y así como los rasgos físicos faciales surgirán y se mantendrán en la transmisión genética, también lo harán los rasgos psicológicos. 29

Serán estos los que darán características propias a cada ser, que cuando entra en las sucesivas matrices se confrontaran con otras características de manera tal que serán reforzados, cuestionados, subyugados, aceptados o cambiados.

Al entrar en la siguiente matriz -la materna- será ésta el espacio contenedor que permitirá a ese ser ir seleccionando aquello que necesita para su posterior subsistencia.

Sabemos ahora que aquello que hablaba Moreno de la importancia de las matrices, de los seres complementarios desde antes del nacimiento, es probadamente actual.

Esa matriz materna permitirá el desarrollo en un ámbito de seguridad, de aceptación, de duda o de muchas otras posibilidades, el crecimiento del feto se dará en un espacio que será, según y como sea la contención que la matriz familiar preste a esa díada de hijo por nacer y madre.

La matriz familiar presente desde la matriz genética, sostiene o no durante el embarazo a la matriz materna y prepara el advenimiento de un nacimiento. Acto creativo por excelencia, donde todos los elementos que se han unido para permitir la creación de un ser, le permiten entrar en la nueva matriz de identidad, formando ahora con la primera respiración autónoma, parte de la matriz cósmica, en forma directa sin intermediarios, incluido en una matriz familiar y social.

Una noche de aquellas en Beacon, podía trasmitirnos en unas pocas horas o minutos conceptos que, seguramente muchas veces chocaban con aquellos que habíamos recibido y desarrollado en nuestras matrices personales, a veces complementaban nuestros conocimientos previos, otras los tiraban abajo para tener que reconstruirlos.

Comprender que la matriz cósmica es aquella que nos cobija antes de nacer, durante nuestra vida y que es a ella a donde volveremos después de haber 30

realizado nuestro viaje, vida manifestada, es un concepto que no podemos comprender de inmediato, que necesita elaboración y asimilación. Solamente ahora después de tantos años, tal vez por estar más cerca de completar mi ciclo y haber pasado por tantas situaciones que implicaron esta comprensión, puedo compartir con ustedes estas ideas escribiéndolas.

Si bien estaban en mí, por eso me llevaron a elegir el camino que elegí, fue Moreno en aquel tiempo mágico, el que abrió la puerta a comprender elementos que seguirán apareciendo en estos escritos. De los cuales he hablado muchas veces pero jamás he dejado en el papel.

Después de una noche con esta revolución interior, donde seguramente habíamos podido discutir, estar en desacuerdo o de acuerdo, sin que nadie nos impidiera expresarnos, nos alejábamos volviendo a nuestra morada.

Caminábamos lentamente bajo un cielo para mi desconocido, donde inútilmente buscaba la Cruz del Sur, donde muy poca gente sabia mostrarme la estrella polar, la temperatura cada vez más fría, alivianaba nuestros pensamientos, subíamos la colina, entrábamos en la casa grande y según lo que hubiera ocurrido, según cuánto se hubiera movilizado en nuestras almas, nos dirigíamos a nuestros cuarto o nos quedábamos sentados hasta largas horas de la noche hablando, discutiendo, cantando, tomando chocolate o galletitas hasta que el sueño nos vencía y, a veces, hasta haciendo Psicodrama entre nosotros.

El Nacimiento, un acto creador. -“Qué bien, me dio mucho gusto que jugaras tan libremente el rol de yo auxiliar en el psicodrama, es dejar que la espontaneidad deje de estar atrapada y los movimientos surjan libremente.”-

Este comentario del Doctor, como los alumnos llamábamos a Moreno en aquella 31

época, me recibe a los pocos días, una tarde temprano después del mediodía cuando llego a trabajar en la historia del psicodrama. Me asombra su comentario porque no pensaba que para mí era difícil expresarme o jugar un rol con relación a otro. Pero es verdad que en esos momentos tomé conciencia que había tenido que doblar a una Protagonista que no podía expresar su malestar y que desde el doble había expresado la agresividad que hasta ese momento ella no manifestaba y que había podido hacerlo sin mayores dificultades -aún cuando era un rol que no era fácil para mi.

Había sido una escena en las calles de Nueva York en la cual ella no había podido defenderse y que yo desde el doble había podido desbloquear. No imaginaba que Moreno estaba prestando atención en la escena a algo más allá de la Protagonista pero, había guardado un momento de su propia atención para observar mi crecimiento.

Tomé entonces dimensión de la importancia del rol del yo auxiliar que -sin salirse del argumento planteado por el Protagonista. debe complementar la acción como una madre que comprende la necesidad de su bebé. Hasta dónde llegar en esta posibilidad creadora.

Al poco tiempo una integrante del grupo se encuentra en una situación de desestructuración importante, llega y dice que en realidad está de nuevo allí pero más que para aprender, porque debe ver algunas cosas suyas.

La escena que surge es un gran enfrentamiento con su madre. Cambiando el modelo que hasta ese momento yo conocía, la escena no se centra en esa discusión o pelea sino que va evolucionando a la búsqueda de recuerdos de sensaciones, el recuerdo más próximo de su mama. Surgen así uno, más otro y

legamos al

momento del nacimiento y la Protagonista comprende en un instante que nunca había tenido un registro del mismo y que tal vez en ese momento ella y su 32

mamá habían estado muy cerca.

A partir de esta dramatización Moreno comienza a hablar del Acto Creador del nacimiento acto compartido por excelencia donde el crecimiento del bebé va acompañado de la adecuación del cuerpo de la madre.

La importancia de llegar al momento donde coincidentemente él -para seguir creciendo- necesita más espacio y la matriz materna no puede continuar expendiéndose sin riesgo para la vida. Ese instante definitorio en donde ambos deben decidir si comenzar con los procesos hormonales y de acomodación necesaria para el nacimiento es el comienzo del caldeamiento, que ahora se ha transformado de inespecífico como lo fuera durante el embarazo a específico en la preparación para el acto creativo de nacer.

Acá nos encontraremos con las múltiples posibilidades desde la más fácil a la más complicada, pero este acto es siempre una acción conjunta donde madre y bebé deberán ponerse de acuerdo internamente para permitir que este acto ocurra.

Es un acto que se desarrollará comprometiendo dos seres.

Como dice el Dalai Lama dos seres que deben dar y recibir afecto y compasión y que dejarán sembrada en ese instante la semilla de la compasión.

Comprender este concepto, no ya desde lo leído sino también desde lo aprendido vivencialmente en la recreación psicodramática, esa Protagonista y la lectura subsiguiente del maestro me hacen encontrar que hay un Momento Nacimiento,

Momentum: espacio tiempo continente escondido en los secretos de cualquier historia traumática o dolorosa y saber que la posibilidad de sanar se encuentra en aquellos instantes de contacto por más pequeños que sean 33

Beacon, 1969: Mónica Zuretti, Zerka Moreno, José Echaniz y colega canadiense

Beacon, 1969: Mónica Zuretti, Zerka Moreno, José Echaniz y colega canadiense

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2.2 CONGRESO DE PSICODRAMA EN BUENOS AIRES, 1969 En 1969, al igual que ahora, la Universidad de Buenos Aires abre sus puertas a un Congreso de Psicodrama. Lo preside J.L. Moreno; lo acompañan el Dr. Jaime Rojas Bermúdez, Zerka Moreno, su mujer, y las autoridades presentes. En esta misma aula, en la cual yo sólo era un alma más entre cientos, se produjo un encuentro fundamental, que no esperaba. Un hombre corpulento, con un extraño sombrero, de paso seguro y moderado, avanza por el pasillo central y se dirige a la tarima. Su presencia convoca la atención de todos. Las primeras palabras que resuenan en la sala son dichas en castellano: “Tomaré tus ojos, los pondré en el lugar de los míos, te miraré con tus ojos, me mirarás con los míos”. Podría haber dicho también: “Yo soy el padre, el padre de tu padre...” u otras muchas frases que se han transformado en la cotidiana enseñanza de su palabra y que, después de veinte años, complementar una coherente interpretación de la vida.

En aquel instante, su personalidad formaba parte de sus palabras. En un compromiso total, sus manos, tal vez las que hoy están presentes en el afiche que nos convoca, se extendían abiertas hacia los otros; sus ojos, desde su celeste brillo, penetraban a todos y cada uno de los presentes.

Ese hombre que concentra la atención de todos anuncia, sin temor, un hombre nuevo.

El principio es la acción. La sobrevivencia depende absolutamente de los vínculos. Moreno plantea la posibilidad de cambiar la sociedad entera por medio de grupos dispuestos a hacerlo.

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Pocas horas antes ha expresado frente a la prensa su certeza de que los psicoterapeutas desaparecerán el día en que el crecimiento psicosocial brinde el afecto y la comprensión necesarios. Es más, sostuvo que si el amigo fuese verdaderamente amigo, el padre, padre, etc., los terapeutas perderíamos nuestra razón de ser. En una sociedad equilibrada cada uno será terapeuta del otro. Este hombre que plantea la desaparición de sí mismo vuelve a repetir el mensaje de comprensión del otro como parte de uno mismo.

Sentada en ésta misma Aula Magna comprendo que lo que me acerca a él es un vínculo familiar. La figura de mi abuelo médico y maestro muerto diez años antes es el puente entre esta figura imponente y yo – un vínculo tele establecido entre ambos que, meses después, me lleva a Beacon. Hoy sé que el vínculo familiar grabado en mi matriz de identidad, actualizado en mi matriz social, me permitió comprender su mensaje: somos en cuanto relación con los otros; cuando el encuentro con nosotros mismos, con nuestro origen y nuestra pertenencia cósmica, nos permite comprender la interrelación entre los elementos.

Este mensaje centra y descentra a la vez; nos transforma en un ser más dentro de una totalidad en la cual casi desaparecemos como seres independientes y a la vez nos ubica frente a nuestra única elección, nuestra propia búsqueda individual con relación a los otros.

Este mensaje tal vez se contradice con ese hombre carismático que atrae y rechaza, concentra y divide afectos, así como algunas de sus actitudes o de las nuestras muchas veces lo contradijeron. Cuando habla en primera persona “Yo soy el padre”, es difícil entenderlo como uno más con ese derecho; “Yo soy el padre de tu padre”, en cuyo caso “Tu también lo eres”. Él sostiene: “Si tú cumples tu rol y yo el mío no se necesitarán intermediarios, no habrá necesidad de terapeutas”. Esta desaparición de un altanero yo aislado e 36

individual en la profunda inserción en una cadena de yoes con iguales y únicas posibilidades, es difícilmente entendida.

La contradicción entre sus palabras y la fuerza de su magnetismo personal provocarán, con el devenir de los años, terribles escisiones en las que cada uno de los que se conectaron con éste hombre, transmisor de un mensaje de cambio, tomará un solo aspecto del mismo, olvidando la unidad. Moreno le dice a Freud, en la Universidad de Viena: “Yo comienzo donde Ud. termina”; encuentro entre una juventud esplendorosa y un maduro hombre de ciencias, uno de los encuentros fundamentales de nuestro siglo que transforma la secular búsqueda del inconsciente, de dual en unicista, única, con aspectos que se continúan y realimentan entre sí. Moreno continúa en la acción, en el encuentro, en la unidad cuerpo-alma, consciente-inconsciente, tridimensional y multidimensional, perteneciente a una misma conciencia universal planetaria, única. La acción y el verbo son, en esencia, una unidad.

La palabra no es más que las ondas sonoras que, en la acción más aproximada a la perfección, al ser en sí misma acción y conocimiento, vibración y pensamiento, son el vehículo constante del conocimiento de la humanidad – conocimiento inscripto en la unidad psique-cuerpo, gen-raza, género humano en la historia de la especie.

El primitivo Moreno, el de los primeros escritos que revolucionan al mundo psiquiátrico, que lo anatemiza y excluye, grita: “Yo soy el padre, el padre del padre de tu padre... Por lo tanto yo, los otros, tenemos todos y cada uno la totalidad del conocimiento de la experiencia de la humanidad”. Rompe con este grito la prohibición del oráculo de Delfos: conocer su origen real sería para Edipo conocer su poder personal, único, ser hijo del Rey. Son las estructuras de poder de la verdad revelada las que otorgan la posibilidad de ser dueñas de la verdad, las que producen la tragedia, solamente cuando Edipo rompe la prohibición, poniéndose en contacto con 37

sus aspectos femeninos, su intuición, su mundo interior, su reconocimiento de sí mismo, adquiere la sabiduría, conoce su origen y su sentido en la tierra. “Yo comienzo dónde Ud. se detiene”, es implemente la enunciación. “Ud. es parte de la cadena de conocimiento, también yo, continúo aquello que también Ud. continuó”. Eslabones de una cadena, partes complementarias. Todos lo somos.

El conocimiento humano es alcanzable hasta sus últimas consecuencias; todas y cada una de las experiencias de la humanidad en su totalidad se hallan contenidas en nuestros genes, células, vibraciones energéticas. El nuevo camino de aceptación de este conocimiento se abre al integrar la acción, al unir la memoria celular a las representaciones mnémicas, al unificarlas en el primitivo y eterno ritual reencontrado que es en sí mismo el psicodrama.

La creación absoluta, única, universal del principio de los tiempos también se halla presente. La relación del hombre con esa creación es a través de su planeta, parte de ese universo que lo contiene, lo protege y lo amenaza. Los primitivos rituales asimilaron los procesos de la tierra, las estaciones, los mares, el sol, la luna, a la evolución humana – una comprensión unitaria de la creación hacia la unidad del ser y el hacer. Este conocimiento profundo y último está al alcance de cualquier individuo que se disponga a buscarlo dentro de sí mismo. También está a la mano de cualquier grupo humano que, reconociendo esta posibilidad, se disponga – en consonancia con la naturaleza, la matriz social y cultural que lo rodea y el tiempo al que pertenece a encontrar en sí mismo esta unidad, creando un coinconciente que potenciándose y enriqueciéndose con los aportes de todos y cada uno, inscriba un nuevo ritmo a la humanidad.

En este sentido, el psicodrama, como forma natural de expresión del hombre, de sus afectos, de la búsqueda en el misterio de la unión entre el microcosmos humano y el macrocosmos divino, se suma a la arcana línea de todos los movimientos que, en 38

sus comienzos, significaron un cambio cualitativo en la humanidad.

En los rituales tribales de los grupos agrarios de todas las regiones de la tierra, los pequeños grupos jasídicos, los doce hijos de Jacob, los doce discípulos de Cristo, el pequeño grupo de hombres que origina la revolución francesa, la rusa o la independencia americana.

El gran descubrimiento surge de un ser que encuentra el conocimiento, lo comparte con el grupo que lo hace suyo, lo enriquece a partir de su experiencia y comienza la expansión. En este sentido ha sido similar el proceso psicodramático con una característica particular: por primera vez el interés no es sólo el grupo al servicio del conocimiento del individuo y la creación, sino que, el interés fundamental es la especie humana, es el grupo en sí mismo. En él la posibilidad de su crecimiento y evolución, transformándolo en un templo poseedor de una construcción aparente, visible fuera de la tierra, acción, conciencia, más un subsuelo, catacumba, gruta, inconsciente, misterio y ser. Es el grupo el que adquiere las características arcanas, templo y oficiante, protagonista y coro, el que asume en sí las posibilidades de evolución.

En el complejo cuerpo teórico de Moreno pertenecen al área terapéutico, la psicoterapia de grupo y el psicodrama; a la investigación social, el Sociodrama y la sociometría; la teoría de los roles ha sustentado la Psicología evolutiva; la creatividad y la espontaneidad han sido parte integrante de este cuerpo de ideas y de acción. La totalidad, inscribiéndose en la línea de la evolución de la humanidad, conforma una unidad donde cada pequeño grupo contiene la matriz individual de cada uno de los integrantes y la matriz grupal es conformada entre todos; ambas están en relación con la matriz social que los contiene, y va a expresarse a través de los roles ejercidos por cada uno de los miembros según la creatividad y la espontaneidad que el interjuego permita. Por medio de esta interrelación y de su accionar cada grupo expresa necesariamente un nivel consciente claro, en relación directa con su 39

coinconsciente arcano, representante de la especie en evolución y, a su vez, representado por sus individuos.

Nos hemos encontrado, hasta ahora, con un Moreno que se plantea con igual intensidad “Yo soy el padre, en mí, en ti está el germen de la creación”, al mismo tiempo que su propia desaparición como individuo, para ser uno más dentro del concierto de seres del universo. Esta posición coherente y extrema produce temor. Al igual que en los primitivos hechiceros, la identidad entre pensamiento y acto es total y lograr el cambio cualitativo es fundirse en él, en un hambre de actos donde la acción creativa consume completamente la energía que la produjo. Aquí encontramos los orígenes arcaicos del psicodrama. El psicodrama, en su inicial planteo –psicosociodrama- se ubica en relación con un hombre, ser unitario – psique, cuerpo, pensamiento y acto – vincular, en acción y, como tal, en cambio, rescata la necesidad de expresiones en el aquí y ahora, en “status nascendi”, impidiendo la cristalización y su utilización por las estructuras de poder que niegan la posibilidad del conocimiento individual y grupal en un camino de iniciación y autoconocimiento.

De la mano de Moreno caminamos hacia el cristianismo antes de su institucionalización, hacia los orígenes del teatro antes de su cristalización en tragedia, hacia los pueblos nómades del desierto del Sinaí hasta llegar al grupo que acompaña el baile del brujo cuando se necesita la lluvia.

Recrea en el psicodrama un vehículo de expresión sociopsíquica que surge como emergente de un momento socio-político, cultural y religioso de una Europa que necesita desesperadamente canales de comunicación y encuentro, y, cuya ausencia llevará, finalmente, a la guerra de mayores dimensiones que haya conocido el planeta.

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Pero, este renacimiento de las expresiones más arcaicas del hombre, como algunos otros, es expulsado fuera de Europa y no es casual que sea América quién lo recibe: América, con su tradición de peregrinos, cuya sobrevivencia dependía de su grupabilidad y de su confianza en la trascendencia y sus tribus nómades indígenas, escondidas en lo recóndito de su nacionalidad.

La sociedad Norteamericana, que reverencia y admira la técnica, la ciencia práctica, enfrenta a Moreno con un dilema, y una elección, entre quién escribe las Palabras del Padre, el teatro de la espontaneidad, los cuentos para los niños de los parques de Viena y rescata los orígenes más profundos de la expresión humana y el médico científico que, casi por casualidad, ha descubierto el efecto terapéutico del grupo y la acción. Su arte de curar le hace aceptable y elige este camino adaptándose a las circunstancias.

Sus comienzos, igualmente, no se olvidan y persisten en sus sociodramas y en sus psicodrama públicos.

Queda explícito, claramente, en su Teatro Psicodramático, en forma de anfiteatro griego, con un escenario circular que –al contrario de aquel- ubica a los actores más alto que a los espectadores, que posee la estructura de círculos concéntricos, pertenecientes a los diferentes niveles de conocimiento, cuyo escenario central puede ser dividido en doce segmentos de iguales dimensiones que, al ser extraídos del mismo, conforman diferentes figuras vinculares como la Cruz templaria.

Esta estructura es, simbólicamente, la estructura de Magnesio, ciudad ideal de Platón. Las columnas que sostienen el balcón de la trascendencia, de los dioses, si lo colocamos en forma vertical, corresponde a la simbólica estructura de los arcos de las catedrales góticas, que contiene en su herradura superior la estrella de David y la Cruz del Temple, conjunción que simboliza la unidad. Vemos así que, como en los tiempos de los iniciados maestros y artesanos de la edad media, el secreto símbolo 41

de la unidad está expresado a través de la construcción y de la acción.

Sus claves nos hablan de los secretos de la evolución del movimiento psicodramático. Es, tal vez, el puente que nos aproxima a comprenderla. El creador del psicodrama y –por ende- su creación, tiene aspectos diversos: el terapéutico científico y técnico y el de su expresión de la más honda y profunda problemática humana, la relación entre el hombre y el cosmos.

Es un ritual más en esta América poseedora de los rituales de los pueblos nómades indígenas que, en su deambular, se relacionaban profundamente con la tierra, con la naturaleza, como expresión maravillosa, única de la creación; así, cada protagonista, es expresión única de la totalidad.

Este renacimiento de la confianza en la creación y en la evolución del ser humano, ubica al Psicodrama en la posición de cualquier movimiento revolucionario que confía en el grupo pequeño para lograr un cambio.

A través de este concepto el movimiento psicodramático extiende sus redes y establece sus vínculos.

Sabemos, entonces, que en el cuerpo teórico de Moreno la psicoterapia de grupo es el instrumento terapéutico; el psicodrama y el Sociodrama son expresión ritual del hombre, que, como el arte y el teatro, en sus comienzos, hablan del hombre como co-creador de sí mismo y de su mundo. Este aspecto –el más negado en su desarrollo, el más combatido en sus comienzos de manera oscura, no reconocida- es el que ha estado presente constantemente en el desarrollo del movimiento psicodramático.

El Moreno que escribe las Palabras del Padre, construye un simbólico teatro que, es, a su vez, origen y resultado de su propia creación. 42

Cada uno de los aspectos de esta creación es tomado por diferentes escuelas o individuos y desde allí se enfrenta con los otros, cada uno de ellos es sólo un emergente de la resultante entre su propia individuales y el medio socio-culturalpolítico al que su pequeño grupo pertenece y, al desconocer esta realidad, actúa de las más diversas y arbitrarias maneras, incluyendo a su creador; constituyendo una red vincular con enorme dificultad para considerarse como grupo, como movimiento, parte de la humanidad en evolución y con la posibilidad de auto-observación de autoreflexión.

El movimiento de grupos queda casi en sus comienzos, dividido entre dos líneas fundamentales representadas por la psicoterapia de grupo y el psicodrama o la terapia de acción. Desde un comienzo el movimiento de grupos que utiliza con toda solvencia su instrumento para los grupos que dependen de él no puede ver en esta – su primera división- la eterna división de la humanidad que expresa la dualidad universal mal-bien – ying yang, consciente-inconsciente, pensamiento-afecto, palabras-acción, y no logra encontrar la unidad estructurada por estos aspectos complementarios entre sí y se expresa por los enfrentamientos, sin tomar su propio grupo como emergente con aspectos concientes ideológicos y aspectos arcaicos no conscientizados.

Así es como la psicoterapia de grupo tiene alguno de sus más eximidos pensadores en el Viejo Continente, en el Reino Unido y encuentra rápida cabida en los ámbitos de la ciencia psiquiátrica. El psicodrama da sus primeros pasos en los Estados Unidos en una ardua lucha por incluirse en la psiquiatría y, en esta lucha pierde su ubicación arcana y simboliza su lugar social olvidando el cuidado para con los que lo ejercen. Olvido que –en su expansión por el mundo- se perpetúa.

En Europa comienzan los primeros congresos internacionales del mismo con gran éxito pero separados de sus hermanos los psicoterapeutas de grupo.

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Buenos Aires, en 1969, realiza un cambio cualitativo en cuanto a esta situación.

El Congreso que tuvo lugar en este mismo ámbito se denomina V Congreso de Psicodrama y I Symposium de Psicoterapia de Grupo. Es un instante fundante; la dualidad intenta un encuentro, rompiendo las reglas del juego que, hasta ese momento, habían logrado la sobrevivencia del movimiento. Denomino movimiento a los múltiples grupos pequeños o grandes, institucionalizados o no, que tienen un interés común: el de los grupos y sus expresiones.

En aquel momento al romper una norma establecida, no teniendo en cuenta la división entre terapeutas de grupos y psicodramatistas, la totalidad del movimiento sufre una modificación. Su creador debe permitir nuevamente la entrada en su mundo de aquellos que se alejaron y debe reaceptar al hijo pródigo, gesta no siempre posible.

Esta modificación proviene de un área geográficamente aislada, no poderosa en el concierto de las naciones. Sin ninguna duda debía ser aquí, en el Sur, donde se rompiera la norma de división casi racial: nuestro origen es multirracial y transcultural, nuestra sobrevivencia depende de un fino equilibrio entre esta tendencia y las tensiones internas que nos dividen.

La distancia nos obliga a recibir conocimientos de diversos orígenes, procesarlos y unificarlos, así como primitivamente debimos unirnos para defendernos de la naturaleza y de la soledad. En aquella situación dimos un atrevido paso hacia el cambio en una acción consciente y madura.

Otro aspecto de nuestra acción pertenece al subsuelo del templo, a las catacumbas.

Si el grupo conformado por los psicoterapeutas grupales fuera tratado como grupo emergente descubriríamos en sus motivaciones profundas y arcanas las resonancias 44

entre este grupo y su matriz social y sería posible utilizar este conocimiento.

El grupo de psicoterapeutas está integrado por individuos sobrecargados de tensión e información, el de psicoterapeutas de grupo aún más, si consideramos a cada uno de nosotros en la posición de una pirámide formada por personas con relación a nosotros, podemos decir que, si nos ubicamos en el vértice hacia la base, aumenta la cantidad de seres que están con relación a nosotros y nos sostiene, si, por el contrario, invertimos la posición toda esta pirámide se apoya en nosotros compartiendo sus tensiones, información, temores, etc. parte de las cuales, como en un iceberg, pertenece a lo oscuro y escondido. Todo esto coloca a este grupo particular en una posición en la cual sus acciones, impulsadas por sus razones profundas suele anticipar las acciones de otros grupos sociales.

El grupo del sur argentino-brasilero, es un grupo numeroso, fuerte, con una gran vitalidad y deseo de expansión, se atreve, en 1969, a romper una norma establecida, la división entre psicoterapeutas de grupo y psicodramatistas. Aún y más si realmente nuestro grupo es emergente de una situación social existente ayudar a esta consolidación es hacer peligrar estructuras de poder, sobrepasar los límites del movimiento y nuevamente nos encontramos con la ignota posibilidad de expresión de lo desconocido y por medio del conocimiento profundo de los grupos humanos, esta unificación está planteada a partir de la parte del movimiento de la psicoterapia de grupo que ha estado siempre luchando por el reconocimiento en el área de la ciencia psicológica, el psicodrama.

Las tensiones sociales y la incomprensión de nuestra posición y el poco auto-estudio nos impidió ver que lo que habíamos logrado, en un momento, en el cual el país pasaba por una de sus habituales difíciles situaciones institucionales con un gobierno militar y autoritario –debía ser cuidado para que prosperara y evolucionara hacia la maduración.

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Esta proeza realizada por los psicoterapeutas de grupos, anticipa en el tiempo, en pocos años, al movimiento político que logra la democratización posterior del país, pero, ambos son de poca duración.

En 1970, se realiza el próximo Congreso, en el Brasil, con gran éxito el movimiento conjunto de psicodramatistas argentinos y brasileros está consolidando sus vínculos, pero, es el primer congreso al que Moreno no asiste.

Es, acaso, que el paso había sido demasiado atrevido: lograr la unidad en Latinoamérica es permitir un poder y una fuerza que no es fácilmente aceptado, pero, sin embargo –hasta ese momento- lo estábamos logrando. El próximo Congreso se haría fuera de las áreas tradicionales –en Japón y quedaría uniformemente repartido en el mundo. El movimiento psicodramático, que se iniciara con enorme poder en los Estados Unidos durante y post guerra y se extendiera a Europa se equilibra, en ese momento, en el norte y el sur, el Atlántico y el Pacífico.

¿Contra que arcanas prohibiciones lucha esta red de personas centradas en los vínculos y los afectos?. Los componentes de esta red son personas que, arman pequeños grupos, que poseen un instrumento maravilloso de comprensión de los fenómenos grupales, pero, no lo utilizan para sí mismos y sus grupos se expresan sin distancia entre pensamiento y acto.

Con posterioridad al congreso brasileño, en el año siguiente, el movimiento psicodramático escribe en sus anales su más triste historia, un grupo de psicodramatistas argentinos por razones éticas y/o ideológicas dividen ese movimiento, que había logrado sus dos triunfos anteriores. Tomando la total responsabilidad de mi participación en esta pasada división, considero que aún permanece entre nosotros.

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No percibimos, en aquel entonces, que nuestra encarnizada batalla precedía, en realidad, a la más sangrienta lucha entre hermanos que poco tiempo después se estableciera en el país. Moreno –puesto en conocimiento del caso- tomó partido. Veinte años después me pregunto ¿éramos los psicodramatistas argentinos, en aquel entonces, niños hermanos en búsqueda de la aprobación o reprobación de un padre?, ¿a qué obedeció?. Tal vez no importa, pero creo que importa la persistencia de la no

maduración. Porque si, en aquel momento, no fuimos capaces de reflexionar y darnos cuenta de cuáles eran las motivaciones profundas de lo que ocurría y prever lo que surgiría posteriormente en la matriz social, no hacernos cargo de esta situación

en

la

actualidad

sería

negar

conscientemente

nuestros

propios

conocimientos.

Detuvimos con esta acción, nuestro propio crecimiento y, lo que es más grave aún, no cumplimos con aquello que, desde el comienzo, está en la matriz arcaica del psicodrama: ser mediadores entre el microcosmos humano y el macrocosmos social planetario universal en el camino de la evolución. Este descenso hace que aquel crecimiento que había unificado al sur, al norte, al este y al oeste se detenga. Al permitir que nuestro enfrentamiento traspase los límites de nuestras fronteras logramos la intervención equivocada de aquel que, habiendo creado un instrumento de enorme valor para la humanidad, lucha en la institucionalización con los juegos del poder y, sin prescindir de los mismos, no ocupa el lugar de un conocedor de los movimientos grupales y toma posición personal.

Esta acción sancionadora desde el norte tendrá tal vez características proféticas: anticipa, en su actuar, el impensado enfrentamiento bélico norte-sur. Esta fractura, que invade a todo el movimiento psicodramático, dificulta la consecución posterior del Congreso que debía tener lugar en Japón, que sufre grandes trastornos. Con 47

posterioridad al mismo se suspenden los Congresos Internacionales de Psicodrama y queda limitada a los de psicoterapia de grupo la participación de psicodramatistas.

No todo está perdido, sin embargo.

En 1974, muere Moreno. Creo que desde su muerte hasta la actualidad su presencia acompañó la reconstrucción del movimiento y juntos hemos luchado para la integración total. Debemos elaborar su muerte, la muerte de un padre amado y odiado que nos dice que, en cada uno de nosotros está presente el Padre, la creación y que los psicodramatistas debemos separarlo de su persona.

. Con gran éxito, y, por primera vez en años, estamos todos juntos, la comunidad de psicoterapia de grupo, en su totalidad; coincide con un momento alegre, feliz: el comienzo de nuestra democracia; se ha superado la noche negra.

Juntos hemos puesto hombro con hombro y luchamos por este encuentro que, a pesar de ofrecer una excelente imagen de unidad hacia fuera –no logra, sin embargo, unificar al movimiento, que vuelve a fragmentarse anticipando nuevamente –en su acción- el devenir de grupos políticos y sociales, sin llegar, ninguno, a la intensidad de la lucha anterior.

En el concierto internacional se lleva a cabo el Congreso de Zagreb, por primera vez en los países del este nuevo camino que se abre. En un Encuentro de psicodramatistas “Morenianos”, llevado a cabo en Catholica, Italia –después de grandes luchas- el último protagonista presenta, al abuelo, los hijos ilegítimos y éste los acepta. Es allí dónde aparece la invitación al próximo encuentro en Barcelona, hecho desde el psicodrama psicoanalítico.

La rueda de la vida continúa... y, el año pasado, el movimiento de psicoterapia de 48

grupo realiza uno de los encuentros más profundos, sin enfrentamientos de ningún tipo –ni teóricos, ni ideológico, ni racionales ni técnicos – en la ciudad de Tokio. Este “Pacific Rin” muestra la unidad entre el ejercicio de una tarea y la aplicación de la misma en la vida y en la consecución de objetivos; es la muestra acabada de la identidad del ser y el hacer.

Tokio- Mónica Zuretti, Adam Blatner y dos colegas japonesas –

Nuevamente del norte, el sur, el este y el oeste se han vinculado y llegamos a este Congreso festejo de los 25 años de la Asociación que nos convoca. No estamos presentes en él la totalidad del movimiento psicodramático argentino, algunos de aquellos enfrentamiento permanecen aún. Aquí comenzó el rompimiento y aquí debe darse la curación, teniendo en cuenta que cada expresión de este grupo, conformado

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por muchos pequeños grupos que constituyen una red dentro de una matriz social, es una acción vincular consciente, que responde a un ser arcano profundo, un coinconsciente representante, a su vez, de la totalidad social; como dije al comienzo de mis palabras, sólo cuando todas las matrices coinciden, se encuentra la unidad.

Quiero compartir con ustedes lo siguiente:

Hace no mucho más de un mes murió mi padre y como regalo en el momento de su partida, me dejó la enseñanza más profunda. Sólo cuando uno está en paz con todos los vínculos de su vida se pueden realizar cambios cualitativos, como la muerte, con alegría.

Hoy, agosto de 1988, en la ciudad de Buenos Aires, tomo este mensaje que viene de mi más profunda intimidad para dirigirme, personalmente y en nombre del movimiento psicodramático, al Japón, presente en la persona del Prof. Matsumura y de la secretaria de la Asociación de Psicodrama de Japón, para pedirles disculpas por las dificultades que nuestro enfrentamiento, les causara años atrás y agradecerles su presencia hoy, aquí. A los psicodramatistas brasileños, especialmente, al Dr. Correa Soeiro –quién fuera presidente del Congreso de Psicodrama Brasilero- por los inconvenientes que esa misma ruptura les generara y agradecerles la enseñanza que ellos nos dieron al superarla y crecer libremente.

A Roberto de Inocencio, por habernos permitido elaborar con él la perdida de su padre, mi padre, nuestro padre, en el 80, en Copenhague, abriendo la posibilidad de hacer nuestro el mensaje yo soy el padre, y asumir nuestras responsabilidades.

Al Dr. Rojas Bermúdez, mi reconocimiento por la fuerza y el cuidado que puso en la reconstrucción de la parte del movimiento que quedó a su cargo, esperando que todo 50

enfrentamiento anterior quede superado.

A Moreno, para expresarle mi más profundo agradecimiento como maestro; para pedirle disculpas por las veces en que mi posición personal o mi ideología se antepuso al mensaje y para disculparle por la confusión en que a veces, sus actitudes personales contradictorias me produjeron. A los psicodramatistas presentes y ausentes, argentinos y extranjeros –entre los cuales cuento algunos de mis más caros amigos- les pido disculpas por no haber podido aún, junto con ellos, entender nuestra misión y zanjar las diferencias que nos separan y para pedirles, también, que luchemos para lograrlo en un futuro.

A los psicodramatistas jóvenes, perdón por haberles ensombrecido la fiesta con historias de viejos o con viejas historias. De ustedes, los jóvenes, es el futuro. Han nacido psicodramáticamente de maestros que lucharon y se enfrentaron, muchas veces, al igual que los hijos de la lucha que destrozará al país. Les queda a ustedes la posibilidad de que, amando a todos los bandos, inscriban en el mundo, un nuevo camino de unidad.

Hoy en el país, el tiempo de lucha extrema ya se cumplió, la denuncia de la misma ya tuvo lugar, los que se fueron la llevaron hacia afuera, los que se quedaron la protagonizaron dentro de nuestras fronteras.

Los hijos de estas luchas son los que están en juego.

Los que tuvieron que irse del país pueden decir ¿por qué nos abandonaron?.

Estamos frente al momento más crítico de nuestra historia que ha repetido cíclicamente enfrentamiento y muertes. Hasta llegar al extremo de hijos que reconocen y aman a padres adoptivos que, tal vez, participaron en la muerte de los 51

padres reales, a los que también aman. Será un camino demasiado doloroso y duro el que tendrán que realizar. Estos son hoy nuestros hijos, nuestra juventud. Si el movimiento psicodramático alguna vez dramatizó –como emergente grupalsituaciones sociales debemos cuidarnos, en el aquí y ahora, de no repetirlas y, en cambio, ayudar para el encuentro –en el camino del cuál nos hallamos. El futuro inmediato –octubre del corriente año- es un Congreso en Brasil, que abre sus puertas nuevamente al grupo internacional. Se realizará en honor de Leonardo Satne, uno de los ausentes, en el mismo lugar en que se realizara el primero, a cargo del Dr. Ramón Sarró, en Barcelona.

El ciclo parece haberse cumplido. ¿Cuál será el recomienzo?.

52

2.3 EL PSICODRAMA EN LA ARGENTINA* Mónica Zuretti

*La inclusión de este artículo escrito en los 80’ tiene la finalidad de comunicar los orígenes de nuestro movimiento. Han pasado 30 años y muchos de los profesionales mencionados en él ya no están, pero consideramos importante que quienes continúen conozcan este rico período creativo” Mónica Zuretti

El Psicodrama como método psicoterapéutico es utilizado en la Argentina desde comienzos de la década del sesenta.

Ha sido un largo proceso que en sus albores priorizaba el acto dramático dándole categoría de acto terapéutico, siguiendo una modalidad iniciada por Moreno.

Así se hicieron en Buenos Aires, las primeras experiencias de psicodrama público en el año 1962, teniendo a los Doctores Mauricio Abadi, Carlos Martínez Bouquet, Fidel Moccio, Jaime Rojas Bermúdez y Eduardo Pavlovsky como pioneros en una tarea ardua, difícil y resistida en nuestro medio.

Estos fueron intentos experimentales que muy rápidamente dejaron lugar a la investigación y la utilización del psicodrama no como un acto terapéutico, sino como un proceso psicodramático dentro del proceso grupal terapéutico.

Esta concepción del psicodrama es común en la actualidad a todos los arriba mencionados, que continuaron, en forma conjunta algunos y separadamente otros, con su tarea psicodramática.

53

Se sumaron luego al movimiento otros psicodramatistas entre ellos los Dres. Dalmiro Bustos, José Echaniz, Gastón Mazieres, Jorge Barlonini, Jorge Rinavera, Silvana Puzzovio, Carlos Quintana, Roberto Losso, Nélida Sakalik de Montagna y Mónica Zuretti.

En la Sociedad Ontoanalítica Argentina se formó un grupo de estudios psicodramáticos liderado por el Dr. Carlos Menegazzo y en el Hospital J.T. Borda el Dr. Jorge Saurí comenzó en la sala dirigida por el Dr. Melgar un grupo de psicodrama con psicóticos.

El crecimiento del psicodrama en Buenos Aires coincide con el primer Congreso Internacional de Psicodrama realizado en París en 1964.

El IV Congreso Internacional de Psicodrama tiene lugar en Buenos Aires en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, con la presencia de 1.500 personas y la de J.L. Moreno como Presidente Honorario y Z.T. Moreno como Vicepresidente Honorario, como Presidente se designó al Dr. Jaime Rojas Bermúdez.

A partir de ese momento, individualmente, en pequeños grupos o en instituciones se prioriza la tarea de investigación teórico-técnica del psicodrama.

Así surgen las diferentes corrientes de pensamiento psicodramático que se hacen evidente si observamos la presentación de psicodramatistas argentinos al VII Congreso Internacional de Psicodrama y Psicoterapia de Grupo realizado en la Universidad de Copenhaguen en 1980.

La interpretación del fenómeno psicodramático es hecha por las diferentes escuelas a partir de sus propios marcos referenciales.

54

Encontramos así, dos grandes líneas:

El psicodrama moreniano que posee como esquema referencial el pensamiento de Moreno, profundizar e investigar a partir del mismo, aún cuando los que participan en esta línea posean formación en otras disciplinas terapéuticas.

El psicodrama

psicoanalítico

interpreta el

psicodrama

desde

el encuadre

psicoanalítico y utiliza este esquema referencial.

Al tratar de hacer una breve reseña de estas líneas de trabajo, pido disculpas por cualquier error de interpretación sobre las mismas, a la vez que reconozco no cubrir con este comentario todo el quehacer psicodramático pasado y presente, pues necesitaría una larga recopilación e investigación que espero poder realizar más adelante.

Dentro del estudio del pensamiento de Moreno encontramos que el Dr. Dalmiro Bustos, desde el Instituto de Psicodrama de La Plata, ha trabajado sobre los conceptos de sociometría considerándola una teoría fundamental para la comprensión de la estructura y el proceso grupal, así como de la psicopatología individual a partir de la posición sociométrica. “A través de la comparación entre el test sociométrico objetivo y el perceptual, podemos ir del nivel interpersonal al intrapersonal y construir un diagrama de personalidad basado en el manejo, de cada persona, de los signos sociométricos” (Bustos, 1980).

Su modalidad de trabajo es la terapia psicodramática que da suma importancia a la verbalización y denomina “mecanismos de acción”, la catarsis de integración, el inside dramático y la verbalización.

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Los Dres. Mónica Zuretti y Carlos M. Menegazzo en el Instituto de Psicodrama de Buenos Aires han centrado su trabajo en otros aspectos de la teoría de Moreno. El grupo es para ellos “una estructura sociométrica que ofrece una matriz psicoterapéutica en donde se podrán modificar o desarrollar roles que han sido estructurados en cada individuo en las sucesivas matrices, de identidad, familiar y social con dificultad y que encontrarán en esta nueva matriz aquellos elementos que se perdieron o no hubo en las anteriores” (Zuretti, Menegazzo, 1981).

Para lograr este proceso de cambio recurren al psicodrama como método e instrumento terapéutico. En el proceso psicodramático será piedra fundamental el hallazgo de “Escenas Nucleares Conflictivas”, (Menegazzo, 1979). “Construcción dramática, mito, que tomando el lugar de una o muchas escenas transcurridas en la realidad del paciente, pero teniendo una estructura propia y única, se desplegará sobre el escenario y será recreada para la comprensión vivencial de aquellas que la originaron, permitiendo al Protagonista por medio de una “Catarsis de integración” y de la comprensión que se dará en la misma, una modificación en sus roles y en la percepción de aquellos otros significativos que poblaron su átomo social perceptual” (Zuretti, 1979).

En la Asociación Argentina de Psicodrama y Psicoterapia de Grupo el Dr. Jaime Rojas Bermúdez ha desarrollado el concepto de Núcleo del Yo. “Llamo Núcleo del Yo a la estructura resultante de la integración de las tres Arcas” (Enrique Pichón Riviére). “Mente, Cuerpo, Ambiente con los tres roles psicosomáticos, ingeridor, defecador, mingidor”. (J. Rojas Bermúdez, 1978).

En el trabajo con psicóticos realizado en el Hospital Nacional J.T.Borda 56

“...descubrimos que los títeres eran un recurso válido como vehículo de comunicación, con un primer paso para reconectarlos con su medio social. Investigando en esta dirección, creamos el concepto de objeto intermediario y el de la estructura gráfica y teórica de la personalidad llamada Esquema de Roles” (J.Rojas Bermúdez, 1980).

En esta investigación contribuyó con su maestría y dominio del mundo de los Títeres, el Sr. Ariel Bufano.

Dentro de las experiencias hospitalarias, merece ser destacada la realizada en el Centro de Salud N°1, A. Ameghino de la Municipalidad de Buenos Aires, donde funcionó un servicio de atención Psicodramática desde 1970 a 1976 que no solamente brindó asistencia terapéutica a grupos de adultos, adolescentes, familias y parejas, sino que además realizó el entrenamiento de un grupo de profesionales en el método psicodramático a nivel hospitalario, con la dirección del Dr. Carlos Menegazzo.

El psicodrama psicoanalítico ha logrado un amplio desarrollo en Buenos Aires.

El Dr. Carlos Martínez Bouquet es dentro de ésta línea, su principal exponente, habiendo realizado una importante tarea docente. Su trabajo “La teoría de la escena”, señala que encontramos “una escena manifiesta (dramatización) y una escena latente o escena imaginaria que brinda la estructura dramática y está por debajo”. “De este modo, la dramatización revela la escena imaginaria.

Pero esta escena imaginaria existe también fuera de la situación psicodramática y esta estructura dramática está por debajo de toda situación interpersonal incluido el grupo psicoterapéutico y la relación bipersonal analítica. Esta estructura consiste 57

básicamente en caracteres imaginarios interrelacionados entre sí por puentes aferentes (afectos) y eferentes (impulsos). Las personas que configuran un grupo, contribuyen inconscientemente a crear esas escenas imaginarias” (Carlos Martínez Bouquet, 1980).

Sobre

el

problema

de

la

contratransferencia

del

coordinador

de

grupo

psicodramático, encontramos el concepto de la “Escena Temida” (Hernán Kesselman, Eduardo Pavlosky, Luis Frydelevsky, 1978) quienes plantean que “todo coordinador de grupo debe aprender a entrar y salir grupalmente de sus escenas temidas, siendo éstas representaciones de diversas situaciones conflictivas del quehacer profesional del coordinador de grupo y que consuenan con la historia de su vida personal”. Olga Arbizuri de García, (1980), sostiene que “la transferencia múltiple en grupos somete al terapeuta a presiones que requieren de un profundo auto conocimiento alcanzable por su autoanálisis y supervisión. Este conocimiento puede ser aumentado por medio de la investigación de la contratransferencia en grupos de entrenamientos con psicodrama psicoanalítico”.

En el campo del tratamiento de pacientes psicóticos el psicodrama psicoanalítico fue utilizado por el Dr. Bernardo Kononovich en el Hospital de Día del Hospital J.T. Borda, en una experiencia de “psicodrama comunitario” “Llamamos a nuestro psicodrama “comunitario” por la función que le otorgamos y por la inserción que le destinamos dentro de un modelo asistencial integrador”. (Kononovich, 1980).

El psicodrama en el tratamiento de parejas se aplica desde distintos esquemas referenciales.

El Dr. Roberto Losso y la Lic. Ana Packiarz, utilizan el psicodrama psicoanalítico en el tratamiento de parejas considerando a este como una técnica rica para develar 58

escenas internas latentes en los integrantes que constituyen una “...complicada trama de interacciones que da lugar a la constitución de un grupo pareja al que cada individuo aporta su propia dimensión dramática, pero que a partir de esa compleja trama interaccional se constituye una nueva dramática o dramática de pareja” (Losso-Packiarz, 1980).

La Licenciada Liliana Fasano y el Licenciado Jorge Pomidoro trabajan en el diagnóstico de la pareja, utilizando técnicas dramáticas en sesiones de dramatización juegos

dramáticos

programados

“...los

terapeutas

realizan

un

trabajo

de

sistematización de datos centrado en el estudio del grado de desarrollo de roles” (L. Fasano y J. Pomidoro, 1980).

Con la integración de diversos recursos psicodramáticos la tarea del Dr. Fidel Mocio se centra en el taller de terapia expresiva, donde el psicodrama y el arte en sus distintas expresiones se suman en la tarea terapéutica. El Dr. Claudio Rud y la Licenciada C. Quiñónez definen a la “dramatización desde la perspectiva de lo figurado como: el procedimiento de realización (en el sentido de hacerse real) de la metáfora del discurso terapéutico; la conversión de la metáfora palabra en metáfora acción, dentro de un espacio metafórico que es el escenario” (Quiñónez y Rud, 1980). La interpretación dada al psicodrama por el Dr. P. O’Donnell, parte de la lectura psicoanalítica lacaniana.

Dentro de estas diferentes líneas de trabajo, apenas esbozadas, se realiza una intensa tarea de formación de psicodramatistas, ya sea en psicodrama moreniano o psicoanalítico, habiendo aumentado considerablemente el número de terapeutas que hacen psicodrama o utilizan técnicas psicodramáticas, constituyendo actualmente una vertiente importante del quehacer psicoterapéutico argentino. 59

Hubo en el pasado grandes luchas y enfrentamientos personales o ideológicos, pero se ha alcanzado actualmente una madurez que busca y facilita el intercambio entre las diversas escuelas, lo que llevará sin duda a un enriquecimiento mayor de todas ellas.

Este año, 1981, ha comenzado a funcionar la Sociedad de Psicodrama que tratará de desarrollar estos objetivos. Han transcurrido casi veinte años de las primeras tentativas psicodramáticas argentinas.

La información para este trabajo fue obtenida a través del Centro Bibliográfico del Instituto de Psicodrama Buenos Aires.

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La Dra. María Mónica Zuretti, reside y trabaja en Buenos Aires, Argentina Formación: Es médica, egresada de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires. En 1968 obtuvo una beca en el Moreno Institute, World Center of Psicodrama, New York University, Nueva York. Allí realizó sus estudios bajo la dirección del Dr. J.L.Moreno y se graduó como Director de Psicodrama. Es co-fundadora del Instituto de Psicodrama Bs.As. se dedicó al training psicodramático de post grado desde 1977 a la fecha. Es actualmente Directora del Centro de Sociodrama y Psicodrama “Zerka T. Moreno”. Desde 2004 es docente principal del Curso de Postgrado de Psicodrama Clínico, de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires. Desde 1969 ha participado de múltiples congresos internacionales. Es autora de numerosas publicaciones, entre las cuales se encuentran:: 1991 - “El color de la mezcla”-Editorial Docencia; 1988–“Sangre, Odio y Amor. Sociodrama en América”. Editorial Docencia, Bs. As; 1983 – “Psychodramatic Work Through the Social Perceptual Atom”. Instituto de psicodrama, Bs. As; 1982 – “Escenas, Sueños y psicodrama”. Mónica Zuretti y otros. Colección “Encuentro”. Editorial Docencia, Bs. As; 1982 – “El Psicodrama, Aportes a una teoría de los roles”. Mónica Zuretti y otros. Colección “Encuentro”. Editorial Docencia, Bs. As; 1981–Coordinadora de la “International Net of Cientific and Bibliographical Interchange” entre miembros de la International Association of Group Psychotherapy;1970/1975–Contributing Editor del “Group Psychotherapy and Psicodrama Journal”.

[email protected] / [email protected]

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3 ALGUNOS CONCEPTOS FUNDAMENTALES

62

3.1 Acto creador A partir del acto creador del nacimiento que modifica una estructura de funcionamiento corporal, el niño, completamente dependiente, debe recurrir a todo su caudal de espontaneidad para estructurar sus roles psicosomáticos en relación directa con cada función fisiológica.

El crecimiento es una larga sucesión de actos creadores que llevan hacia la independencia.

Cuando un niño respira por primera vez instituye mediante este acto creador un nuevo modo de ser, se modifica para adecuarse a su nuevo medio.

En el acto fundante de su primera respiración surge el rol psicosomático de respirador y la actitud básica de posibilidad de cambio.

El desarrollar en las cinco etapas descriptas por Moreno el rol de ingeridor, en directa relación con el defecador tan imbricado con el anterior que constituyen un solo rol inseparable, el niño experimenta con las actitudes básicas de recepción y dación y sus

derivadas:

aceptación

rechazo,

complementación

oposición,

conexión

aislamiento.

Los límites y posibilidades de descubrimiento del otro los adquiere por medio de su rol contactador alimentado por las sensaciones de su piel, por su aprehensión táctil, etc., que le informan de la presencia o ausencia de los que lo rodean. De la estructuración de este rol surgirá la actitud de ternura violencia con todos sus derivados en el factor afectivo.

Moreno describe para el rol ingeridor cinco etapas en su desarrollo que pueden hacerse extensivas a tres otros roles psicosomáticos: 63

Primera etapa: Indiferenciada. El niño y la madre forman un todo indivisible.

Segunda etapa: Diferenciada El niño diferencia algo diferente de sí (primera sonrisa)

Tercera etapa: Diferenciación de uno o muchos terceros.

Cuarta etapa:

Centrarse sobre sí mismo.

Quinta etapa:

Inversión de roles.

En las tres primeras etapas la posibilidad de espera es inexistente o mínima. La posibilidad de complementarlas es exclusivamente la sedación en el rol de contactador ofreciendo el contacto.

El asombro, la agresión y el pasaje a la desesperación ante la falta es tan rápida que es muy difícil diferenciarlas y se juega la posibilidad de sobrevivir o se presenta como salida el cierre en la fantasía y la locura.

Hay roles como el respiratorio y aún el de ingeridor que no tienen casi ninguna posibilidad de espera: el de contactador admite una cierta dilación y la complementación desde otros roles.

Las dos etapas finales, la de centrarse sobre sí mismo y la de inversión de roles introducen la posibilidad de autorrealización y mediatización.

Estas acciones psíquico-corporales pondrán en funcionamiento todos los roles psicosomáticos, (respirador, contactador, etc.) que serán abordables en el escenario en estadios muy primarios de su desarrollo, en la matriz de identidad total 64

indiferenciada, o en los comienzos de su indiferenciación cuando aún no admitían posibilidades de simbolización. Para trabajar con ellas se utilizan técnicas de concreción.

Los roles que se desarrollan a partir de otras funciones fisiológicas como (ingeridor, defecador, mingidor), salvo en situaciones muy extremas, se juegan en un estadio posterior perteneciente a la matriz de identidad total diferenciada o a la matriz familiar, cuando ya ha tenido lugar la brecha entre fantasía y realidad y se admite la simbolización.

Los roles sensoriales a distancia de surgimiento más tardía, en el proceso de hominización, permitirán un juego entre ambas situaciones.

La posibilidad que brinda el psicodrama de trabajar corporalmente

con roles

psicosomáticos permite acceder a momentos muy primitivos en la estructuración del yo de un Protagonista. Un programa psicodramático bien desarrollado posibilitaría llegar paso a paso a escenas nucleares conflictivas pertenecientes a la matriz familiar o social y reestructurar por medio de la investigación y creación dramática los vínculos y roles que a ellas pertenezcan, reestructurando mitos que podrán ser modificados.

Los roles jugados en el escenario son repetición de aquellos desempeñados en la vida, pero en la medida en que se juegan se van recreando en los tres niveles: imaginario-afectivo y simbólico, por lo que consecuentemente se reinscriben con características diferentes, aumentando las posibilidades de expresión creativa y espontánea facilitando la vinculación.

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Bibliografía Menegazzo, Carlos: “La escena nuclear conflictiva”, Buenos Aires, 1979.

Moreno, J. L.: Psicodrama. Beacom, N. Y., Beacon House, 1975-1977. V.I. Hay traducción castellana. Society and the science of man. Beacon, N. Y. Beacon House, 1956.

Sociometry. Experimental method and the science of society. Beacon, N.Y., Beacon House, 1951.

The first psychodramatic family. Beacon, N. Y., Beacon House, 1964.

The words of the father. Beacon. N.Y., Beacon House, 1971. Hay traducción castellana.

Who shall survive? Beacon, N.Y., Beacon House, 1954. Hay traducción castellana.

Moreno, J.L. and Enneis, J. M.:

Hypnodrama and psychodrama. Beacon, N.Y.

Beacon House, 1950 (Psychodrama monographs, Nro. 27).

Moreno, J.L. y otros: Group psychotherapy: a Symposium. Beacon, N.Y., Beacon House, 1945. Primi, Pietro: “La paradoja de ICARO”. C.I.N.A.E. 1982. Sauri, Jorge: “Historia de las ideas psiquiátricas”, Buenos Aires, C. Lohole, 1969. Zuretti, Mónica: “Development of the cultural atom”. Trabajo presentado en el 39th. Annual Meeting of the American Society of Group Psychotherapy and Psicodrama. New York. 1981. 66

“Teaching of the psychodramatic method”. Trabajo presentado en el VII International Congress of Group Psychotherapy, Copenhagen, 1980. “Atomo social-perceptual; campo operativo en psicodrama en: El psicodrama; aportes a una teoría de los roles”. Buenos Aires, CINAE, 1982 (Colección Encuentro 1).

67

3.2 Matriz, grupo e inserción sociométrica Autora: Mónica Zuretti Matriz, locus nascendi, espacio-tiempo; continente para la acción, espacio vincular.

Al decir de Moreno, el hombre se desarrolla en sucesivas matrices que lo contienen: de la matriz cósmica pasa a la genética, la familiar y la social para retornar a la cósmica. Cada una con sus redes vinculares, energéticas, corporales, afectivas o intelectuales da al hombre el continente necesario para el desarrollo de sus roles y sus acciones.

La matriz grupal es una red vincular que se establece con la finalidad de contener unos u otros roles en acción. Así la matriz familiar, grupo primario, es dónde se estructuran los roles originarios de un individuo. La matriz social está constituida por múltiples matrices grupales –desde la familiar hasta las institucionales mediatas o inmediatas, que responden a necesidades individuales, de pequeños grupos, de una sociedad o de una cultura.

Cada matriz social está en relación directa con: su habitat, su historia, particular, su estructura cultural y sus propias relaciones con otras matrices sociales.

Así como la materia, la matriz social, espacio-tiempo continente, tiene idéntica composición en su totalidad que en sus partes y la misma posibilidad de ser energía sin espacio ni tiempo.

En un grupo de cualquier tipo que sea: de pertenencia, continuo o discontinuo, grande o chico, se encuentran siempre los elementos que configuran la estructura social a la que pertenece. 68

Para la Teoría de los Roles que sustenta la psicoterapia de grupo y el psicodrama, cada individuo es un conjunto de roles o átomo cultural.

Cada una de sus funciones corporales proviene de un intercambio vincular acaecido en su matriz de identidad y su estructura física, sus gestos y sus movimientos son resultado de esta vincularidad primigenia que se expresa en los denominados roles psicosomáticos.

Del interjuego entre sus acciones y las de aquellos que componen su matriz familiar nacen los roles originarios.

Estos roles originarios le permitirán más tarde su

inserción en la matriz social. En esta matriz social se desarrollarán sus roles sociales en relación con aquellos otros significativos que pueblan su entorno.

Con el

transcurso de su tiempo vital estos roles aumentarán en variedad y número si el proceso espontáneo creativo no se ve interferido por situaciones que lo detengan, en cuyo caso abrirán la puerta a la necesidad de la psicoterapia.

A los roles psicosomáticos, originarios y sociales se suman los inherentes a la matriz genética y los de la matriz cósmica dónde es dable pensar que, la ausencia de espacio-tiempo (materia) en acción se ha transformado en energía que tendrá existencia tridimensional en los roles psicodramáticos.

En un grupo cada átomo cultural individual se relaciona con otro átomo cultural individual y su conjunto configura un átomo cultural grupal.

Este átomo cultural tendrá en sí la totalidad de los roles de la matriz social que lo contiene y bastará con que la mirada de ese grupo se detenga en su propio juego de roles para que pueda relacionarlo con el juego de roles del grupo mayor que, a su vez, le contiene.

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Ejemplo: en uno de los grupos de una institución se produce una fractura que excluye a uno de los integrantes que pertenece a una cierta área. La situación se repite en otros grupos.

Si llevamos el trabajo hacia una observación de la institución total con un estudio sociométrico vemos que el área en cuestión se encuentra aislada en la estructura institucional.

Al trabajar con un grupo que por su composición (sus integrantes tienen la finalidad de autoinvestigarse) tiene como institución continente la matriz social, al delimitarse el punto de interés grupal surgirán en conflicto los roles más caldeados por la situación imperante en esa matriz social.

Si por ejemplo, nos encontráramos frente a un temor aún al trabajar la situación individual de uno de los miembros en apariencia desconectado en un comienzo, se verá que subyace en la situación actual el temor expresado por un rol del átomo cultural de ese integrante y que pertenece a cualquiera de sus matrices.

Cuanto más continente la matriz grupal, la problemática continuará siendo pesquisada en sucesivas escenas o situaciones propias de los átomos culturales de los demás integrantes. Una cadena de investigación llegará desde el aquí y ahora hasta las escenas más profundas del coinconciente grupal, contenidas en las matrices genéticas de todos los miembros y a las estructuras sociales que son base de la historia de aquellas que dieron origen al miedo actual.

70

3.3 EL CUERPO Y LA MATRIZ DE IDENTIDAD Dra. Mónica Zuretti

El psicodrama considera al hombre un ser vincular en acción, cuya evolución individual se realiza en una secuencia de matrices de espacio y tiempo que lo contiene:

1) La matriz cósmica, en donde la existencia es espiritual o energética.

2) La matriz planetaria, (histórica), donde la energía espiritual utiliza la conjunción de materia y energía, es decir, psique y cuerpo, para expresarse.

3) La matriz genética, donde se conjugan las historias que darán como resultado la posibilidad de vida de un ser único, complejo e indivisible.

4) Las matrices de identidad, familiar y social, que permiten la individuación y socialización.

5) La matriz cósmica, que aparecerá nuevamente al cumplirse el ciclo de la vida. La definición de “psicodrama” está implícita en la palabra que lo denomina: “Psicodrama, alma en acción. El acto como centro, comienzo y expresión de la psique”

La vida individual va cumpliendo su desarrollo a partir de actos creadores que permiten el cambio de matriz a matriz y logra una complejización cada vez mayor.

71

El nacimiento es un acto creador integrado al devenir de la vida donde aquello que funciona traumáticamente es sólo la aceptación de la nueva forma de vida que implica el límite que la materia impone a la energía espiritual.

Como todos los actos creadores inherentes a la evolución del ser humano no se realiza sola, sino en conjunto o vincularidad. En este acto el Protagonista encuentra un yo auxiliar, la madre, que acompaña el proceso con sus propios cambios corporales. Uno y otro adecuan sus posiciones, sus estructuras óseas y musculares para llevar a cabo la acción contenidos por la matriz familiar y social.

Después del nacimiento el niño se encuentra en la matriz de identidad que es básicamente la relación madre-hijo, en la cual logra la identidad psíquica como ser diferenciado, para luego integrarse familiar y socialmente.

En esta matriz se desarrollan los roles psicosomáticos, es decir, las funciones corporales que irán expresando las necesidades de este ser, complementadas por el rol materno jugado por la madre u otro familiar.

En la matriz de identidad se cumplen cinco etapas:

1ª. Etapa: Indiferenciada

El bebé no diferencia aún su cuerpo del cuerpo materno al que vive como parte de él mismo. La diferenciación comienza con el cambio en la respiración inmediatamente posterior al nacimiento, acompañado del cambio en el rol contactador. De una piel cubierta por líquido amniótico y que no reconoce sus límites, pasa al límite que implica su pasaje por el canal de parto y el contacto posterior con el aire donde se establecerá un intercambio diferente. A nivel espiritual podemos plantear la pregunta de si no es este rol al ofrecer límites claros y la diferenciación con el medio, el que

72

ayuda a completar la encarnación.

Esta primera etapa es diferente para cada rol psicosomático: desde la inmediatez del rol respirador a la más gradual de los roles sensoriales y la lenta del rol sexual que se completa en el ejercicio de la genitalidad y que implica la confluencia de múltiples roles en su consecución.

2da. Etapa: Diferenciación

Comienza con las primeras señales de reacción frente al otro: la visión de la cara humana, la sonrisa, las voces, etc. Empieza en este momento a establecerse la brecha entre fantasía y realidad; entre los múltiples estímulos provenientes de la matriz cósmica que el espíritu recibe y contiene y las limitantes realidades de una materia que se expresa por medio de funciones corporales.

Es fundamental en este período el rol del durmiente que permite la supresión de los estímulos corporales que exigen al espíritu constante adecuación a las nuevas circunstancias. La brecha entre fantasía y realidad se establecerá en forma progresiva y se mantendrá a lo largo de la vida.

El organismo humano es una expresión en pequeño de la totalidad del universo en una clara unidad entra macro y micro cosmos.

La brecha entre fantasía y realidad tiene como función limitar con la experiencia vital el microcosmos en el cual se desenvolverá un ser permitiéndole adquirir sus dimensiones, sus posibilidades y sus vínculos, diferenciándose de los demás y de su entorno para comenzar desde esa experiencia su camino de reencuentro con la unidad y la totalidad.

Una grave patología psicológica es que no se establezca la brecha entre 73

fantasía y realidad, y que esta experiencia de nidación planetaria no se realice, en cuyo caso la experiencia concreta de existencia familiar y social es extremadamente difícil. La familia expresándose por el rol materno, al igual que durante la nidación fisiológica, puede o no brindar el continente necesario para que el contacto sea positivo y de atracción mutua o de rechazo o indiferencia. En el caso de un rechazo, el bebé totalmente dependiente, no sobrevivirá, si hubiera una continencia suficiente para permitir su aceptación corporal pero no para lograr establecer la brecha entre fantasía y realidad, aparecerán las muy severas patologías psicológicas. La posibilidad de estructuración de esta brecha posterior es muy difícil y depende de la posibilidad de una nueva nidación social.

Para que no exista un descontrol psíquico la brecha entre fantasía y realidad debe haberse establecido en su momento y ser mantenida durante la vida cotidiana. Una vez comenzada a establecerse la diferencia entre realidad y fantasía, entre matriz materna y matriz cósmica, la experiencia de crecimiento del recién nacido se centrará en la diferenciación de los elementos del mundo que lo circunda.

3era. Etapa: Separar la continuidad de la experiencia

Aparece en esta etapa la noción de angustia frente a los extraños que se manifiesta a través de cualquier rol psicosomático: respirador, contactador, etc. Y la risa y el llanto.

4ta. Etapa: Centrar sobre sí mismo sus posibilidades

Surge el reconocimiento frente al espejo, el control del intercambio con el medio.

5ta. Etapa: Inversión de roles

74

Es la posibilidad de ponerse en el lugar de otro, permitir que la experiencia propia sea compartida y compartir la de los otros.

Se cumple la asunción de los roles hasta el desarrollo máximo que el medio permita, el resto depende de la creactividad y espontaneidad individuales.

Estas

cinco

etapas

desarrolladas

en

la

matriz

de

identidad

continúan

perfeccionándose durante el transcurso de la vida.

En la MATRIZ FAMILIAR presente siempre en el desarrollo individual como placenta social, tiene lugar la estructuración de roles sobre los cuales se basarán posteriormente todos aquellos que la persona desarrolle. Así el rol de padre, madre, hijo, hermano, según sean desempeñados permitirán el libre ejercicio de las diversas funciones en la matriz social.

La MATRIZ SOCIAL tiene contacto directo con un individuo cuando éste sale por primera vez de su placenta familiar y entra en un medio que permite su inserción como persona social, socializada y socializante.

La MATRIZ PLANETARIA espacio-tiempo definido presente en todo el devenir, es a su vez su continente cósmico y del intercambio que se establece en las sucesivas matrices.

El hombre es así un ser espiritual cósmico, con alma y cuerpo, perteneciente a un espacio-tiempo planetario, que se expresa y se construye a sí mismo en conjunto con otros seres con los que se vincula.

Este conjunto o grupo sociocultural

evoluciona en profunda comunicación que se manifiesta en la energía afectiva o de vincularidad, es decir la Tele.

Esta evolución de sentido positivo o negativo se transmite genéticamente a los 75

sucesores. El factor tele está presente siempre entre los hombres y la vincularidad real en un instante determinado sólo actualiza una relación ya existente que se expresa en las identidades particulares.

76

4 El enigma humano y el psicodrama

77

4.1 SUMERSIÓN Y EMERSIÓN EN LA DEFINICIÓN DE LA KOINÉ MORENIANA Autor: SALVATORE PACE AIPsiM Associación Italiana di Psicodramatistas Morenianos

ABSTRACT La Weltanschauung moreniana y su método, el psicodrama, ha adquirido ya un consolidado reconocimiento, en los ámbitos delegados genéricamente a la cultura y específicamente a la producción científica, en todo el mundo. Pero el constituirse de una koinè, es decir de una comunidad cultural que tenga como común denominador los rasgos esenciales de la "visión" moreniana no puede prescindir del considerar, además del empleo culto y global de la lengua común, también todas las estratificaciones lingüísticas que convergen en ella, que la sustentan y la desarrollan. Existe, en muchos países del mundo, una amplia y fértil producción literaria y multimedial que trabaja a pasar los confines de la oficialidad convencional, limitándose -a pesar del empleo del término multimedial acentúe el aspecto de multiplicación mediática- a un consumo local, a empleo de los adeptos, y tautológico, a circuito cerrado. Objetivo de este examen es animar la comparación y, sobre todo, la emergencia y la convergencia de los lenguajes individuales en la koinè, en el factor común, en el absoluto respeto del plurivocidad, de la diversidad, de las "diferencias individuales" de los individuos y los muchos. Un "momento" moreniano abierto a la infinita variedad de lo posible.

Palabras clave: Psicodrama - Comunidad cultural

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1 “Dejo a los varios porvenires (no a todos) mi jardín de senderos que se bifurcan.” Jorge Luis Borges, El jardín de senderos que se bifurcan, 1941

Quisiéramos comenzar con una cita de una frase de Gilles Deleuze y Félix Guattari:

"Escribir no tiene nada a que ver con el significar, sino con deslindar, con el cartografiar, incluso futuros parajes."

Es significativamente alusivo, pero completamente inintencional, que yendo a la búsqueda de los conflictos de "raíces profundas", pivotantes, nos hemos dado con este notable enunciado de "Rizoma", capítulo inicial de Mil Mesetas. Esto nos lleva, por conexión y heterogeneidad - el modo de avanzar del rizoma, desde un punto a cualquiera otro punto - a un cuento de F. Kafka, La Construcción de la Muralla China, donde el autor, por voz de un cronista de la época, comentando las condiciones en que fue realizada la Gran Muralla, nueva Torre de Babel, dice que su construcción no fue funcional, porque incluso planeada y nacida con el objetivo evidente de proteger y defender, se encontró bajo el constante peligro de las incursiones de los nómadas que, "con la velocidad de las langostas" se desplazaban en continuación y conocían los progresos de la obra mejor que los mismos constructores. El cuento nos habla de la irracionalidad de la construcción, de la incomprensibilidad de las intenciones de los ejecutivos, de la incomunicabilidad real entre los hombres, pero, esencialmente, de una comparación cerrada entre un aparato que busca con preocupación de limitar, de confinar el espacio y otro, una máquina nómada, que se mueve “con la velocidad de las langostas” por espacios lisos, abiertos, sin límites. De tentativas de hacer mapas de lo que sólo puede ser cartografiado. Porque el mapa es la representación de una totalidad estática, inmutable e inalterada. Mientras la cartografía, de otra manera, varia con el cambiar del paisaje, sigue de ello los movimientos, los accidentes, las transformaciones - mundos que se desmoronan y se forman. Y las teorías, los supuestos principios primeros - por inciso: las raíces - siempre soy, o 79

deberían serlo, cartografías, descripciones de territorios que cambian junto a quién los observa, que nacen del exfoliarse del sistema-raíz, o entre sus pliegues, para proliferar como raicillas en otras unidades, o en más altas unidades.

La Koinè moreniana, la communitas, se ha vestido ya de oficialidad en los ámbitos que compiten generalmente a la cultura y de modo más propio a la producción científica, en todo el mundo. Pero en cuanto modelo heterogéneo, es difícilmente clasificable en formas absolutas, estables y definitivas. Hacerlo significaría reducirlo violentamente en el lecho de Procustes para amputarle los miembros si es demasiado largo, o para estirarlo a fuerza si es demasiado corto. O seguir el hilo de Ariadna después de haber matado al Minotauro. O confiarnos al sedentarismo del drama, a la omnicomprensión de la teoría, a los formalismos de la taxonomía, olvidando la desmesura de la tragodia, de la tragedia, del "canto" del macho cabrío de Moreno, pariente próximo a la ritualidad mágica y a las celebraciones dionisíacas.

Dos órdenes de ideas hacen difícil su ortodoxia. Uno, de carácter epistemológico, esta ligado íntimamente al modo de pensar de Moreno, que típicamente no está arraigado en el pensamiento griego - occidental, mas bien forjado en el cauce del espíritu hebreo-semita. El otro, que representa la sustancia o mejor, el catalizador de su misma creación, es la espontaneidad.

Existe a la base de nuestra herencia cultural griego-científica una concepción del tiempo cíclica, repetitiva, inmutable y uniforme. Si quisiéramos localizar en ello el Arqué, la imagen primordial, lo localizaríamos en la figura-metáfora de Cronos, el dios del tiempo que devora a sus mismos hijos, el dios que con la hoz en mano cercena y destruye cada cosa. En el esfuerzo de reconducir la doxa a epistème - y de detener el heracliteo panta rei, el “todo corre” - el pensamiento griego ha dado una huella indeleble a la historia del pensamiento occidental, pero una vez más, sacrificando el Minotauro. En la cultura hebrea, la imagen del tiempo es asociada al contrario a procesos de fecundidad y crecimiento: el árbol que crece y fructifica, el trigo que brota, la mujer grávida. Por un lado la idea de un espacio-tiempo pasivo, 80

dato definitivo para nutrimento de la reflexión, fuera del alcance intervencionista del hombre, y por el otro la representación de un continuum espacio-temporal generativo, en el cual el hombre - y también el dios con quién se conyuga - es insertado, es parte activa, y que puede modificar con sus acciones. En Moreno eso se traduce con la categoría del Momento - no la creación, más bien la creación continúa; no la vivencia, más el acto de existir creativamente - y en una preocupación más por el "hacer" que por el comunicar o decir o escribir: la conserva. Moreno "fue", como eficazmente lo pinta S. Perazzo, en cuánto "hizo", un "gerundio que creó por encima de la conserva cultural". Y el gerundio siempre actualiza el verbo - la potencia - de quién desciende o a quién se acompaña, arrastrando los sustantivos en los verbos del puro devenir.

Y específicamente en cuanto gerundio, Moreno se basó, en su creación, sobre un elemento irreducible a toda tentativa de normalización, imprevisible, incontrolable, capaz de crear hechos que huyen de cada control y previsión: la espontaneidad. Un daimon que tiñe los acaecimientos dramáticos de un entusiasmo casi religioso, que dona a los acontecimientos aquel frescor inédito, como recita F. Garcìa Lorca, que tienen las rosas recién cogidas, aquella alegría que acompaña, con cantos, bailes y vino, los hessed en sus ruegos o el furor místico de los derviches en sus danzas rotatorias. ¿Cuál Lecho de Procustes puede parar ese flujo? ¿Con cuáles aparatos de captura? ¿Cómo ordenarla, encasillarla, encuadrarla razonablemente en un modelo exclusivo y absoluto?

Sin embargo el mismo Moreno define su creación como la ciencia que explora la “verdad” a través de métodos dramáticos. ¿A cuál tipo de ciencia alude Moreno?

Pensamos, con Deleuze y Guattari, que Moreno haga referencia - por contra a las ciencias reproductivas - a los saberes nómadas, vagabundos. A un procedimiento científico itinerante y no repitente, reiterante, verificable por deducción o inducción. La ciencia moderna no consiste en la búsqueda de una forma, de una constancia, de conceptos o categorías definitivas. Esa, poniéndose a la encrucijada entre ciencia y 81

arte, se encomienda completamente a la intuición, siguiendo flujos de variables, de singularidades, de problemas más que de teoremas. Su misión es crear, no de conservar. De nuevo Heráclito y sus panta rei: ¿nos quedamos sentados en la ribera a mirar establemente el agua que corre o inmersos en el río, sabiendo de no ser bañados nunca por la misma agua?

Hemos leído y oído a menudo de Moreno como de un pensador poco sistemático, incoherente y caótico. Es suficiente leer sus libros. Un concepto es bosquejado, señalado, formulado, interrumpido para ser retomado sucesivamente, reformulado, contradicho y refundido más veces.

Para comprobarlo no hacen falta grandes

esfuerzos intelectuales, pero nos requiere una vida de siempre mayor plenitud entender que su obra es la tarea y la misión de toda su existencia, una obra abierta cuya definición no está finalizada nunca en modo conclusivo, pero creada para ser entregada a la continuación de todos sus discípulos y susceptible todavía de ser cambiada. Un Dios que necesita los hombres para seguir creando.

2 “Je est un autre” Arthur Rimbaud, Letra a Paul Demeny, 1871

El modelo científico de koiné está estriado a menudo por un empleo culto, iniciático del lenguaje. "Cuando una disciplina establece su territorio - escribe Raúl Sintès – […] se apresura a editar un diccionario […] La instauración de un lenguaje propio equivale a plantar los postes y alambrados que delimitan un terreno."

"Cuando yo uso una palabra" dice Humpty Dumpty a Alicia en A través del Espejo Mágico, "esa palabra significa exactamente lo que quiero qué signifique, ni más ni menos" "El asunto es", dijo Alicia, "si usted puede hacer que las palabras signifiquen tantas cosas distintas" 82

“El asunto es ", replicó Humpty Dumpty "quién es que manda aquí, eso es todo."

A menudo nos olvidamos que no existe una lengua universal, homogénea. En la acepción moderna de koiné convergen todas sus estratificaciones lingüísticas, desde la lengua docta, literaria, artística, a la técnica, la burocrática, la hablada, inclusive los dialectos y los vernáculos, las jergas. No debería tratarse pues de un modelo ideológico, redoblado a su vez sobre un sistema de verdades indiscutidas, sobre la representación de lo que está en el sitio del otro y lo explica, más de una concatenación de multiplicidad variable, mudable, en la medida en que cambian y se multiplican las mismas conexiones. Diríamos, con Deleuze, que no nos falta la comunicación -al contrario, tenemos de ello hasta demasiado - lo que nos falta es la creación.

La

capacidad

de

crear.

La

posibilidad

de

conectar

procesos,

multiplicidades, para dar vida a polifonías, a puntos de vista plurívocos, diferentes y no opuestos.

Remonta a las primeras décadas del '900 el interés de Kafka por el chassidismo hebreo - característica que lo aúna a Moreno y a Buber - y por la literatura yiddish polaca y checa así como por otras literaturas llamadas "menores". Según Kafka estas minorías literarias tuvieron la función de verdaderos vectores expresivos de los grupos menores que, a través de ellas, hicieron posible vehicular y articular su identidad, su visión social, a margen y por los entramados de la Weltanschauung oficial. Estas literaturas no son caracterizadas por la presencia de grandes individualidades, de figuras de relieve. Se presentan como productos de un proceso colectivo, ya que la conciencia de que cada obra es fruto de una creación común y que no existe la propiedad intelectual tal como es concebida en occidente está en la naturaleza del pensamiento hebraico.

Deleuze y Guattari, retomando la observación de antes, advierten de ello las valencias inmediatas: la desterritorialización de la lengua, el lenguaje literario que no encuentra espacios en la oficialidad se reterritorializa reapropiándose de otros espacios y otros sentidos, la aportación de la dimensión individual en lo social, la 83

expresión colectiva que revuelta cada idea de referente global. Por esta visual, el adjetivo menor con que se califican ciertas literaturas, no las identifica como inferiores, como secundarias, mas da relieve y valor al potencial innovador, a la potencia actuativa y promovedora de cada pequeña literatura dentro de la oficialidad estatuida.

Análogo discurso para el idioma. No se habla de grupos minoritarios lingüísticos ni de restauración regresiva del dialecto como lenguaje nativo. Ni de oposición entre identidades minoritarias y culturas mayoritarias. No hay dualismo maniqueista, ninguna repartición del mundo entre Bien y Mal. El lenguaje menor se presenta como variación del idioma oficial, uno de los muchos modos de habitarlo, de vivirlo, de hablar, de ponerle en música. Es apéndice e inseparable de él, es parásito, vive en los intersticios, en los márgenes, en las zonas de confín. La sola diferencia es que lo trabaja, lo reinventa, lo recrea, lo pone en tela de juicio, sometiéndole espontáneamente y accidentalmente a continuas revisiones y refundiciones.

El pensamiento de Moreno es intensamente surcado por el pluralismo: "Si tuviera que renacer" repetía a menudo "querría hacerlo como grupo". Por él ningún acto es concebible separado del grupo. "La voz nueva tiene que venir por el grupo. Tiene que ser el grupo. La palabra nueva tiene que venir por el grupo" escribió en su autobiografía. Desde los niños de los jardines vienenses a sus discípulos, Moreno siempre quiso contar historias, anécdotas, contarse y reinventarse, reproducirse en su mitología, ser uno y muchos en el mismo tiempo. Hubo en él la urgencia, la necesidad de hacerse otro. La necesidad de ser de muchos modos - heteronimia para no tener que ser uno solo - oronimia. De salir del acto biográfico para parar de ser y multiplicarse en la leyenda, en el juego, en los heterónomos, nunca igual a sí mismo - Moreno hijo, Moreno padre, Moreno profeta, Moreno poeta, Moreno filósofo, Moreno médico, Moreno regista, Moreno inventor, Moreno psiquiatra, Moreno sociatra, Moreno Dios, Moreno hombre: ¿quién entre todos estos personajes fue Moreno? Un altar a un dios diferente en cada rincón de su alma, escribiría Pessoa. Para volver a ser, más que nunca, uno mismo. 84

Quizás la mayor dificultad consiste en querer o tener que encontrar un modo de pensar y comunicar eficaz, que no sea singular, al cual el grupo no se reduce, o plural, al cual el individuo se adapta mal. Haría falta expresar entonces los fenómenos en el lenguaje de la paradoja, del pensamiento discontinuo, transversal, una lengua que, superando lo alto y lo bajo, el adentro y el afuera, haga posible y tenga razón de una multiplicidad de sentidos y no sentidos - y no de sentidos únicos.

Entonces, como en la mejor tradición chassidica, quisiéramos sellar este capitulo con un cuento, enésima metáfora del encuentro moreniano, como con los puntos de suspensión, para concluir y para no concluir.

Había un rabino a quién la gente a menudo se acercaba por un consejo o porque estaba afligida por problemas. Su Gabai, fiel ayudante, notando con perpleja curiosidad, que cada vez que se concluía la consulta los vestidos del rabino estaban empapados de sudor y completamente arrugados, le pide aclaraciones. Y el maestro contesta: "Imagina, oh mi fiel Gabai, una persona que se sienta delante de mí para contarme su problema. Yo soy el rabino y él un tío con un problema. Entonces yo me saco los vestidos y se los hago sacar a él. Me pongo sus vestidos y le hago vestir los míos, de modo que yo realmente pueda saber cómo se siente y comprenderle mejor. Por fin vuelvo a reponerme mis vestidos y le hago poner de nuevo los suyos; de este modo vuelvo a ser yo mismo y puedo analizar, con la debida distancia y desde otro punto de vista, su problema. Y él, a través de mis prendas, podrá verse a sí mismo. Así le habré dado la mejor ayuda y guía posibles. Podrás ver, por lo tanto, o mi Gabai, como este contínuo cambio de vestidos me deja completamente cansado, sudado y arrugado."

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Salvatore Pace, reside y trabaja en Siscilia, Italia. Después de la Licenciatura en Filosofía (Área Psicológica) en la Universidad de Catania (Italia), ha estudiado Psicología Analítica Junghiana y se ha especializado en Gestalt Therapy Counseling (Human Communication Center de Ragusa) y Psicodrama Clásico Moreniano (Escuela de Psicodrama Clásico de Mantua y Catania). Ya socio fundador del AICF - Soc. Italiana de Counseling Filosófico de Turín, ha colaborado con revistas on-line de Psicología Analítica y de Counseling Filosófico suramericanas e italianas. Actualmente es miembro activo del AIPsiM - Ass. italiana de Psicodrammatisti Moreniani de Milán - y colabora con la revista “Psicodramma Classico”, ocupado en hacer conocer al público italiano el pensamiento psicodramático iberoamericano. Trabaja en privado con Psicodrama Bipersonal (Psychodrama a deux, one-toone), y administra grupos terapéuticos y formativos.

Su dirección es: Dr. Salvatore Pace ERANOS – Relazione d’aiuto Studio di Psicodramma Via XXV Luglio, 81 97010 – Pedalino (RG) Italia

86

4.2 LO HUMANO EN PSICOLOGIA y PSICOTERAPIA Autor: Luis de Nicolás y Martínez Prof. Catedrático Emérito de Psicología Propio de la Universidad de Deusto. Hace años escribí una reflexión sobre lo humanizante en la psicología (De Nicolás, L.1992)

y basándome en él he incluido hoy aquí su texto, porque he querido

repasar lo que escribí pero a la luz de las nuevas teorías de la comunicación y de aquellos autores que en su época, defendieron que la relación humana es el fundamento de la psicoterapia como fueron Moreno y Sullivan aunque difirieran en parte, sin apartarme de los principios básicos de la psicología llamada científica y tratando de buscar lo humano en ella. Moreno J. L. (1962) en su trabajo “Who Shall Survive?: Un nuevo enfoque del problema de las interrelaciones humanas”,

decía que

“Un procedimiento

verdaderamente terapéutico no puede tener otro objetivo que la humanidad entera” para que se dé la supervivencia de la existencia humana misma (aptos y no aptos). Y en aquellos años se le comentó que “cuanto más tiempo transcurre, el título Who Shall Survive? parece reflejar mejor la situación básica de nuestra era” (p.325-326) y podríamos decir que también en el año 2009, en que hago esta revisión. Moreno hablando de los robots que nos pueden esclavizar y deshumanizar coincide con el aprendizaje del lenguaje que nosotros aprendemos a través de las reglas y la jerga de nuestros esclavos para poder darles órdenes. Así, actualmente se considera paradójico que seamos esclavos de nuestros propios computadores a pesar de su riqueza instrumental. Y como decía Watzlawick, P.(1992) poco a poco e imperceptiblemente renunciamos a nuestras propiedades humanas y a nuestras leyes, nosotros nos deshumanizamos al adoptar los hábitos de nuestros esclavos. Y 87

el primer síntoma de esta deshumanización es el menosprecio de lo humano.

Mi reflexión sobre la psicología y aplicación práctica de sus teorías psicológicas se constituye también, en base de la psicoterapia, y así trata de revisar algunos aspectos buscando lo que considero lo más humano tanto en la psicología como en la psicoterapia siendo consciente de la limitación de tiempo y espacio para poder abarcar según mi opinión y para mí al menos, tan atrayente tema. No es mi intención formular un sistema que pueda merecer el consenso de todos como decía Moreno, pero sí examinar aspectos que nos han podido llevar tanto a una humanización como a una deshumanización de la psicología y de la psicoterapia.

Al hablar de los temores y esperanzas para la psicología del año 2000, Marc Richelle escribía en 1982, que "la psicología actual nos ofrece el espectáculo de un universo fragmentado donde se yuxtaponen, ignorándose o excluyéndose, las tendencias metodológicas, las corrientes teóricas, las orientaciones fundamentales y aplicadas. Después de haber afirmado lentamente, en el siglo XIX, su estatuto de ciencia, afinando sus métodos, aunque fuera en problemas muy delimitados, si no siempre menores, la psicología del siglo XX vio la eclosión de las grandes teorías. Fruto de la impaciencia ante la lentitud de la selección rigurosa de los hechos o de la audaz afirmación del primado de la reflexión organizadora sobre el registro de los datos, las construcciones teóricas ambiciosas jalonaron la primera mitad del siglo para culminar en su línea divisoria y repercutir hasta estos últimos años. Pavlov, Freud, Watson, Hull, Lorenz, Piaget, Skinner son algunas de las figuras más representativas de este período. Cada una de estas obras teóricas se distingue de las otras y se opone a ellas, bien con una violencia polémica o con la soberbia de la ignorancia. A pesar de sus profundas diferencias de contenido presentan caracteres comunes, reveladores del clima de nuestra ciencia en el curso del medio siglo transcurrido".

Este texto que he trascripto íntegramente a pesar de su antigüedad, me ha parecido una buena introducción breve y sintética que da idea de lo que muchos piensan de 88

la psicología. Todo el mundo está de acuerdo en que actualmente, no hay una psicología sino muchas psicologías como pluralidad teórica dando lugar a las escuelas psicológicas. Lo mismo podríamos decir de la psicoterapia, pues desde el concepto de Psicología clínica como “cuerpo de conceptos y técnicas, relativos a problemas psicológicos, aplicables a los casos individuales para diagnosticar, evaluar, intervenir, a fin de resolver problemas y trastornos psicológicos” nos lleva a problemas del campo clínico como cuando se habla de la especificidad del trastorno desde el modelo bio-psico-social que implica una etiología y /o una terapia psicológica de tipo comportamentalista o cuando se prima el resultado de la terapia en el multiparadigmatismo o de la interacción social, de la atención a los aspectos psico-fisio-fármaco-lógicos y la atención a los aspectos económicos dentro del paradigma de la multidisciplinaridad de la acción.(Carpintero H.. 2003) Ya es noto que para algunos autores existen más de 255 terapias y/o psicoterapias.

Sin embargo, como decía Yela, (1980) "la psicología actual ofrece muchos y apasionantes conocimientos, firmemente comprobados, de sus varios enfoques, parcialmente discrepantes, de sus no pocas ignorancias y vacilaciones". Ante esta perspectiva creo que una de nuestras tareas como psicólogos de este nuevo siglo ya en el año diez, es superar la imagen o la realidad de la fragmentación de la psicología y de las psicoterapias.

Cuando se me pidió que escribiera sobre lo humanizante de la psicología, era fácil pensar de inmediato en la conocida escuela humanista como una más o la mejor dentro de las diversas escuelas o corrientes como la estructuralista iniciada por Wundt, la conductista de Pavlov, Watson y Skinner principalmente, o como la psicoanalítica de Freud. Ciertamente, la llamada tercera fuerza de la psicología moderna y su contenido, es decir, la psicología humanística desarrollada por Maslow, Allport y Rogers entre otros, se encuentra más armónica con la literatura y las humanidades. De esta escuela se desearía también, que fuera más complaciente con las disciplinas científicas sobre todo en relación con una mayor objetividad evaluativa de sus resultados, éxitos o fracasos. Pero, si en este ensayo 89

siguiera la línea humanística creo que una vez más contribuiría a hacer hincapié en las características positivas y en la capacidad del desarrollo del hombre y en creer que sería una especie de antídoto saludable a lo que otros autores ven como una visión negativa y mecanicista del hombre, en lo expuesto por Freud y los conductistas. Total que sería a mi parecer, realizar un flaco servicio a la psicología incluyendo en ella la psicoterapia también, el resaltar una vez más la fragmentación y lo diferente e incluso opuesto, existente entre teorías y escuelas, sin dar un paso más hacia una nueva visión de la psicología y de la psicoterapia.

Aunque, en los últimos años se trata de superar las teorías generales a través de microteorías que se focalizan en áreas especiales de conducta, tampoco satisfarían mi objetivo, pues, no me conducen a resolver el poder ver la problemática de toda la persona. Quizás, esta pretensión sea sólo una utopía, pero, en mis conversaciones que tuve sobre el tema, con el emérito Prof. D. Mariano Yela, me indujo a pensar y ver cuál sería una posible solución al problema en sí, y que según mi opinión, podría ser válido tanto para el pasado como para el presente y futuro de la psicología (incluida la psicoterapia), si como decía él, daba lugar a la “comprensión de la búsqueda de sentido y significado de la "conducta" del hombre”.

En este punto podríamos decir que coincide con la corriente humanista del siglo XV en que como muy bien dicen Reale y Antiseri (1983) “la señal distintiva del humanismo consiste en un nuevo sentido del hombre y de sus problemas”. El noto psiquiatra Castilla del Pino en 1968, opinaba que “el humanismo es la conciencia de la realidad del hombre en cuanto tal hombre y de las cosas en cuanto tales cosas y de las relaciones del hombre con los otros hombres y las cosas, es decir, de su operatividad con ellas”. (p.14)

PSICOLOGIA Y PSICOTERAPIA Al intentar hablar de lo humano en psicología, es decir de lo que hace humano o humana la misma psicología creo que en primer lugar, se debe explicar lo que actualmente se entiende por Psicología, definiéndola por la estructura de su objeto y 90

por su método de estudio.

Para los psicólogos, la psicología es el estudio científico de la conducta. Se discutió acerca de si los hechos mentales, internos y subjetivos, tales como imágenes, recuerdos, pensamientos, están dentro de los dominios de la psicología.

Sin

embargo, ahora, la mayoría estamos de acuerdo en que el término conducta debe usarse ampliamente e incluye tanto las acciones motoras y las respuestas fisiológicas, como los hechos mentales. Así, la conducta incluye los hechos externos y fácilmente observables y los sucesos que pueden ser solamente deducidos indirectamente de informaciones verbales o de indicadores fisiológicos. (Lindzey, Hall y Thompson, 1978).

Históricamente, existe una psicología filosófica que va desde Aristóteles hasta la época de Wundt por lo menos, y actualmente, tenemos la mencionada psicología científica que a primera vista puede parecer un conjunto diverso y dispar de conocimientos teóricos y de procedimientos prácticos que nos pueden inducir a pensar en lo acientífico de la misma psicología. Es cierto que la psicología de hoy es de hecho diversa y dispar, pero capaz de ir superando las diferencias y coordinando en una unidad básica la inevitable y conveniente diversidad de enfoques, técnicas y perspectivas si seguimos el pensamiento de Yela (1989). Por ello, al realizar este trabajo con el título propuesto, y dentro del título general el “Futuro de las Humanidades”, quiero referirme a una psicología que entrañe una unidad básica que abarque tantas psicologías como actividades humanas sin por ello, pretender emular a Brentano que ya en el año 1944, se proponía sustituir las psicologías por una psicología. (Aux psychologies, nous cherchons à substituer une psychologie).

Igualmente sucedía en la psicología aplicada a la terapia, pues como muy bien escribió Wilber, Ken en 1979(1985) ”nos encontramos ante una gran variedad de posibles enfoques, tanto orientales como occidentales, que van desde el psicoanálisis al zen, de la Gestalt a la Meditación Trascendental, del existencialismo 91

al hinduismo. Por si fuera poco, parece como si muchas de esas escuelas diferentes se encontrasen en abierta contradicción. No solo diagnostican de diferente manera la causa del sufrimiento, sino que también prescriben métodos distintos para aliviarlo”. Este autor,

también se propuso realizar una síntesis

reuniendo los diferentes modos de enfocar la terapia, la curación y el crecimiento personal de un marco de referencia que llamó el “espectro de la conciencia”, tratando de integrar los rasgos esenciales de las tres direcciones principales de la psicología y la psicoterapia occidental: la corriente yoica ortodoxa (que incluye el conductismo cognoscitivo y la psicología freudiana del yo), la humanística (tal como la bioenergética y la gestalt) y la transpersonal (psicosíntesis, psicología junguiana y tradiciones místicas en general).

No obstante, la psicoterapia la entiendo de acuerdo con Galimberti, U.(1999)como un proceso interpersonal, consciente y planificado, para influir en los disturbios del comportamiento y en las situaciones de sufrimiento con medios principalmente psicológicos verbales y no verbales ante el objetivo de alcanzar un fin elaborado en común como el alcanzar el reducir síntomas o modificar estructuras de personalidad, por medio de técnicas que difieren por la diversidad de orientaciones teóricas sobre las que se fundamentan. Es de resaltar el proceso interpersonal en que se elabora en común, un fin que actualmente la psicología constructivista nos recuerda

y que Rodríguez, H. J. (2009) concreta diciendo que “el proceso de

comunicación terapéutica es un proceso de interacción personal, en que las personas interactuantes en la relación terapéutica van adquiriendo su propia especificidad, a través del mutuo conocimiento y de la mutua influencia, y que la condición de persona antecede a la que establecen los roles”. (p.147)

A este punto me recuerda lo que Sullivan, H. S. decía e hizo

revolución

epistemológica cuando en 1946 fundó en Nueva York el William Alanson White Institute, con el fin de estimular la investigación en los diferentes campos psiquiátrico, psicológico y psicoanalítico, afrontando de una manera nueva la cuestión de la esquizofrenia al mantener que el objeto epistemológico se encuentra 92

en la relación sujeto - sujeto, de tal modo que la conducta no se comprende sino desde la relación misma, y no desde un sujeto tan sólo. Moreno en 1954 se preguntaba ¿cómo se puede hacer coincidir los diversos métodos en un sistema único, que los comprenda a todos? Y aunque se aleja de Sullivan, sí creo que se acerca a la relación que se establece de sujeto a sujeto cuando mantiene que el terapeuta debe transformarse en un actor participante, si bien no formalmente, “psicológicamente” en un paciente. Hay entonces dos pacientes, no uno, que pueden ofrecerse terapia entre sí, cada uno según su aptitud y sus necesidades. Está admitido que para funcionar en el rol de terapeuta profesional y movilizar al mismo tiempo la propia personalidad como para prestar ayuda a otro individuo se requiere una cuidadosa estrategia” (1967,p.99)

Al confrontar las bases de la psicología y como consecuencia de la psicoterapia, mi pensamiento se va al campo del estudio de las relaciones interpersonales y en especial, a la interacción entre los participantes de una situación social, como es el encuentro entre dos personas por lo menos y en la que asume una gran importancia el significado que adquiere cada una de las personas en relación al otro.

Considero que me encuentro dentro de la técnica estructurada de la intersubjetividad de Sullivan, después de que las investigaciones psicoanalíticas sobre el controtransfert pusieran en crisis el mito de la objetividad de la observación. Mi propuesta es como lo hizo Sullivan, si todavía es aceptable el discurso técnico en términos de psicología de la relación interhumana en un ambiente sociológico concreto en que la situación terapéutica adquiere un sentido, un objetivo y una necesidad. Es así, como se puede desarrollar un clima espontáneo en que reproduciendo un modelo de observación experimental de un sujeto en el campo relacional que se ofrece en determinado momento, el otro ya no es objeto sino sujeto y que con otro sujeto establece una relación que se puede convertir en terapéutica. En consecuencia, el foco de observación se ha movido de un solo individuo como suele ser a una situación como es la relación que se establece entre el técnico y el usuario, y además, en un momento social concreto. Esta situación interpersonal no 93

es abstracta sino concreta. Teniendo en cuenta estas ideas Sullivan trataba de que no se rebajara la autoestima del otro como paciente, es decir, prestar atención al impacto que el modo de acercarse a cualquier persona o tema provocaba. Era consecuencia de su revolución epistemológica de tratar al usuario como sujeto, la relación ya no era de sujeto a usuario objeto de exploración sino de sujeto a sujeto que tiene una autoestima y un potencial de crecimiento y de progreso que contribuye significativamente a la experiencia de dominio y de seguridad afrontando los retos interpersonales y que como decía Moreno (1967) en “todos los casos la hipótesis principal es que la interacción produce resultados terapéuticos”(p.16)

Por una parte, no podemos olvidar que la psicología por su objeto es predominantemente una ciencia cultural (una Geisteswissenschaft) que estudia los fenómenos y procesos a través de los productos culturales de los pueblos (Völkerpsychologie).

Al intentar extender el método de la ciencia natural a todos los fenómenos conscientes se origina la fragmentación desde por lo menos de dos puntos de vista. Estudio de los contenidos de la conciencia frente a la indagación de sus funciones (funcionalismo). Psicología de la forma frente al atomismo asociacionista. Ahora bien, la fenomenología con la interpretación de los fenómenos mentales dados a la conciencia, trata ya de la conciencia y de la experiencia inmediata (unmittelbare Erfahrung).

Por otra parte, por su método es, a la vez, una ciencia natural (una Naturwissenschaft), es decir, una ciencia experimental de las observaciones extropectivas e introspectivas sobre fenómenos sensitivos, atencionales, perceptivos, motivacionales y afectivos, frente a la consideración de los mismos como elementos causales en la conciencia. La "Verstehende" o carácter comprensivo del sentido de las vivencias humanas frente al carácter explicativo de la psicología como ciencia natural. Y frente al mentalismo y la introspección, los intentos de objetividad de la reflexología rusa y el conductismo americano y frente al interés exclusivo por la 94

conciencia, la búsqueda psicoanalítica de las raíces inconscientes del psiquismo. Como continúa Yela (1989) del cual tomo las anteriores frases como un reflejo de parte de la misma historia de la psicología, la ciencia psicológica es actualmente superabundante, pero a pesar de su permanente crisis de desunión y parecer ser mil, se encuentra que también, “el hombre es uno y mil”.

La psicología es hoy, principal y fundamentalmente, ciencia de la conducta. En esto, el acuerdo de los psicólogos es casi unánime. El desacuerdo está en definir conducta a pesar de ser un campo verificable y esto último, gracias al behaviorismo. (Yela, 1976)

Ahora bien, el "homo" el nacido de la tierra, como "mensch" ser pensante se mira a sí mismo para ver su rostro de varón, "antrhopos", y también, mira hacia arriba a través de su múltiple estratificación que caracteriza a la naturaleza humana en su ser y en su obrar. (Lotz, 1958)

Todo esto da pie a que la psicología al acercarse a su propio objeto, distinga diferentes niveles de análisis en relación a sus elementos, a sus funciones y a sus totalidades. Como dice Yela (1974), la conducta es reacción física a un estímulo físico, acción de un sujeto psicofísico que se sitúa, según sus peculiares predisposiciones en un mundo que percibe con estas o las otras características y que se configura así, en formas de situaciones en las que el sujeto trata de realizar sus proyectos,

respondiendo

y reaccionando a

ellas,

adaptándose

a

ellas y

modificándolas. Fernández Trespalacios (1986), lo resumía diciendo que es una actividad molar con su dimensión consciente, de los organismos y en su medio.

Metodológicamente, proponemos que hay que estudiar a la persona humana a través del análisis estructural y funcional y para poder analizar la conducta en que hay una actividad molar, y que se da en un organismo y que se realiza en interconexión con un medio, por lo que debemos usar los diferentes niveles de análisis, según sean nuestros objetivos de estudio y de predicción de la conducta humana tanto en 95

personas con un comportamiento sano como en los no menos saludables para realizar la terapia. Igualmente, sucede en la psicoterapia cuando nos acercamos al ser sufriente desde el punto de vista metodológico haciendo la distinción entre terapias fundadas sobre la relación humana paciente – terapeuta y las fundadas sobre procedimientos técnicos experimentales. Esta posible división hace que en las segundas, se pueda perder lo humano y que perdamos de vista la totalidad del ser humano presente en la terapia y que se encuentra en una percepción de significado y comunicación terapéutica intersubjetiva.

Desde este punto de vista, ya tenemos una visión del "homo psychologicus" que aunque a veces parezca que al acercarnos con los diferente métodos de las diversas escuelas psicológicas, que lo que estudiamos no tiene semejanza con el hombre real, sí sin embargo, podemos alcanzar ese hombre cabal que generalmente exhibe en su comportamiento o conducta el hombre real o la realidad personal que sabemos que somos, (Pinillos, 1976; Zubiri, 1963) viéndolo desde el punto de vista comprensivo que proponemos y definimos.

VITALIDAD DE LA PSICOLOGIA Y DE LA PSICOTERAPIA

En el estudio y análisis del comportamiento humano, se parte desde lo más elemental como es el paradigma E - R, sin por ello quedarnos con la psicología del guión (Yela, 1976), para llegar a conocer al hombre. A través de la evolución comportamental tanto desde el mínimo organismo vivo que responde a un estímulo en un simple reflejo, como a través de la hominización desde el Homo Habilis, del Homo Sapiens Neanderthalensis y del Homo Sapiens Sapiens del Cromagnon se llega hasta el hombre de nuestros días, en que consideramos que se ha dado además de una hominización desde el gen HAR1 (Pollard, K. S.2009) que permite cambios en fisiología y comportamiento, hasta una humanización con la aparición de formas culturales que han interactuado y van interactuando con la misma aparición de formas y funciones biológicas. Así es cuando se puede ver con un ojo experto que bajo tendencias psicológicas y psicoterapéuticas encontradas a veces, están 96

madurando los más graves problemas que interesan a la vida humana. Como escribía mi estimado Prof. Zunini (1958) "no puede contemplarse la psicología con una sonrisa de superioridad, pronosticando su vuelta a la filosofía y fisiología". Cuando otras ciencias y disciplinas, avocan a la psicología a asumir por rebeldía la pretensión de gobernar al hombre o como dice Skinner, tener que conocer cómo se manipula para no poder ser manipulados o más libres dentro de todos los condicionamientos (De Nicolás, 1983), hay que pensar que es responsabilidad de las demás ciencias que no presenten la cara de la incomprensión a la psicología.

El nacimiento y el crecimiento de nuevas disciplinas es irreversible en la historia de las ciencias. Sabemos que la psicología ha experimentado un crecimiento de contenidos empíricos respecto de los que se hace ciencia, a un ritmo aproximado de diez a quince años, lo cual aterra a muchas personas. Gran cantidad del quehacer teórico ha sido realizado por unos pocos. Y así, la psicología es como otras ciencias naturales que tiene los mismos fenómenos de crecimiento, de reactualización y cambio desde el momento casi de su fundación.

Desde entonces, la psicología "ya comenzó siendo una especie de híbrido entre los problemas filosóficos y los métodos fisiológicos, produciéndose la conjunción de ambos en el laboratorio de Wundt en Leipzig".(Carpintero, 1976) Actualmente también, se habla de la psicoterapia filosófica.

Si entonces eran los problemas filosóficos de la epistemología y del conocimiento, abordados con la aplicación de un método experimental fisiológico, parece propio y natural que a la psicología y psicoterapia, ciencia que estudia la vida subjetiva del hombre para unos o la conducta humana normal o anormal para otros, se le pueda preguntar e inquirir con la acuciante cuestión de su aspecto humano. Sobre todo, cuando se piensa que es ya centenaria la inauguración del primer laboratorio de psicología experimental reconocido internacionalmente, en Leipzig, donde la psicología planteaba su derecho a la emancipación y la vida autónoma en la esfera de las ciencias y máxime de la ciencia de la sabiduría del ser y del deber. Es fácil 97

pensar también, en nuestros días en nuevos híbridos cuando bajo el nombre del prefijo o sufijo -psico- se pretende unirlo a otras disciplinas sin darle el suficiente contenido psicológico. De aquí, que se den muchas posturas y contestaciones reactivas que nos hacen pensar una vez más y sin extrañeza, hasta por parte de los antiguos estudiantes de Facultades de Filosofía y Ciencias de la Educación con Secciones de Psicología en que arrojaban datos en encuestas realizadas, expresando cómo se deberían quitar cargas no psicológicas y aumentar la experiencia concreta en su formación. (Hidalgo, 1992) Igualmente, piensa mucha gente diciendo que la psicología y los psicólogos no están a la altura de las necesidades, y esto se piensa tanto más, cuanto más se han utilizado sus servicios. (Hidalgo, De Nicolás, Yllá, 1991.

Entonces, la problemática que se plantea ya no es sólo de contenido teórico y epistemológico, sino también, práctico en que se debe lavar la imagen sabiendo qué es lo que supone la psicología y sus posibilidades terapéuticas en una época en que ya se habla de terapeutas conductuales de tercera generación (Wilson, K.-Luciano, M. C. (2002) y VV. A A(2006), y qué es lo que puede aportar, a la vida humana sin necesidad de separar psicología y psicoterapia.

Ciertamente, la psicología apremiada por las propias pretensiones del rigor científico experimenta una profunda transformación, a principios del siglo XX. Nunca mejor aplicado la frase de Bob Dylan "quien no está ocupado en nacer, está ocupado en morir". Se puede decir que ya ha nacido, que muestra su joven y ya no tan joven pero madura vitalidad, a través de su crecimiento y transformación que queda muy bien plasmada en la frase: "La psicología de teoría de la conciencia, pasó a ser ciencia de la conducta". (Yela, 1980.

Esto mismo, nos ha llevado a controversias dentro de escuelas rivales de pensamiento. Sin embargo, en el momento actual, la mayoría de los psicólogos son eclécticos empleando varias teorías en algún grado (Lindzey-Hall-Thompson, 1978), sin que con ello, quiera decir que debamos caer en un fácil sincretismo mal 98

entendido, sino ver las cuestiones abiertas como posibilidad de alcanzar convergencias y complementariedades, aunque para que esto sea fecundo se deba retener los elementos más sólidos o más aceptados de las teorías existentes en la diferentes escuelas. Y una cuestión abierta, es propiamente la visión del hombre en la psicología.

Si Dilthey en 1849, en la Academia de Ciencias de Berlín, reivindicaba la pertenencia de la psicología a las Geisteswissenschaften o ciencias del espíritu, contra la infeudación de ella en las Naturwissenschaften o ciencias de la naturaleza, sintetizando su pensamiento en la frase "nosotros explicamos la naturaleza pero comprendemos el espíritu", hoy en día prevalece la orientación hacia problemas concretos y simplificación de su impostación, a través de las mencionadas microteorías que se centran sobre áreas especiales de la conducta como la audición o la visión, el aprendizaje animal, el stress psicológico (De Nicolás - Matute, 1984), (Calvete - De Nicolás, 1991), la toma de decisiones, la emoción expresada (De Nicolás -Azpiri, 1991), por ejemplo. Y como dice Carpintero, H.(2005) “Uno de los hechos más importantes que han caracterizado la evolución de la psicología científica en la segunda mitad del siglo XX ha sido la emergencia de la psicología cognitiva y con sus correspondientes terapias. Ésta ha venido a imponer un modelo de estudio y análisis de los procesos psicológicos en donde, sin merma de rigor en la objetividad de su estudio, se ha dado cabida no sólo a los datos comportamentales sino también a aquellos otros relativos a los procesos mentales que rigen y dan sentido a la conducta. La psicología cognitiva vino a disolver limitaciones y constricciones que había impuesto a la investigación un conductismo exigente, que pretendía eliminar de su campo de estudio la mente y todo cuanto con ella guarda relación. La necesidad de dar razón de procesos específicamente humanos como el lenguaje, el pensamiento, y el procesamiento consciente de la información, terminó desembocando en nuevos planteamientos que han dado cima a lo que se ha llamado por muchos una «revolución cognitiva», superadora del conductismo precedente. Se ha desarrollado, a partir de ahí, una psicología más amplia y comprensiva, que posee una superior capacidad de explicación de los comportamientos humanos, y que ha 99

evolucionado en estrecha interacción con otras ciencias próximas a ella: la cibernética, la inteligencia artificial, la ciencia cognitiva, la lingüística, y otras más, hasta llegar al moderno campo de las neurociencias. Sus conceptos y sus puntos de vista han venido enriqueciendo la investigación psicológica contemporánea en todos sus campos, tanto teóricos como prácticos. Representan, pues, el presente de nuestra ciencia psicológica, y el camino y fundamento desde el que se está construyendo su futuro”.

FILOSOFIA Y PSICOLOGIA. En psicología, muchas concepciones que parecían esenciales, han sido rebasadas con increíble rapidez, pero el propio surgir y consolidarse de concepciones encontradas muestra que el interés por los problemas psicológicos se ha ampliado enormemente. Como escribía Zunini en 1958 "aunque el primer brote no haya alcanzado el desarrollo esperado, la vitalidad del tronco ha quedado demostrada no sólo por la abundancia de nuevos retoños, sino por la misma capacidad de asimilación respecto a las doctrinas adversas que la psicología ha demostrado poseer". Efectivamente, como resultado del desarrollo histórico, la filosofía y la fisiología han sido las dos matrices de las que se ha separado la psicología. Y todavía hoy, si no se llegan a aclarar debidamente los niveles de análisis podría parecer que la psicología ocupa una posición embarazosa al poseer por un lado toda la unilateralidad de las ciencias analíticas, y por otra parte, toda la amplitud de las de síntesis y de pensamiento que no permiten olvidar que la psicología también es del espíritu, en cuanto que las exigencias de orden superior son un dato de la experiencia humana. Entonces, se pueden dar teorías generales de toda o la mayoría de la conducta humana que habiendo invertido los deseos de Dilthey, no han despreciado, sin embargo, la vivencia del espíritu a pesar de que actualmente su evaluación naturalista sea aún difícil de modo indirecto. Al fin y al cabo, una importante tarea de la disciplina científica, es el tratar de una manera ordenada y extensa los hechos estudiados, por lo que cualquier investigador no puede tratar temas interesantes y aislados, sin responder a preguntas importantes y relacionadas con el cómo organizar el conocimiento existente, reconociendo la limitación de sus 100

métodos a la hora de explorar los presupuestos y resultados del pensamiento que, siendo una peculiaridad humana, lleva indeleblemente impreso el carácter "humano" como complemento y a veces contrapuesto al puramente biológico.

No se renuncia a una concepción teórica (es decir, filosófica) sino que se examina y tamiza con seriedad y espíritu constructivo, pues, si uno contempla el andamiaje conceptual de las diversas escuelas psicológicas, no es difícil advertir que las diferencias, a veces tan tenazmente defendidas, se deben más a la interpretación de los hechos que a los mismos hechos en sí.

La labor de la teoría psicológica es hacer racional y sistemática la búsqueda del psicólogo en la comprensión de la conducta humana en todos sus aspectos sanos y menos anos, normales y más o menos normales. Es la manera de superar la cinemática de las relaciones entre el organismo y su medio, de hacer un modelo de hombre cabal y compatible con las teorías psicológicas contemporáneas haciendo ciencia lo que en frase de James era esperanza de una ciencia. Decía este autor que "cuando hablamos de la psicología como una ciencia natural, no debemos asumir que esto signifique una psicología asentada sobre terreno sólido. Significa precisamente lo contrario; significa una psicología particularmente frágil y dentro de la cual las aguas de la crítica metafísica rezuman en cada unión, ..

Una sarta de hechos desnudos; pequeñas charlas y habladurías sobre opiniones; una ligera clasificación y generalización a nivel descriptivo; un fuerte prejuicio de que tenemos estados de la mente y de que nuestro cerebro los condiciona: pero ni una sola ley en el sentido en que la física nos las muestra, ni una sola proposición a partir de la cual pueda ser deducida casualmente alguna consecuencia... Esto no es ciencia, es sólo esperanza de una ciencia. (This is no science, it is only the hope of a science)

Estas frases entroncan con la necesidad y apremio de primeros de siglo, de una psicología y también de una psicoterapia, con pretensiones de rigor científico, lo cual 101

sirvió para que experimentara una profunda transformación perdiéndose la conciencia por así decirlo, por el camino científico. No obstante, la psicología se considera ya ciencia sin que por ello, haya perdido su espíritu filosófico heredado en el estudio de la asociación y del preconizado mecanicismo cartesiano.

La psicología emprende una gran reforma a través del matiz conductista de Watson, ya demandada por Piéron y Janet al decir respectivamente, que el comportamiento y la conducta eran el objeto de la psicología, como igualmente Pavlov en Rusia y McDougall en Inglaterra. El mismo Ortega al hablar "Sobre el concepto de la sensación", exponía también, su teoría del hombre como realidad ejecutiva, como dice Yela (1980) en el mismo año 1913, noto por el manifiesto conductista watsoniano. El pleito contra la introspección nos llevaría a considerar que la conciencia ya no era el objeto de estudio sino órgano de conocimiento dado que "La psicología, tal como la concibe el conductista, es una rama experimental, puramente objetiva, de la ciencia natural. Su meta teórica consiste en la predicción y control de la conducta. La introspección no forma parte esencial de sus métodos... Le es tan poco necesaria como a la física o a la química". (Watson, 1913.

Así, se ofrece una psicología que adopta un método experimental en el que todas las variables son observables, definibles, medibles y controlables con precisión e intersubjetivamente, acercándonos con gran éxito a poder acoger nuestra parte más humana o cercana a la tierra (humus) en todas las respuestas sensomotrices. A pesar de que ya es difícil identificar conducta con conductismo, la influencia de esta escuela es estimada por su metodología objetiva y evaluativa, cuando se piensa que la psicología no tiene por qué preocuparse de cuestiones propias de la especulación filosófica. Hasta el mismo Piaget (1965) nos advierte a los psicólogos de los peligros de la filosofía para la investigación psicológica y científica, y como dice Pinillos (1984), toda esta historia de la psicología desde este punto de vista, nos acercaría más al hombre máquina imaginado por La Mettrie que al hombre interior de San Agustín.

102

PSICOLOGIA Y FISIOLOGIA Mi antiguo Prof. Zunini (1958) decía que una vez establecida la buena vecindad del confín más peligroso de la filosofía, era necesario examinar la relación cortejante de la psicología con la otra vecina, la fisiología que tampoco no era más de fiar y lástima que todavía no hubiera encontrado la fórmula química que condensara el desdén que a veces establece ante la psicología.

De hecho existen tendencias expansionistas en la fisiología que intentan tutelar la psicología. Habituados fisiológicamente a tratar de descubrir los elementos físico-químicos de nuestros hechos vitales nos puede llevar a ver tan sólo también, al hombre como máquina sin llegar a separar bien, lo objetivo de lo subjetivo.

Históricamente es la búsqueda de la objetividad ya propuesta por Comte para la psicología y el estudio de la conciencia debe ser sustituido por el de actividades más tangibles y públicas. Es la disolución de la psicología introspectiva en biología y sociología. Como dice Pinillos (1984) es determinar las condiciones del comportamiento, situándolas de alguna manera fuera de él. Serían así, los estímulos físicos, sociales u orgánicos, los procesos de condicionamiento y la actividad nerviosa superior, los campos de fuerza físicos y cerebrales y, finalmente, las pulsiones inconscientes, los determinantes de la conducta y de la actividad psíquica. En 1870, el fisiólogo Sechenov ya decía que era el mismo fisiólogo el que debía investigar los problemas de la psicología. A veces, por más que los psicólogos nos esforcemos en hacer ver que la percepción y la memoria son a la vez más y menos que los datos sensoriales o acontecimientos singulares registrados en nuestros organismos, porque se da una elaboración de los mismos, hay ciertos fisiólogos que piensan que esto no es más que una prematura anticipación psicológica destinada a desaparecer a medida que se haga luz en los procesos biológicos.

Sin embargo, el hombre o la conducta humana no puede ser reducida al mero estudio de sus reflejos y queda ya establecido que metodológicamente existe un nivel de análisis psicofisiológico y de actividades bioquímicas y fisiológicas que son 103

partes pertinentes de la actividad conductual. Tales actividades se influyen y se determinan unas a otras pero a nivel de análisis son diferenciables. Queda claro también, que es deber sobre todo del psicólogo hacerse un habitus mentis psicológico para no invadir otros campos ni dejarse invadir su propio campo u objeto de estudio. Y respecto al campo de estudio, el

mismo conductismo como

interpretación particular de la conducta, tan cercano a la reflexología y fisiología, consideró a través del tiempo, que su interpretación de que la conducta fuera la reacción física a un estímulo físico era si no falsa, sí insuficiente. Por lo tanto, ni psicologismo ni psiquiatrismo médico en psicoterapia.

Ya Watson advertía que el programa conductual siendo el más cercano al mecanicismo lineal no debía ser desvirtuado pensando que era una mera fisiología. Para él mismo, el estímulo no era ya sólo energía física, sino también situación estimulante; la respuesta no sólo reacción muscular, sino también, acción significativa. Como dice Yela (1980), a partir de 1960 la autocrítica va transformando el conductismo en psicología cognitiva de la conducta, consolidándose claramente la nueva perspectiva en el discurso presidencial de Hebb a la Asociación Americana de Psicología "The American Revolution". Y así, se empieza a hablar de un conductismo subjetivo, interpretando la conducta como acción de un sujeto. Como muy bien aclara el mismo Yela, la conducta es considerada como la actividad del ser vivo organizada hacia un fin. Como algo que hace el sujeto y no sólo como algo que se hace en él. Actividad, biológicamente significativa, por la que el organismo se adapta a su medio y con acción, dotada de sentido personal, por la que el hombre se atiene a su mundo.

Y es que todo organismo al ser una estructura se compone de sistemas y subsistemas y cuando el subsistema fisiológico actúa como parte del todo orgánico, también éste, puede ser analizado en su parte estructural bioquímica; pero tanto lo bioquímico como lo fisiológico van a actuar en todo el organismo dando lugar a la conducta cuando el organismo se comporta como un todo y no considerando sólo una de sus partes o sistemas. 104

Si comparamos un poco el homo sapiens y el homo faber veríamos cómo decía Bergson (1908) que el "homo faber" precede al "homo sapiens" en cuanto la realidad esta gobernada por un determinismo instrumental que se da en las partes y en los subsistemas cuando trabajan por sí solos sin que todavía se capte su íntimo sentido; entonces, equivocamos a veces, la organización con la fabricación, el instrumento con el efecto o la respuesta. Esto es fundamental para saber calibrar la acción del psicólogo que a través de la mínima Ley de Watson, E - R, acoge en su observación una organización o estructura desde las más pequeñas células del organismo como puede ser un espermatozoo considerado como un todo, midiendo su reacción a la estimulación, hasta el más complejo ser vivo que se interrelaciona con otro ser vivo, estimulándose mutuamente. Sin embargo, el bioquímico y el fisiólogo sólo estudiarían a lo más su constitución y fabricación de una manera molecular. Sin embargo, actualmente los avances de las

neurociencias empiezan a superar el

cartesiano dualismo cuerpo – mente con la convicción de que todas las facultades mentales son fruto de la actividad cerebral.(Rubia, F. 2009)

Podríamos decir que aún en este campo sin ser pretenciosos, el ojo del psicólogo es mucho más penetrante que el de los biólogos y fisiólogos, incluso en los datos biológicos al estudiar su organización e interpretar su sentido en el hacer conductual, mientras que el bioquímico y el fisiólogo podrán ir descubriendo nuevos nexos causales entre los diversos fenómenos biológicos y las funciones que se dan en las estructuras de los organismos vivos, pero su particular interpretación de la conducta como tan sólo una reacción física a un estímulo físico queda insuficiente ante la evidencia de los hechos. Hay que tener en cuenta que no hay un mundo si no hay un observador para describirlo y esta descripción refleja la manera de cómo funciona el espíritu del observador. Y este es el pensamiento de Watzlawick cuando

se

pregunta ¿cuál es la realidad de la realidad o el estatus de lo que consideramos realidad? La respuesta es que la realidad, tal como la concebimos, es siempre una construcción del espíritu humano (constructivismo)

105

LA PSICOLOGIA y PSICOTERAPIA ACTUAL. Aclarados los límites vecinales y estableciendo con ellos pactos metodológicos de investigación bien clarificados, la psicología y la psicoterapia también, al mirar dentro de su propia casa encuentra que en los momentos actuales, "si el estímulo tiene que incluir en su definición su significado para el organismo, y la respuesta su acción sobre el medio, se ha eliminado toda base para la distinción epistemológica entre las teorías E - R y las llamadas teorías subjetivas", como nos lo recuerda Yela (1974) al citar la conclusión de Koch. Incluso aquí, se puede decir que se encontraba también, el último y criticado conductista Skinner (1957), cuando en "La conducta Verbal" nos habla de estímulo privado que puede ser interpretado como correspondiente a un aspecto externamente inobservable del comportamiento, y en "Ciencia y Conducta humana" dice que el "informe en sí mismo no es más que la mitad de la historia" que puede explicar los hechos internos.

Zunini, escribía que existe en la psicología una congénita antinomia entre análisis y totalidad, entre la ciencia psicológica de observación y la peculiar unidad de la vida psíquica que a veces se escapa a determinaciones cuantitativas, lo cual no quiere decir que éstas no se deban realizar, y ahora incluso, también lo está haciendo ya, la psicología humanística y transpersonalista, en sus correspondientes terapias para considerarlas como eficaces.

"La psicología actual reconoce que el sujeto humano, y toda su interna organización psicosomática, como dice Yela (1975) no está simplemente entre el estímulo y la respuesta. Va a la situación con ciertas actitudes y disposiciones -pro-yectos, pro-pósitos, pre-juicios, pre-disposiciones, pre-tensiones, pre-visiones- en virtud de las cuales se sitúa en el mundo y confiere a la situación estimulante la forma y sentido de situación significativa".

Así, de modo muy diverso y con variadas peculiaridades metodológicas y hermenéuticas convergen hoy día, los múltiples enfoques y paradigmas de la psicología, al concebir de un modo general, como objeto de estudio psicológico el 106

cómo se comporta el hombre como estructura total, al elaborar sus signos, normas e ideales, y en función de ellos, autodescubrirse y valorarse y apropiarse de su mundo y de su acción, disponiéndose de sí mismo y personalizándose. (Yela, 1980. Y en la psicoterapia si acudimos a Masserman también, cuando reconocía que “los esfuerzos de Moreno para llamar la atención sobre el carácter recíproco (Zweifühlung) de toda clara percepción y comunicación (tele) en la relación médicopaciente, así como en todas las demás interrelaciones humanas constituye una de las importantes aproximaciones a una necesaria revaloración de la dinámica general de la influencia interpersonal”. (Moreno, 1967,p.70)

Si buscáramos una definición diacrónica de la psicología se podría concebir como Ciencia de la Actividad Humana (Mayor, 1985) y sincrónicamente el estudio científico de la actividad molar de los organismos, y en especial, del hombre. (Fernández Trespalacios, 1986. Pero, como muy bien dice Yela (1987), la conducta es acción y actividad orteguiana, y no son dos realidades separadas, ni la actividad psico-orgánica del "homo faber" se reduce a ser simple medio para ejecutar la acción. "La acción se elabora con la actividad y la actividad se integra en la acción".

Finalmente, el hombre continúa, a lo largo de su vida, configurando su personalidad; desde luego, a partir de las posibilidades y límites que le ofrecen su dotación genética, sus primeras experiencias y sin duda, en función de las circunstancias en que acontece y se modula su conducta ulterior (Yela, 1987) Y Moreno (1967), decía los aspectos tangibles de lo que se conoce como yo son los roles con que opera (p.24)

El mismo Gemelli, (1947) defendía que al hacer corresponder vida interior y comportamiento como base de la metodología del estudio de la personalidad, tenía las ventajas de no tener que apelar a filosofías, pues, se podía mantener en el terreno de los hechos positivos, hacer ver la correspondencia funcional entre la actividad orgánica y la psíquica y buscar las correlaciones en una profunda y sustancial unificación, dando esto mismo, justificación a las diferencias individuales. 107

Y sin pretender personalizar, la misma ciencia psicológica por sí misma, ha sabido delimitar con precisión, hasta con parsimonia, el territorio donde ella se constituye en reina, aunque a veces le sea difícil mantener dignamente su puesto entre las ciencias naturales y las del espíritu, al cual se acerca como Moisés a la tierra prometida sin entrar, mientras no sepa usar la metodología adecuada a tal ciencia.

Su propia madurez le lleva a considerar sus propios errores hasta el punto de autoestudiarse en

una de las paradojas más antiguas de la filosofía como la

aparente contradicción entre los grandes triunfos y los grandes errores de la mente. Esto es, la misma mente que resuelve los problemas, comete errores; errores que parecen poder atribuirse a violaciones de las mismas leyes inferenciales que subyacen a los éxitos más impresionantes de las personas. (Nisbett - Ross, 1980) Creo que esto es lo que ha vivido la ciencia psicológica en su propia carne, siendo vista a veces como hija pródiga por la filosofía o como aventurera por la fisiología. Hoy en día, hay que tener en cuenta, que "quizá el problema de la psicología en nuestro tiempo, es que está cada vez más cerca de una nueva identidad. Nueva identidad que no necesita ni intrusionismos ni protectorados sino que más bien sabe pasar y convertirse de una psicología del -ser- en una psicología del -estar- (estar en - situación - del - individuo)", como dice Carpintero (1976) y componiendo una imagen y realidad de estudio científico, de una estructura existencial en la compleja realidad social, no sin emociones ni racionalismos, sino en lo más humano de la misma vida humana, en el sí mismo en el que el hombre busca su humanidad. No olvidemos que la realidad de primer orden solamente nos da la realidad de la que recibimos en nuestros sentidos, pero es la realidad de segundo orden la que supone la significación que recibimos de nuestros sentidos. Como dice, Bebchuk, J.(1994), al principio estábamos atentos a los efectos de los mensajes (E-R- y consecuencias) y a desenvolvernos como agentes de cambio. Últimamente, nuestra atención se dirige cada vez más hacia las formas en que se crean los significados durante la interacción comunicativa, desplazándose nuestro quehacer terapéutico hacia la narrativa en las conversaciones y relatos. Corsini al adelantar la función de la comunicación en el concepto tele, apuntaba de cómo así el terapeuta era capaz de 108

sentir que el paciente es capaz de ver sus propios problemas, y a los pacientes como capaces de ayudarse uno a otro.(Moreno,1967 p.150) Estamos en la exploración de una visión hermenéutica cuyos principales intereses residen en la interpretación y la comprensión como procesos intersubjetivos.

Esta búsqueda de la Humanidad no se puede realizar sin tener en cuenta que el hombre no es un estímulo para otro hombre y viceversa, sino también significado que se adquiere en la relación con el otro que como ya decía Donne, John en 1624 “No man is an island, entire of itself; every man is a piece of the continent, a part of the main”. (Devotions XVII. (Tudor, K.(1999)

Finalizando estas reflexiones, en las que he preferido citar notables autoridades, veo que lo más humano de la psicología y de la psicoterapia debe provenir del estudio de la misma conducta como quería Watson es decir, de lo que el hombre hace, cómo lo hace y para qué lo hace, y además, en una relación interindividual interpersonal. Para mí es muy humano lo que hace ya, a partir de la primera ley de la psicología por breve que ella sea en su formulación y rica metodológicamente en el análisis del todo, pues, el hombre, en el fondo, haga lo que haga, hace siempre una y la misma cosa: desvelar y construir el mundo de los hombres, expresar su personalidad y hacerse a sí mismo. (Yela, 1974) Y lo mismo acontece en la psicoterapia en que la interacción de estímulo y respuesta se da entre dos sujetos. En este sentido, Moreno, J. L.(1967) decía “el paciente no está acostado ni sentado, se mueve, actúa, habla como en la vida misma; a ratos no está obligado a nada, ni a moverse, ni a hacer ni a hablar, sino simplemente a ser”. Creo que es un modelo de respeto y de búsqueda y encuentro de lo verdaderamente humano.

Ya decía en otro trabajo (De Nicolás, 1984), cómo el psicólogo en su rol y con su profunda formación filosófico-antropológico- cultural y bio-psico-social de carácter científico experimental, al estudiar todas las funciones y procesos de la psicología, es el que en la actualidad puede salvar el abismo que entre lo corporal y lo anímico se 109

creó en la rebelde adolescencia de su misma ciencia. Nuestra tarea es ardua, difícil y apasionante. Hablando en términos Eriksonianos en la inferioridad se desarrolló la industriosidad y ante la dispersión se buscó la identidad entre los diversos niveles psicológicos sin la grave amenaza de psicologizar al hombre, pretendiendo dar respuesta a todos los problemas y misterios del ser humano. Más bien, a través de la observación, análisis y estudio nuestra ciencia psicológica humaniza al intentar acercarse con sus solas fuerzas al hombre y en lo que puede como ciencia y en lo que como profesionales de una ciencia y un arte psicoterapéutico, podemos ayudar al hombre a lo largo de toda su vida, desde el nacimiento hasta la muerte, a saber enfrentarse con todos sus problemas con serenidad, lo cual ya es psicoterapia también. Tratar así, de ir construyendo lo que desde hace unos años comienza a llamarse Life- Span Psychology: una psicología de la vida total del hombre. (Yela, 1987).

Por ello, concluyo parafraseando a Moreno(1967,p.70) que tanto en la psicología como en la psicoterapia científica hay algunos puntos básicos y comunes como el denominador común de que todas las estimulaciones y respuestas se dan en las relaciones humanas y además, que todos tenemos un propósito experimental de evaluación de los métodos de psicología y psicoterapia que no he querido separar como dos ramas diferentes aunque didácticamente haya que hacerlo dentro de nuestros límites de estudio e investigación.

Como decía Shilder, P.(1965) aunque no esté de acuerdo con otras opiniones suyas, la psicoterapia rama de la ciencia psicológica y psicopatológica no constituye un arte sino un procedimiento técnico, basado en principios científicos, donde ha de existir también una relación humana porque tal relación se encuentra en todo tratamiento, inclusive cuando parece pertenecer sólo a la esfera somática.

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El Dr. Luis De Nicolás, reside en Vitoria, España. Actualmente es Profesor Catedrático desde el 1-X-2007-propio de la Universidad de Deusto y Vicedecano del COP de Alava, Especialista en Psicología Clínica, desde 1984. Entre 1974 y 2007, fue Profesor tutor de la Universidad Nacional a Distancia en el Centro Vitoria – Gasteiz. Fue Director del Instituto de Relaciones Humanas Vitoria Gasteiz y del Centro de Psicodrama y Sociodrama Zerka T.Moreno en Vitoria Gasteiz y de la Escuela de Psicodrama, Sociodrama y Dinámica de Grupo Z-T Moreno, acreditada y reconocida por la Federación Europea de Organizaciones de Entrenamiento en Psicodrama (FEPTO),( Viena, 21-04-2005) Formación: Es Lic. en Filosofía y Psicología egresado de la Universidad Complutense de Madrid, Master en Salud Mental en la, Título de Postgrado en Salud – Fundación OMIEUniversidad de Deusto , Doctor Diplomado Ph-Psych- Universidad del S. C. De Milán, obtuvo Certificados de Postgrado de Especialización en Cuidados Paliativos, Victimología y Criminología- Universidad de Deusto, UNED, es Doctor Homologado por el Estado acreditado por el Ministerio de Educación y Universidades. Algunas de las líneas de investigación en que ha trabajado: Estrés postrauma, pragmática de la comunicación, terapia individual, familiar y de grupo, psicodrama, crisis, emergencias, desastres y catástrofes, cuidados paliativos, patología de la organización, acoso moral, violencia en la organización, etc. Con publicaciones propias sobre estas materias e investigaciones subvencionadas y con más de cincuenta tesis dirigidas.

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4.3 Lo humano en la escena psicodramática* Autora: Dra. Mónica Zuretti NOTA: Este trabajo, fue publicado en la colección Letras de Deusto, Vol. 22 N° 54/junio de 1992. María Mónica Zuretti* y Luis de Nicolás**

Tengo mucho gusto en presentaros a la Directora del Instituto de Psicodrama de Buenos Aires en Argentina y que conozco desde el año 1987 a través de los Cursos de Formación de Psicoterapeutas de Grupo, que el Gobierno Vasco organizaba en el Hospital Psiquiátrico de Zamudio. ** Desde entonces, he tenido la ocasión continuada de participar en sus seminarios, cursos, trabajos escritos y de saborear su exquisita metodología del hacer en Psicodrama y Sociodrama tanto en Vitoria como en Bilbao, durante tantas horas y horas de formación. Leeros ahora, la amplia bibliografía, su contínua participación en seminarios y congresos internacionales, su formación médica y psicodramática recibida en el Moreno Institute de la New York University de Estados Unidos, así como su proyección tanto académica en la Universidad de Belgrano y en las reuniones internacionales, como profesional en su Instituto a través de las técnicas terapéuticas aplicadas, sería robaros unos preciosos minutos a su conferencia. Solamente diré que esta Universidad ya la conoce a través de dos Seminarios Internacionales, celebrados en nuestros Laboratorios de Psicología sobre Terapia Familiar Sistémica y Psicodrama y talleres celebrados con los alumnos al igual que el que mañana celebraremos en esta Universidad. Y menciono esto, porque a través de su trabajo, los participantes hemos definido y resumido su acción terapéutica dentro de la intensidad del drama en cuanto a palabras: sensibilidad, delicadeza y elegante finura 115

en la profundidad del problema humano de cada persona y del grupo en la escena psicodramática. Por ello, al mismo tiempo que dejo el turno a su cálida palabra, os dejo que podáis comprobar lo dicho, al mismo tiempo que le deseo que sea elegida Presidenta de la Asociación Internacional de Psicoterapia de Grupo, en la que por derecho ocupará ya, la Vicepresidencia si nos es elegida para el primer puesto.**

-“Agradezco mucho las palabras que Luis ha pronunciado en esta breve y precisa presentación y al mismo tiempo, cálida, que hace que me encuentre muy a gusto aquí en esta Universidad y, también, en este país. El País Vasco se ha transformado casi en mi segunda casa y cada vez que vengo me resulta sumamente placentero, agradable y es como reencontrarme con partes mías muy agradables. De hecho a pesar de que mi apellido es de origen italiano, mi apellido materno es de origen vasco, entonces cada vez que estoy aquí es un poco estar de nuevo en casa. Bueno, yo voy a comunicarme con ustedes intentando transmitirles qué es lo que a mí se me ocurrió a partir de lo humano en la escena psicodramática que Luis me puso como título y tema de esta conferencia”.*

*Conferencia pronunciada por la Directora del Instituto de Psicodrama de Buenos Aires de Argentina en el Auditorium de la Universidad de Deusto con motivo de la VI Semana de la Facultad de Psicología y Ciencias de la Educación “El futuro de las Humanidades” **Presentación y revisión del texto por el Vicedecano de la Sección de Psicología

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La humanidad desafía constantemente su impulso evolutivo a pesar de tantas detenciones, traiciones, dificultades; logra como un solo ser, caminar en el camino de la evolución.

Cuando el hombre da el salto cualitativo que le permite integrarse como ser trascendente, descubre la mediatez, la inmanencia y la posibilidad de ser. Descubre en sí la chispa divina que le permite ser espontáneamente creativo y superar los escollos que el medio pone en su supervivencia. La llama principal de esta creatividad es el amor. La posibilidad de encontrarse con otros, un ser que le permita reflejarse, y a partir del dos comienza el tres, que siempre estuvo presente esperando que ese dos supiera de su existencia.

El hombre, a través de los siglos, ha creado diferentes formas de comunicación con aquellas dimensiones que sus sentidos no abarcan, con aquellas emociones que superan su racionalidad y con los misterios que las ideas desarrolladas aún no han dado respuesta.

Así, la humanidad ha pasado por innumerables estadios de claridad y oscurantismo. La escena psicodramática se inserta una vez más, en esta continuidad y abre un nuevo y antiguo camino de expresión.

En algún momento, los rituales de las tribus primitivas alcanzaron al hombre como relación con la naturaleza. Esta relación mágica se fue delimitando y con el tiempo los ritos tomaron la estructura necesaria para expresar y dominar una cultura. Crecieron los imperios, y lo que no podía abarcarse con la razón se abarcaba con el poder. El Cristo trae al habitante de la tierra, por primera vez la conciencia de ser hijos de Dios, de ser cocreadores todos y cada uno; concepto que, con continuidades y rupturas, ocupará la evolución de los últimos 2.000 años.

117

En este “tiempo”, como fue en su momento el descentramiento de la tierra al entregarle al sol, el lugar único y primordial, acontece con respecto al hombre, cuando el reconocimiento del proceso inconsciente por la racionalidad descentra también, al yo consciente. Una nueva revolución nos obliga a integrar nuestro ser como un todo que piensa y siente, pero que sabe que parte de lo que siente llega a no ser pensado.

El hombre pasa entonces a ser un ser misterioso, inaccesible, como antes lo era la naturaleza; mejor dicho, como siempre será la naturaleza. Este planeta, que tiene como la humanidad reglas claras de día y noche, invierno y verano, tiene también un oscuro universo secreto

que lo hace expresarse imprevistamente, causando

catástrofes y magníficas reparaciones.

Nuevamente el hombre entiende que, entre él y la naturaleza que lo rodea hay una profunda identidad, pero utiliza todavía formas mecánicas de comprensión, guiado por sus sentidos y equipara a la psique humana a un aparato con compartimentos. Hay algo que, sin embargo, no cumple las leyes. En este aparato el tiempo no existe.

Es ahora la física moderna la que destruye aparatos y sentidos. El universo es, en realidad, energía en diversos grados de concentración. El más mínimo pensamiento tiene acción sobre el objeto. No existe ya la diferencia entre materia y energía, cuerpo y psique o alma y espíritu. No existen más que diferencias de vibración. ¿Caminará realmente la humanidad hacia la evolución espiritual?

En todas estas vicisitudes de la humanidad, la escena psicodramática ha estado siempre presente. “Psicodrama” significa “acción del alma” y si a esta palabra le agregamos su nombre completo “Sociopsicodrama” nos encontramos con que estos que hemos confundido con una técnica o una metodología, no es más que la acción del alma en compañía, definiendo su humanidad, como un conjunto de seres que, por haber encontrado en un instante de salto cualitativo en el planeta tierra, su espontaneidad creativa comienza su camino de evolución en conjunto, socialmente, en cuerpo y alma. 118

Teniendo en cuenta esta definición, el psicodrama como metodología, sólo recorta de la totalidad de la experiencia humana un mensaje, lo lleva a la acción en un espacio que por consenso se considera el del “como si”, el de la creación, el de la modificación, un espacio, en fin, casi sagrado, en el que ocurrirá aquello que hará que quien lo utilice cambie, se cree a sí mismo y cree el mundo.

En este espacio, el cual la humanidad a través de siglos ha dado diversos nombres: círculo, ritual, anfiteatro, atrio, teatro, toma lugar aquello que el hombre puede pensar y sentir y aún no ser animado a llevar a la acción de su vida. Es un espacio de ensayo, de cambio de lo equivocado que le pertenece a cualquier hombre que se traiciona cuando se utiliza con intenciones ideológicas.

Los grupos jasídicos y las tribus primitivas conocían intuitivamente aquello que nos dice el Evangelio: “Si dos o más se reúnen en mi nombre yo estaré entre ellos”. Cada vez que un grupo se reúne con intención de sanarse, de sanar a uno de sus miembros o por extensión a la humanidad, eleva una oración al Creador, que le permite participar en su Obra. Oración consciente o inconsciente de quienes se reúnen.

La escena psicodramática, tema que nos convoca, surge de esta comunión. Un conjunto de seres se reúne con la finalidad de que, en un espacio multidimensional donde el tiempo es un tiempo esférico, aquellos que desarrollan su drama, es decir, su acción, su escena, lo hagan por sí mismos por el grupo que los rodea y los contiene; ya que expresan, influyendo en ese universo de energía de un modo recíproco, donde si bien cada ser tiene un espacio individual propio, también actúa en ese espacio y en cada uno de ellos, el de los otros. Se nos permite pensar así como en cada individuo influye su medio y su grupo, un grupo multiplicará esta posibilidad y uno o muchos pequeños grupos influirán en una sociedad e, en una cultura (12 fueron los apóstoles) y si el objetivo de sanación se cumple, se extenderá a todos aquellos que lo reciban.

Para que este objetivo se cumpla, un grupo debe alinear su cuerpo, su corazón y su 119

espíritu y así lograr la armonía y la paz, sentido de lo humano. Cada vez que comenzamos una sesión de psicodrama, sabemos que si tiene lugar es porque la humanidad en evolución tiene tantos agujeros negros devoradores de energía que la mantienen aferrada a una involución, y que estos se expresan en cada uno de sus pequeños grupos, familias individuos y sólo con un gran caudal de amor que compense la atracción, pueden seguir su camino de expansión.

Así la humanidad toda está presente cuando en una escena de sociopsicodrama que trae un protagonista, se recrea una situación de maltrato, de prohibición, de dolor, con la finalidad de buscar un origen y liberarlo; y así como dice Don Juan, cambiar el final del cuento. Al cambiarlo de este modo, es abrir una puerta a la luz de un conocimiento distinto.

La escena psicodramática se desarrolla como la humanidad, en un habitat, en un espacio tiempo, con un protagonista que dramatiza aquello que los integrantes del grupo, incluido él, necesitan para encontrar una nueva instancia evolutiva. En una escena psicodramática no hay escena ni sin locus, sin matriz donde desarrollarse y sin protagonista hombre que la habita, así como planeta y humanidad. Y en esta dualidad no hay crecimiento si no se integra en ella el amor, que da lugar a la creatividad y a la trascendencia.

Subiendo anteayer hacia Ávila, cuando ya me acercaba a ella, mi corazón respondía desde recónditas experiencias humanas escondidas en sus piedras de esta tierra majestuosa. Totalmente sintónica con la imagen de la Santa que se encontraba en ella, en mi memoria con sus pies descalzos por esa tierra y ese espacio en el planeta; si no fuera así, no hubiera tomado para mí, socia en la humanidad evolutiva, un significado trascendente y permanente que me incluía en el desafío de vivir.

La escena psicodramática entonces va a hablarnos del hombre, del ser hombre y una escena, una zona, con acción pasiva que pasa a estar en actividad en pocos momentos, cuando aquellos que la habitan se ponen en contacto. 120

La magia de la misma escena será que aquellos allí presentes en un aquí y ahora, traerán a su realidad psicodramática desde las diversas dimensiones y tiempos, aquellos que deben poblarla. Santa Teresa y yo en los montes de Ávila, un niño y el Principito en las serenas noches de Bulgaria. El terror frente al poder de un oso de piedra en un niño indio, la presencia amada de un ser querido que ha partido, la reconciliación de quienes se quieren. En fin, todo aquello que a través de siglos ha tejido la trama de una humanidad que, como el Manto de Penélope, se teje y se desteje en búsqueda de la resurrección.

Ayer, cuando caminaba por Ávila, estaba en un espacio muy buscado por mí. Durante mucho tiempo esperé conocer ese lugar. Cuando llegué al convento entré y la presencia de Santa Teresa estaba por todas partes. Estaba muy impactada por esta realidad de su presencia, y de repente alguien golpea en mi hombro y me dice si quería conocer la celda. Al entrar, mi sensación fue que en una escena psicodramática tendría la misma fuerza que tiene para mí en este instante, en este encuentro con alguien que ha acompañado toda mi vida en diferentes momentos, en diferentes lugares.

Me parecía que no era casualidad que hubiera llegado allí antes de tener que hablar sobre la humanidad en la escena del psicodrama.

Y ahora, en este momento, yo tengo la impresión de que estamos demasiado lejos y sintiendo la necesidad de levantarme me acerco a vosotros salvando la distancia de este espacio académico. Así una de las primeras cosas que ocurren en psicodrama, una de las diferencias que tiene con otras formas de trabajo psicoterapéutico es que uno se pone en movimiento. El espacio es muy importante y la escena toma lugar en una dimensión espacial. Yo creo que esta especie de tribuna de oradores nos separaba totalmente, o

a lo mejor esto que les dije los dejó sin palabras, pero

rompiendo esta barrera espero oír vuestras palabras a través de las mismas preguntas que me hagáis: 121

Pregunta: Yo tengo una pregunta. Cuando usted ha hablado de su estancia en Ávila ¿ha querido decir que el psicodrama sería un encuentro real o sólo sería una puesta en escena? Mónica : Creo que por eso tiene el psicodrama la fuerza. A medida que uno trabaja en una escena, en una acción donde por consenso todos los que están presentes consideran que ese es el lugar donde la escena va a tomar lugar. Todo aquello que ocurre allí dentro tiene caracteres de presencias reales. Una vez hablando con un filósofo, yo le decía: Bueno, pero ¿qué es esto de la definición de lo real?, parece ser que es aquello que por consenso consideras realidad. Una experiencia muy importante para gente que ha trabajado en psicodrama es, por ejemplo, el encuentro con seres que ya no están, que han muerto y que en ese momento en que en una escena de psicodrama vuelves a encontrarte con alguien querido y hay un yo auxiliar, otra persona que toma ese lugar, realmente la intensidad y la fuerza de la escena habla de cómo aquello que sientes cobra realidad, que fue lo que me pasó el otro día con Santa Teresa. Pregunta: Yo te quería preguntar, ¿cómo compaginás la comprensión psicodramática y la psicoanalítica? Parece como que el psicoanálisis tiende a ser muy pasivo y muy verbal ¿no?, compaginarlo con el psicodrama es como la acción, el cuerpo y contacto. ¿Cómo se compagina? Mónica:

Yo creo que si lo quieres compaginar puedes ver el psicoanálisis como un modo de pensar con el cual vas a entender aquello que ocurre en el mundo alrededor suyo, y esto puedes extenderlo a la escena del psicodrama. Si trabajas con una comprensión psicoanalítica de lo psicodramático lo que va a ocurrir es que una vez que se desarrolle una escena, por ejemplo, el encuentro entre una familia, esa escena que ocurra la vas a interpretar psicoanalíticamente. Todos los conceptos psicoanalíticos van a estar presentes: el complejo de Edipo, la represión, etc. Tienes diferentes maneras de trabajarlo: una es haciendo una interpretación verbal, otra es 122

logrando una escena que dé la interpretación psicoanalítica de esa escena. No es como yo trabajo habitualmente, porque yo trabajo esperando que el que encuentre la respuesta sea el mismo protagonista y entonces no siempre coincide la interpretación psicoanalítica con la respuesta que el protagonista encuentra. De todas maneras tenemos que pensar el psicodrama psicoanalítico como una extensión técnica porque en realidad, de base, el psicoanálisis no lo admitiría como tal, pero buen. Muchas cosas han evolucionado con el tiempo. Luis:

Desde Aristóteles tienes qué es la acción. Un hombre se realiza en la acción. Después ten en cuenta que el psicoanálisis nunca ha prescindido de la no-verbalidad. El abuso del psicoanálisis en la interpretación inoportuna, en ese abuso estás poniendo tú, palabras en el paciente que no son de él. El psicodrama lleva la no interpretación al máximo porque debe permitir la expresión tanto verbal y corporal del paciente, del sujeto, de los que forman el encuentro.

Mónica:

Yo había pensado contarles una experiencia. Estaba trabajando hace unos meses en los países del Este y entonces el protagonista se plantea por qué no puede escribir una trabajo científico que tiene que presentar en un congreso. Él es aceptado por el resto del grupo y empieza a trabajar. La escena es en su oficina, frente a una máquina de escribir, en un costado de la escena hay una biblioteca. En psicodrama haces un cambio de roles. Le pido que tome el lugar de la biblioteca. Toma el lugar de la biblioteca y la biblioteca dice que ha sido hecha con sus propias manos y que cuando él se propone hacer algo puede. En ese momento, él vuelve a su rol y recuerda una escena de su primera adolescencia, donde está leyendo, es de noche, y está leyendo casi en secreto porque su madre tiene miedo que él lea cierto tipo de literatura y su padre lo apoya a él. La literatura que leía, a mí me pareció al mismo tiempo extremadamente tierno y a la vez doloroso, era El Principito. Lo que para nosotros hubiera sido una lectura lógica en esa edad era para ellos sumamente peligroso en aquel momento. Lo que él encuentra es que el padre a quien traemos a la escena dice 123

palabras muy semejantes a la biblioteca: que él tiene que ponés interés realmente y va a lograr hacerlo si él se lo propone. Volvemos, en psicodrama solemos volver a la primera escena, en ese momento está frente a la máquina de escribir y siente que puede escribir, pero dice algo así: ”cuánto más fácil es superar los miedos de afuera que los miedos que le quedan a uno dentro”. Me acordé de este ejemplo porque en realidad están el padre, la madre y tendrías mil maneras de interpretarlo: lo social, lo edípico, lo interno y reprimido. Pero sin ninguna interpretación de ninguno de los miembros del grupo, él va a encontrar la salida a esa parálisis nada más que con los cambios en la escena psicodramática. Comentario: Mónica, una situación que hace bastantes años he vivido con vos, a partir de una angustia bastante grande por una pacientita del hospital que tenía cáncer, una adolescente. Yo supervisé con vos este caso. Mi formación es psicoanalítica primigenia, y vos me hiciste hacer un cambio de roles con un almohadón, el almohadón era el tumor. Hasta dónde uno tiene límites para el trabajo y hasta dónde tiene uno que quedarse tranquilo porque si no, me involucraba demasiado con la paciente, y tampoco la iba a poder ayudar ni psicoanalíticamente, ni psicodramáticamente, ni lo que la paciente necesitara. Esta escena que hicimos juntas fue muy importante. Mónica:

Es muy importante que traigas esto, porque en realidad cuando apareció el tema de “Lo Humano en la Escena Psicodramática”, yo pensé. ¿qué es la esencia del psicodrama?, y la esencia del psicodrama es ponerse en el lugar del otro. Es hacer el cambio de rol, y uno puede hacer el cambio de rol con múltiples cosas, y creo que el ejemplo que traes, el cambiar de rol con algo que está amenazando al paciente en ese momento, en realidad transmite hasta dónde aquel que se está ocupando de esa persona puede y debe llegar. Además creo que se cumplió, me parece, con tranquilizar a aquel que estaba trabajando en cuanto a su propio poder, sus propios límites. Hasta dónde puedes ayudar, hasta dónde puedes acompañar y hasta dónde 124

puedes cuidar al otro ¿no?. Cuánto es tuyo y cuánto es del otro. Eso creo que es válido para cualquier psicoterapia. Pregunta: Hablabas de que has trabajado en los países del Este. ¿Qué diferencia hay a la hora de hacer una psicoterapia entre un sitio y otro? Mónica:

Todo depende de qué grado de compromiso tienes con el grupo y a qué nivel está trabajando ese grupo. A nivel social, que es la primera matriz con la que trabajas, hay diferencias importantes. Hay diferencias en cuanto al modo de comunicar, en cuanto al modo de expresarse, hay diferencias de roles. Trabajando aquí en esta zona, al comienzo, yo sentía que era difícil empezar y ahora me doy cuenta, me voy a hacer una interpretación inmediatamente, porque una de las cosas más difíciles que me ocurrió fue el silencio. Habitualmente los grupos aquí en el País Vasco tardan mucho tiempo para contestar, cosa que los italianos no...o sea que yo lucho entre las dos identificaciones. Hoy, seguramente, cuando les pregunté si me iban a hacer una pregunta yo tenía una actitud un poco distinta, a lo mejor, que la actitud que tiene el grupo. Esto es importante a ese nivel, pero cuando empiezas a trabajar con situaciones más profundas cada vez, la gente se parece más y la humanidad, en última instancia tiene problemas fundamentales básicos, y sobre todo los mismos en cualquier lugar del mundo. Cuando trabajás con el amor, el amor se expresa aparentemente diferente, pero se expresa igual en cualquier lugar. Cuando hablas de muerte, la muerte es igual para alguien que está en Siberia que para alguien que está en La Pampa y cuando hablas de nacer también es igual. En realidad, cuanto más profundamente trabajas más me parece posible, es decir, cuando pasa de matriz y llegas a la matriz de identidad de un individuo, lo fundamental no es cultural y social, sino humano.

Pregunta: ¿Cómo diferencias la relación entre el grupo de terapia y fuera?. Tú podrías tener a todos los pacientes que has tenido como amigos íntimos. Mónica:

Y los tengo.

Pregunta: Eso es difícil de llevar, ¿no? 125

Mónica: Y lindo...Una cosa que aprendí –es una pregunta linda- es al comienzo, yo tenía mucho temor porque uno se conecta profundamente con la gente cuando trabajas a un nivel afectivamente tan importante como trabaja el psicodrama. Uno de los temores era perder estos vínculos. Con el tiempo me di cuenta de que no se pierden nunca. Una vez que uno los establece, aunque no se reencuentre nunca, en la realidad concreta ese vínculo tiene presencia y existencia. Esta es mi experiencia...Te has quedado pensando. Comentario: Sí, yo he hecho Bioenergética y Análisis Transaccional y yo era amiga de la terapeuta que me hizo la terapia y me surgía la dificultad de separar la amistad de la terapia. Mónica:

Ahí estás entrando en otro tema un poco difícil. Si estás haciendo un proceso de psicoterapia con alguien durante un tiempo es realmente difícil combinar una situación de amistad y una situación de terapia, porque no se mantiene la misma situación de objetividad que tendrías si no existe esa amistad ¿no es cierto?. El psicoanálisis absolutamente, no admitiría una situación en la que

coincidan

los

dos

roles,

porque

transferencialmente

estás

sobrecargando el vínculo. Psicodramáticamente no es tan taxativa la diferencia. Cuando yo te hablaba de estos vínculos te dije que tengo alrededor del mundo, habitualmente yo enseño psicodrama o trabajo en psicodrama

alrededor

del

mundo,

pero

no

establezco

relaciones

terapéuticas que se mantienen en el tiempo. De hecho estoy y me voy y la situación es un poco distinta. Además el objetivo del psicodrama es que las relaciones se transformen en relaciones TELE, que son una relación en donde yo me percibo a mí mismo, percibo al otro y en esta percepción del otro incluyo la percepción que el otro tiene de mí, lo más aproximada a la realidad posible, en donde el nivel de transferencia sea el mínimo. Entonces trabajaríamos constantemente sobre limpiar la transferencia, no establecerla. Esto sería una diferencia metodológica entre un enfoque y otro. Comentario: La humanidad en realidad es uno. Mónica:

Yo creo que sí, Hay otra cita en el Evangelio que habla de que la 126

humanidad es uno. Pregunta: Al hablar de psicodrama, me llamó la atención el aspecto de teatro. Me parece que es un enfoque que deja aparte lo racional. Mónica:

El único modo de tomar al hombre es como ser integrado. No puedes dejar de lado lo racional., la mitad del cerebro y la mitad del cuerpo fuera, dejarías de pensar. Pero si lo racional no está integrado con el sentimiento, con una certeza de trascendencia parecería que entonces trabajamos con un hombre dividido, por lo menos desde mi posición. Si lo que entiendes está separado de lo que sientes, probablemente esto sea una situación muy difícil de vida y una tenga que tratar de integrarlo para poder seguir en evolución. Entonces, ¿por qué elijo yo psicodrama? Porque me permite hacer esa integración, porque básicamente me permite trabajar –aunque el psicoanálisis para nada niega esto- desde un modo de comunicación preverbal con más facilidad de la que me dan otras técnicas. No porque sea más racional que otras técnicas, porque puede ser absolutamente racional y siempre integrando pensamiento y sentimiento.

Comentario: Cuando hablas de integrar el sujeto dividido. Yo pienso que un ser humano, por el hecho de serlo siempre tenderá a la división y que la aspiración a integrarlo es, si quieres, el motor de la esperanza pero que no se llega. Mónica:

De acuerdo. Si no, no estaríamos en evolución, supongo ¿no?, si hubiéramos llegado. Me parece linda la reflexión, porque realmente esa es la esperanza del ser humano.

Luis:

Yo estoy de acuerdo, pero hay que ver desde qué perspectiva miras el asunto. Si lo ves desde el punto de vista psiquiátrico, de clasificación, es verdad que hay división del yo, se habla de una esquizofrenia, de una paranoia. En ese sentido la ciencia nos induce a hacer muchas divisiones, clasificaciones que pueden ser muy válidas científicamente; pero el esquizofrénico, a pesar de que se dice que tiene una división, es un ser integrado, solamente que la respuesta de salida para ser integrado es una clasificación que la sociedad la tilda de esquizofrénica. Pero es una reacción 127

de un ser integrado, considerado normal o anormal por ciertas culturas, situaciones, y si hay poco de integración es por falta de elementos bioquímicos en determinados casos. Pero en esta integración del yo el problema...yo diría es el desarrollo de la madurez, del devenir del yo, desde el nacimiento hasta la muerte y esa muerte que viene trascendida, es también una integración, bien en la naturaleza como tierra, humus o bien trascendiendo la misma naturaleza. De hecho, lo que se vive muchas veces en escenas psicodramáticas – cuando se vive el concepto de humanidad- es que se es uno, igual estando 15 personas que no sienten ninguna diferenciación ni espiritual no corporal, sino que viven una unidad en la humanidad y que además trasciende. Esto es experiencia. Ortega:

Refiriéndome a la conferencia y a lo que expone la Profesora Mónica diría que “eso es Idealismo puro”. Yo racionalizo mis propios sentimientos. Yo por mucho que me ponga en el lugar del otro podré racionalizar sentimientos pero son mis propios sentimientos.

Osés:

Yo voy a mediar un poco. Somos aquí unos convidados de piedra que nos hemos quedado de piedra, ¿verdad? Un tema que no se ha tocado es el de la negatividad. Hemos hablado de amores, de idealismos, expresiones, evoluciones, trascendencia, Evangelio, -encima estamos en Deusto-, encantado de la vida. Mi generación decía “Haz el amor y no la guerra”, pero hacer el amor es la guerra misma, el amor es una tragedia, es un psicodrama estrepitoso. Entonces creo que falta un elemento, pues Junguiano. No ha salido el tema de la negatividad, de la muerte, del odio, del horror, de la agresividad. Junto a la idealidad de está la materialidad y la macabrez. Los muertos, los no integrados, la escisión. Lo que podemos hacer, ¿qué es? Paños calientes, cataplasma. La herida no es superable, sólo es supurable. Tratar de exorcizar el mal, que es lo que he querido traer a colación: el mal, la negatividad, la muerte, lo demoníaco.

Mónica:

Me parece importantísimo, porque fijate, cómo en una escena de 128

psicodrama ya ha aparecido, ya la tienen y lo he mencionado en mi conferencia. O. Osés:

Sí, pero gracias a mí. He hecho de abogado del diablo, de lo demoníaco. Aquí se habla de la felicidad. Debe ser cosa de otros, porque vamos, el hombre tiene derecho a la felicidad, sí, pero el deber de no ser idiota. Armonía es estar bien con los propios demonios.

Mónica:

Además diábolo es separar. Fijate qué importante. Yo os agradezco a los dos. Yo pregunté:¿Dónde está, ¿qué es el izquierdo?, ¿Qué es el derecho? Has traído justamente,de conde podría surgir una escena psicodramática. En este momento se llena el escenario de un conflicto, no hay posibilidad de solución del agujero negro de la humanidad involutiva, que de alguna manera lo nombré, ni el dolor ni de la agresión, ni de todas esas cosas que hacen al hombre, porque si no, el hombre ya estaría en la esperanza, ya estaría más allá, ya hubiera cumplido su evolución, cosa que no ha hecho. Entonces, no habría posibilidad sobre todo eso que tú has traído, no habría posibilidad de trabajar sobre los agujeros negros si de algún modo el conflicto no hubiera surgido. A partir de ahora ¿qué nos plantearíamos? ¿Quién trae ese conflicto? ¿Quién trae la división en este grupo? ¿Cuál es el ejemplo que ustedes pueden ver? No tenemos tiempo, no me han dado tiempo para trabajar, me han dicho que hable, nada más. En el ejemplo en una sociedad como la búlgara en el momento en donde se está quemando el partido comunista, un personaje, en un grupo de psicodrama, se anima a traer el conflicto que le implicaba leer El Principito. A partir del conflicto vamos a encontrar el agujero negro, vamos a encontrar la división, vamos a encontrar todo aquello que nuestro inconsciente colectivo lleva y personifica en cada uno de nosotros. A partir de ahí, la escena psicodramática va a tener condiciones muy particulares: va a tener la condición de trabajar sobre el conflicto –éste que surgió aquí, gracias a Dios y por suerte, o dejemos a Dios de una lado, gracias al grupo-, y a partir de este conflicto vamos a encontrar si el protagonista de esa situación va a seguir camino del agujero 129

negro, va a seguir en su conflicto o va a tener la posiblidad de encontrar una salida en la esperanza. Moreno fue el creador del psicodrama. Moreno no usaba el concepto de inconsciente colectivo, él usaba el concepto de co-inconsciente y llamaba co-inconsciente a todo aquello que ocurre en una relación que incluye la experiencia colectiva de la humanidad pero que se actualiza en ese vínculo real del aquí y ahora y el límite está puesto por ese vínculo real del aquíahora, por ejemplo, aquí: Deusto, este lugar, etc. Todo este proceso que ocurre como experiencia compartida limitado por una experiencia espacio-tiempo lo llamaría el co-inconsciente. A diferencia de esas experiencias o de la vivencia con el malo. Con respecto a la esquizofrenia, es una sociedad la que clasifica. En una sociedad primitiva de repente alguien podría tener características de chamán. No todas las experiencias que han sido clasificadas como patológicas desde la psiquiatría lo son en realidad. Luis:

Añadiría que, desde el aspecto cultural también el psicodrama tiene raíces en el jasidismo que influye en Moreno, como sección semita del judaísmo, que se fundamentaba en el encuentro como, felicitad, ayuda al prójimo, en contraposición también a lo que entonces vivía la sociedad. También, en el nacimiento de las terapias hay aspectos culturales muy importantes.

Mónica: Cuando trabajas en una situación muy conflictiva, por ejemplo, una situación en la que un protagonista trae una situación de tortura –difícilmente es encontrar una situación más terrible- hasta que aquél que está trabajando su propia escena no encuentra en sí mismo su aspecto de torturador, hasta que no hace inversión con el rol del otro y hasta que no se encuentra a sí mismo en situación de tortura hacia un tercero, no puede reparar el daño interno. Es decir, hasta que no encuentra su sombra no resuelve la situación de conflicto porque si no la proyectaría siempre en el otro. Entonces, recupera sentimientos que son del otro, que racionalmente son del otro, pero entonces no le sirve. Solamente, cuando encuentra dentro suyo aquello que está cargado de su sombra, aquello cargado de su propia 130

negatividad, en ese momento puede reparar. Ese es el camino de esperanza y que yo sigo pensando que es de luz. Ortega:

Lo importante no es echar miel sobre hojuelas, sino vivir la tragedia, vivir con ella. La sensación que tenía yo aquí es que se intentaba esconder la tragedia debajo de una felicidad más o menos común a todos, del amor. Pero lo importante es vivir la tragedia, vivir en ella. No lanzar al exterior y decir “bueno, la tragedia no importa”.

Mónica: No creo que lo haya dicho en ningún momento. He hablado en algún momento del dolor, etc. Realmente lo que yo he encontrado en mi trabajo psiquiátrico, psicoterapéutico es que habitualmente cuando se trabaja en psicodrama con mucha paciencia y se espera, el protagonista suele encontrar en su propia historia algún elemento de reparación. Porque de hecho, si no, no estaría en el escenario del psicodrama. Ya la posibilidad de traer una escena está implicando que algo fue alguna vez lo suficientemente continente para que él sea quien es. Esto es una posición mía, pero el tiempo me la ha ido confirmando. Esto no es así, cuando yo trabajo con un protagonista psiquiátrico psicótico, porque ese protagonista no tiene ni siquiera la posibilidad de recordar una mano que en un momento dado, le contuviera lo suficiente para que le pudiera contener las sombras. Yo empecé trabajando como pediatra. En mi país hay un cuadro terrible que ocurre en los chiquitos que no comen. Cuando esa patología llega a un límite esos chiquitos mueren o hacen un cuadro físico terrible. Había en el hospital un “bebito” con ese cuadro, tenía diarrea, no lográbamos cambiar su estado, bueno, sabíamos que se moría. Al lado de su cama se internó una mamá con un “bebito” que tenía, no sé, una diarrea estival, que también son muy frecuentes, pero un “bebito” en buena condición. Aquella madre empieza a cuidar de los dos, fue un día de internamiento o así. La mamá lo único que hacía era cuando terminaba de acunar a uno, acunaba al otro. Ella se quedaba a dormir en el hospital, le daba de comer a los dos bebitos y el cuadro cambió en uno o dos días. Salió del hospital en un día. Yo siempre tengo esa imagen para el trabajo psiquiátrico. Cuando alguna 131

vez uno encuentra en el camino una mano que le acaricia y esa mano que le acaricia, le permite salir de aquello que lo puede llevar a la desestructuración, a la muerte, a la sombra, le da esperanza y luz.

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BIBLIOGRAFIA Zuretti. M. M. “ Átomo social perceptual, campo operativo en psicodrama” en Psicodrama, aportes a una teoría de los roles, de Sauri – Menegazzo – Zuretti – Noseda de Bustos – Severino Edit. Cocentia-Proyecto Cinae, Buenos Aires, 1991. “El color de la mezcla” Edit. Docencia. Buenos Aires, 1991 “Sangre, odio y amor” Sociodrama de América. Edit. Docencia, Buenos Aires, 1988

133

4.4 ¿Existen matrices y roles anteriores a la matriz de identidad y a los roles psicosomáticos? Desde la genética al psicodrama. Elba Martinez Picabea de Giorgiutti- Médica Genetista 1- Introducción Toda acción terapéutica grupal o individual requiere de una instrumentación o metodología basada en un fundamento teórico.

La terapia psicodramática, el teatro de la espontaneidad, la sociometría, se apoyan en la teoría moreniana del vínculo. De ella también se nutren otras corrientes que profundizan el trabajo terapéutico tendiente a cerrar la brecha entre fantasía y realidad; a producir el encuentro.

Nuestra hipótesis propone algunos elementos teóricos nuevos. 2- Desarrollo El hombre es un ser esencialmente vincular. Jacobo Moreno lo expresó de manera elocuente cuando enunció los principios de su teoría psicodramática. Pero no fue el único: otros contemporáneos lo demostraron, desde diferentes disciplinas, con idéntica rigurosidad científica: Carlos Darwin con su teoría de la evolución mediante la selección natural; Jacques Monod desde la filosofía de la biología, con su retorno a Demócrito en “El Azar y la Necesidad”; Max Planck, desde la teoría cuántica; y tantos otros como Erwin Schrodinger, Pierre Teilhard de Chardin, Bertrand Russell, Niels Bohr, y el mismo Einstein. (Siempre la memoria circunstancial

134

nos acosa con olvidos que son imperdonables) El hombre es un ser vincular. La existencia de esta vincularidad no presupone necesariamente la “conciencia” de vincularidad. Bajo esta hipótesis - fácil de probar - alguien puede ser el polo no conciente de un vínculo, y sin embargo explorable por métodos que trabajan con el inconciente y aun con el co-inconciente. A modo de ejemplo: un embrión en sus estadios más primitivos, no tiene conciencia, en el sentido ortodoxo del término, de su carácter de polo de un vínculo en la matriz de identidad. Sin embargo el vínculo existe más allá de la conciencia.

2-1 Nuestros interrogantes más elementales El tiempo y el espacio constituyen los continentes ineludibles de la naturaleza toda. El hombre no escapa a esta generalización: es el último convidado de piedra que debutó entre los seres vivos y rápidamente se apoderó del timón de los hechos naturales. Cuando la física clásica de Newton fue conmovida en sus cimientos más genuinos con el descubrimiento de Max Planck del “cuanto de acción”, se suscitó repentinamente la urgencia de un replanteo de los fundamentos que subyacen a nuestra interpretación de los fenómenos naturales. El universo está compuesto de “cuantos” que pueden comportarse como partículas o como ondas (es decir, como materia o energía). El verdadero prodigio es que estos “cuantos” pueden ser a la vez ondas o partículas, según estados de probabilidad. Esto es: pueden existir simultáneamente en varios estados probables distintos. La teoría cuántica enuncia, por primera vez, que la realidad es sólo virtual, es decir que existe a los ojos del observador que forma parte ineludible de esa realidad. El “cuanto” permite definir la inestabilidad de la materia-energía en forma continua y

135

permanente. Desde esta óptica se podría suponer que la vincularidad del hombre sería posible en matrices materiales o energéticas, y con otros individuos o elementos del medio, que le permitan el desarrollo de sus roles actuales pasados o futuros. Einstein nos ayuda, en nuestra hipótesis, al permitirnos el vínculo con el pasado y con el futuro más allá del tiempo y del espacio. Ambos conceptos, el de Planck y el de Einstein, hacen posible la vincularidad del hombre en dos vertientes diferenciadas: una dentro de un espacio- tiempo continente (las matrices de Moreno) y otra más allá de la concepción convencional de espaciotiempo, que en realidad es un espacio-tiempo de duración incierta y geografía desconocida. El hombre a través de su historia, ha sido capaz de adquirir conocimientos. Y no sólo el conocimiento de los hechos particulares, sino- y aquí radica algo de su esencia de Homo sapiens-, el conocimiento general. Hemos sido capaces de interpretar objetos, ciclos y eventos particulares para acceder al acontecer del universo; aunque este universo, que es objeto de nuestra curiosidad y atrevimiento, siga aún más oculto que visible a nuestra innegable limitación neuronal. El investigador científico debe ajustarse, en su quehacer,

a los métodos y

procedimientos de la ciencia. Desde el siglo XVII sabemos que, independientemente de las diferentes corrientes que se sucedieron desde entonces,

la observación

empírica, la formulación de hipótesis y la justificación de lo propuesto, mediante pruebas que imiten lo que ocurre en la naturaleza, constituyen los ejes sobre los que discurre el método de estudio en ciencias naturales. “Conocer”, en su sentido más genuino, no es – según Ortega y Gasset – “contentarse con las cosas según ellas se nos presentan, sino buscar tras ellas su ser”. Pues bien, en los comienzos el hombre debe haberse deslumbrado con la observación de la realidad de su entorno. Nuestros precursores más primitivos hicieron su aparición en el planeta cuando todo estaba ya hecho. Homo sapiens se 136

incorporó a la comunidad de los seres vivos casi a último momento. De ahí su desconcierto y también su curiosidad. Esta curiosidad fue el punto de partida -el motor inicial- que le hizo posible primero comprender, aunque sólo fuera rudimentariamente y luego intentar reproducir, los fenómenos de la naturaleza. Movido por los interrogantes que la realidad externa le sugerían, debe haber intentado, en primer término, aproximarse con cautela al conocimiento de estos fenómenos ajenos a sí, a la esencia de “lo otro”. Hasta que un día el hombre descubrió, con asombro e incredulidad, que él mismo era parte de “lo otro”. Que su existencia también era una incógnita. Que, ante sí, la extrañeza de las cosas debía ser la misma de siempre. No sabía ni quién era, ni de dónde venía ni hacia dónde marchaban sus pasos. Tomó conciencia, irremediablemente, de su indisoluble integración dentro del concierto de elementos de esa

realidad que le era

contemporánea.

al

Su

rol

de

observador

dio

lugar

de

sujeto

de

observación. Así comenzó a gestarse la conciencia del ser y con ello el tránsito del lento camino de su destino entre la infinita variedad de seres vivos que lo habían precedido. La ambición última de la ciencia es la comprensión de la relación del hombre con el universo. Pero entre esta realidad y el conocimiento se interpone, como sello inevitable de la limitación humana, nuestro propio umbral de observación, nuestra limitada capacidad de comprender. De modo que sólo somos capaces, desde la ciencia, de abordar aspectos parciales de esta relación del hombre con el universo. (Me permito dudar de nuestra posibilidad de llegar algún día por esta vía exclusiva – la de la ciencia- al conocimiento de la totalidad. Tal vez mi pensamiento no alcanza a comprender la profundidad de Stephen Hawking que afirma lo contrario. Ni la relación del hombre con su entrono, ni los interrogantes más profundos respecto de su propio estatus ontológico, podrán ser abordados en su integralidad mediante los exclusivos recursos de la ciencia. El hombre es mucho más que su organismo. Luego podremos afirmar que también es mucho más que su genoma. Recién hablábamos de la física. Es innegable que también la biología es una de las 137

ramas de la ciencia que más ha contribuido a la formación del pensamiento moderno. Podríamos afirmar, con poco riesgo de equivocarnos, que los aportes de esta disciplina han ejercido su influencia en casi todos los quehaceres de la cultura humana. La teoría de la evolución, formulada en la segunda mitad del siglo XIX,

ha

encontrado, recién mucho después, el fundamento de su validez fenomenológica en los descubrimientos más recientes de la biología; esto es: en la genética. Cuando Darwin presentó en sociedad su teoría de la evolución de las especies mediante la selección natural, lo hizo sobre la hipótesis de la existencia de un “árbol de la vida” en el cual se insertan, desde las más simples hasta las más complejas, todas las formas vivas que hay, que hubo y que habrá. Hoy sabemos que, sin necesidad de profundizar en los descubrimientos más recientes de la genética molecular y la genética evolutiva, la afirmación de Darwin respecto de la existencia de ancestros comunes, es un hecho validado suficientemente por el descubrimiento de código genético que es universal. Porque compartimos ancestros, compartimos el código. Pero no nos extenderemos sobre este asunto que podría alejarnos de nuestro objetivo inmediato. Pruebas elocuentes y numerosas tenemos, mediante la experiencia de nuestros sentidos, de la variedad y multiplicidad de los otros seres vivos que nos acompañan en nuestro planeta. Sin embargo, a pesar de esta innegable diversidad, aparece como una necesidad insoslayable de la condición humana la búsqueda permanente de entidades inmutables. La tentación, casi platónica, de perseguir un prototipo, un común denominador, que permita finalmente abarcar a todas las formas vivas sin excepción. Jacques Monod lo puso en palabras de la siguiente manera: “En la diversidad infinita de los fenómenos singulares la ciencia no puede buscar mas que invariantes”. Y es a fuerza de preguntarse una y otra vez, de recorrer los caminos del ensayo y el error, que el hombre comenzó finalmente a encontrar. Su intuición se vio plasmada 138

en realidad. Su aspiración se transformó en regocijo a la vista del descubrimiento del código genético. Éste - y no otro - era el invariante perseguido. El código genético es de una simpleza tal que, paradójicamente,

nos dificulta

enormemente su descripción en pocas palabras. Digamos solamente que el ADN, molécula de la vida-, que es autoduplicable, se caracteriza por una riquísima versatilidad en cuya base reside el fundamento del proceso evolutivo de las especies. La posibilidad, a lo largo de los tiempos, de numerosas variantes de ADN ha sido el punto de partida de nuevas formas de vida con mayor aptitud para sobrevivir que sus antecesores. Los cambios en la secuencia del código genético, por alteración química del mismo, se llaman “mutaciones”. Cada mutación, en la manifestación que produce en el individuo que la porta, le otorga a éste ventajas o desventajas con respecto a los otros contemporáneos. De esta manera la mutación interactúa con el ambiente en un proceso de adaptación del ser vivo a las condiciones de su entorno. Así sobrevive el más “apto”. Y cuando hablo de “apto” lo hago entre comillas, porque veremos enseguida que las ventajas adaptativas de un individuo sobre otros, y de una especie sobre otras, particularmente en el caso del hombre, no sólo tienen que ver con la constitución de su ADN, sino también con el clima, la geografía, los hábitos, las conductas individuales y grupales, y la cultura; y que a veces, en mérito a nuestra cultura, no siempre sobrevive el más apto. Nos consta, desgraciadamente, que son numerosos los individuos y aún las poblaciones humanas con buenas posibilidades genéticas de origen, pero en los cuales la existencia de factores ambientales adversos como una alimentación inadecuada o la carencia de alfabetización o la recurrencia de infecciones que serían fácilmente controlables, hacen - de estos seres humanos “despojos” humanos en virtud de los “avances” de nuestra cultura y de nuestros sistemas políticos y económicos. De modo que no seamos tan deterministas con respecto a nuestro pobre genoma. Nuestra realidad actual es ilustrativa de aquello que fácilmente podemos comprender: la evolución biológica no ha sido, a partir del hombre, el factor único de 139

cambio en un sentido de adaptación al medio. Es, precisamente a partir de nosotros que el proceso se complica. Hemos generado una presión de selección diferente de la natural, en aquello que - aunque se conozca menos que otros aspectos de la teoría darwiniana - también Darwin describió detalladamente: nuestra capacidad de “domesticación”. Los biólogos evolucionistas sólo han tenido en cuenta los factores externos que el ambiente ofrece. La segunda presión evolutiva proviene del cerebro de las especies. Y la inteligencia humana, por lo menos hasta ahora, es la que mayor desarrollo ha experimentado. El hombre, con su racionalidad y su libertad, ha sido capaz de influir en el curso de la propia evolución a partir del producto de su creatividad, es decir de su cultura. Ésta - es decir: la cultura - es en realidad para Homo sapiens, su principal medio de adaptación en nuestros días, su forma de instalarse en el devenir evolutivo. Y esto entraña riesgos: cultura versus natura. También con los avatares del proceso evolutivo el hombre hizo su transición de la condición nómade a la de una vida sedentaria orientada hacia la estabilidad individual y del grupo de pertenencia. Así la organización social encontró lentamente su lugar y la comunidad pasó a constituir una estructura primaria útil y luego necesaria para el desarrollo del proceso de asentamiento. Debutaba una cultura social sin precedentes. La “cultura” – entre comillas y con mayúsculas – es patrimonio exclusivo del hombre. (Por lo tanto, sólo podemos hablar de lo cultural a partir de Homo sapiens). Cuando el ser individual dejó de ser “uno” y de a poco incorporó al “otro” para integrar finalmente el grupo, se inició un proceso que ya no sería posible revertir. El “nosotros” fue una realidad biológico-social de tal magnitud, para el posterior desarrollo del hombre y su cultura, que nos atrevemos a afirmar que marca el comienzo mismo de la condición humana. A partir del Homo sapiens ya no es posible dicotomizar lo biológico, por un lado y lo cultural-social por otro. Ambas vertientes del ser del hombre son inseparables porque

140

a partir de sapiens el hombre sólo existe en el grupo, en la comunidad. Al referirme a la cultura como factor de la evolución, lo hago hablando de lo “culturalsocial” porque creo que la creatividad, como atributo humano, sólo es posible en el vínculo. La cultura en sentido individual es una ficción. No existe cultura sin sociedad. La creatividad del hombre presupone su vincularidad. El rol hace al hombre y aquel se desarrolla en el vínculo. Este hombre, que plasma su ser en el vínculo con los otros y con los elementos de su entorno, reconoce antecedentes evolutivos de larga data. Su filogenia - como mencionamos - lo

remonta hasta las primeras formas vivas con las cuales

está indisolublemente ligado. Pero las primeras formas vivas, cuya aparición en la Tierra ocurrió muchos millones de años después del Big Bang, fueron posibles a través de complejos y poco conocidos procesos energéticos que transformaron, primero, la energía en materia, y, luego, las formas inertes en formas vivas, es decir, en moléculas autoduplicables de ADN. Hoy sabemos que, en el “aquí y ahora” de la realidad humana, el hombre se “construye” y se “modifica” en sus matrices que tendrán sentido mientras sean continentes. En ellas desarrolla sus vínculos y, por lo tanto, sus roles que lo caracterizarán como ser único e irrepetible. A la luz del proceso que acabamos de esbozar cabría preguntarnos por matrices anteriores a la matriz de identidad. Ya Moreno había intuido una matriz genética. El hombre fue, de alguna manera, antes de la matriz de identidad, y será, de otra forma después de la matriz social. Jacobo Moreno, en su clarividencia, que no puede ser sacada del contexto de los conocimientos de su entonces, desarrolló los conceptos de roles y matrices para explicar aspectos fundamentales del hombre, y en base a su teoría estableció una metodología para ayudarlo a vivir mejor. 141

En la cotidianeidad los hombres nos movemos en nuestra matriz social, en el ámbito de cuyo átomo cultural social plasmamos y modificamos nuestros roles sociales o psicodramáticos. De aquí partimos, en el trabajo grupal psicodramático, para adentrarnos en las otras matrices que la preceden. Los roles psicosomáticos - tal vez podríamos homologarlos con las funciones fisiológicas - se inician en la matriz de identidad y su átomo cultural primigenio. Pero ... para que todo esto suceda es necesario que “algo” haya ocurrido antes. ¿Qué es la matriz genética y qué hechos acontecen en ella? Un análisis muy a vuelo de pájaro, desde la perspectiva biológica del hombre (que por supuesto no es la única), nos permite afirmar lo siguiente:

Cada forma de

vida tiene un conjunto distinto de instrucciones en su código genético; instrucciones que están escritas con un alfabeto universal. Los organismos vivos son diferentes, con diferencias inter, e intra-específicas, porque diferentes son las instrucciones de sus genes. Los genes son las unidades de información genética que, por definición, se trasmiten por herencia. En nuestra especie son aproximadamente 30.000 (treinta mil). Los genes se agrupan en cromosomas. Cada célula, excepto las germinales, tiene 46 cromosomas ordenados en 23 pares. Cada cromosoma tiene su homólogo, así como cada gen tiene su alelo. Cromosomas y genes funcionan de a dos, de a pares, y de esta manera, en forma conjunta, trasmiten la información fundamental contenida en el interior de la célula. Las células germinales, -óvulo y espermatozoide-, contienen cada una sólo 23 cromosomas, que sumados a los 23 de la otra célula germinal, en el momento de la fecundación, restituyen el número cromosómico de la especie, es decir 46. Así se forma la célula-huevo. Son, las células germinales, las responsables 142

de la transmisión de la vida entre generaciones y también las portadoras de la variación. Óvulos y espermatozoides de los adultos que hoy los producen, para ponerlos a disposición de quien constituirá su par en un riquísimo juego dialéctico entre células, han recorrido un camino de larga trayectoria para llegar al “aquí y ahora”. Las células precursoras que les dieron origen progresaron lentamente en el sentido de maduración, durante años, para culminar en la danza nupcial que se celebrará en el interior de la trompa en la mujer. Esta dialéctica entre homólogos y alelos se conoce, en el campo de la biología, con términos como “apareamiento”, “intercambio” o “crossing over”. Este complejo proceso se cumple en una matriz: la matriz genética, mediante roles biológicos o celulares que actúan en un vínculo en el que siempre existen dos polos. El momento de la fecundación marca el punto preciso en que la matriz genética deja de ser continente y da paso a la matriz de identidad, con otros polos del vínculo y otros roles: uno de los primeros, el rol de contactador en el momento de la implantación. ¿Existen matrices y roles anteriores a la matriz genética? Hace diez mil o veinte mil millones de años ocurrió la Gran Explosión o Big Bang. A partir de aquí se inició nuestro Universo. Existen teorías que explican qué ocurrió, pero ninguna que nos diga por qué ocurrió aquello. Toda la materia y la energía actualmente presentes en el universo estaban concentradas con una elevadísima densidad. El Universo inició, con aquella explosión, un camino de expansión que aún hoy continúa. Nuestro planeta reconoce una antigüedad de unos 5000 (cinco mil) millones de años. Los primeros organismos vivos tal vez existieron hace 3500 (tres mil quinientos) millones de años. Hace unos 25 (veinticinco) millones de años posiblemente se desarrolló la primera masa encefálica. Y 2 (dos) o tal vez 3 (tres) millones de años atrás podemos ubicar el debut de nuestros ancestros más recientes que dieron 143

origen a Homo hábilis, a Homo erectus, y, finalmente, a Homo sapiens. (¿Homo faber y Homo religiosus?) Este prolongado camino recorrido por el hombre, no ya en su condición de ser humano, sino en cuanto ser vivo, necesario e inevitable para el hoy que nos congrega, debió acontecer en un ámbito o matriz que podríamos llamar la matriz universal. En ella es fácil reconocer roles y vínculos en el tiempo y en el espacio, y aún más allá del tiempo y del espacio, entre seres vivos y no vivos. Pero, antes del Universo, es decir, antes del Big Bang, materia y energía eran una sola cosa, como lo son hoy a la luz de la teoría cuántica. Entonces, tal vez podríamos imaginar que nuestra matriz más primitiva, aquella que cierra el círculo entre lo que fuimos y lo que seremos, es una matriz energética, dónde los polos vinculares también serían energéticos y los cambios sucesivos ocurridos en ella dieron lugar, en algún momento, a matrices posteriores más continentes y por lo tanto, más aptas para nuevos

cambios.

Una apretada síntesis de lo que acabamos de conceptuar nos permitiría expresar que existen, antes de la matriz de identidad, otras que la preceden: 

La matriz genética, con su átomo cultural biogenético u ontogenético dando lugar al juego de roles genéticos.



La matriz evolutiva, con su átomo filogenético y cultural y roles filogenéticos o evolutivos y culturales.



La matriz cósmica con un átomo universal y roles energéticos.

144

2-2 Características de la Matriz Genética: Toda matriz es un vínculo,

y los

roles se fundan en los anteriores.

La matriz genética es un “lugar de aconteceres”. Pero es un lugar amplio en un lapso temporal prolongado. Es prolongada en el tiempo y dispersa en el espacio. Tiene su fundamento en el hecho que los genes vinculan. (También vinculan otros factores hereditarios – no genéticos en sentido estricto – que hoy conocemos con el nombre de “epigenéticos”. Pero éste es ya otro asunto. La enorme cantidad de procesos que tienen lugar en la matriz genética permite el desarrollo y preparación de elementos que convergen en una “zona genética”. J. L. Moreno, define a la “zona” como el “conjunto de elementos propios y ajenos, actuantes y presentes que intervienen en el ejercicio de una función indispensable”. Para que la función se cumpla es imprescindible que todos los elementos de la zona estén “maduros”, estén preparados adecuadamente; es decir, que “entren en foco”. Hay funciones, como las psicosomáticas, para las cuales el entrar en foco es un proceso repetible, ejercitable, perfeccionable, al estilo de un empeñoso aprendizaje de las partes. Otras funciones, especialmente aquellas que se cumplen en la matriz genética, generalmente tienen una única oportunidad de entrar o no en foco, y según como este proceso se cumpla, así resultará el individuo que desarrollará posteriormente otros roles en otras matrices. Los roles en la matriz genética son relativamente fijos con respecto a otros en matrices posteriores. Los roles más primitivos involucran a toda la persona (aunque ya hemos visto cómo, en matrices aún anteriores, los roles pueden llegar a involucrar a un grupo vinculado y aún a una especie o a todo ser. Cuando más evolucionados son los roles más discriminados los aspectos involucrados. La “zona

genética” implica un riquísimo juego dialéctico de genes alelos y 145

cromosomas homólogos. (También interactúan con factores intra y extra celulares, diferentes de los genes y sus mutaciones, que suponen “contactos señalizadores químicos” entre distintas partes de la célula – y aún entre diferentes células - que, como llaves de luz incansables, activan y desactivan procesos permanentemente. Esta visión de la matriz genética no tendría valor en si misma si no fuera porque nos adentra en el concepto de matrices aún anteriores: materiales y energéticas.

3- Conclusiones: La existencia es una realidad a nuestros ojos (teoría cuántica) Esta realidad puede ser material o energética y generalmente es una combinación de ambas. La materia y la energía se transforman continuamente y son equivalentes (Einstein) La “matriz” es el lugar dónde todo se cumple pero también es el tiempo dónde todo se cumple. Nada (creo yo) se ha dicho sobre la materialidad o inmaterialidad de las matrices más primitivas. Una posibilidad gráfica y simple de expresar semi cuantitativamente la participación de los diversos roles en las distintas matrices sería el siguiente esquema:

Modificación de los roles:

Factor Cultural Roles sociales +++++ Roles originarios ++++ Roles psicosomáticos + + + Roles ontogenéticos + + * * Roles evolutivos +* Roles energéticos ?

Factor Biológico + ++ +++ (ej. drogadicción o alcoholismo) ++++ (ej. síndrome de down) ++++++ ?

146

(* sólo dentro de la evolución de los antropoides prehumanos – ejemplos de Homo hábilis y Homo erectus - ya que la cultura es patrimonio exclusivo del hombre). (** Ej: desplazamiento de la edad materna por anticoncepción. Sobre los roles energéticos sería aventurado de mi parte, y no podría –con fundamentos científicos como ha sido mi propuesta hoy-, entrar en la consideración siquiera teórica sobre cuáles serían los factores de modificación. Esta teoría que acabamos de esbozar puede enriquecer otras y tal vez pueda ser aplicada en el desarrollo del trabajo grupal en numerosas instancias.

Algunos grupos de autoayuda, por ejemplo, pueden nutrirse del conocimiento de vínculos en matrices poco exploradas, para comprender mejor el “aquí y ahora”. En la propuesta psicodramática el cambio ocurre cuando, en el encuentro y a través de la acción, se actualizan aspectos de la persona que habían quedado estancados en su evolución.

En familias con niños con enfermedades genéticas, por ejemplo, el aporte desde este punto de vista, puede resultar de gran utilidad al permitir trabajar –sobre un contexto histórico- el “por qué” y el “cómo” y a partir de ellos iniciar el camino de la recomposición vincular. Finalmente, quisiera expresar palabras de un maestro, que me tomo el atrevimiento de hacer mías en este momento: “El hombre es algo más que un ente psicológico, biológico, social y cultural; es un ente cósmico. Reduciendo la responsabilidad del hombre a lo puramente psicológico, social o biológico de la vida se hace de él un marginado. Porque, o bien es coresponsable de todo el universo, de todas las formas del ser y de todos los valores, o bien, su responsabilidad no significa absolutamente nada”. Esto lo dijo Jacobo Moreno y lo escribió así en su libro “Psicología de Grupo y 147

Psicodrama”.

Elba Martínez Picabea de Giorgiutti.  Médica egresada de la Universidad de Buenos Aires. Doctora en Medicina-Universidad de Buenos Aires. Tesis: “Resultados de estudios genéticos en una población infantil del Gran Buenos Aires.  Estudios de Postgrado en Argentina, USA e Italia. Áreas de especialización: GENÉTICA MÉDICA, BIOÉTICA, FILOSOFÍA DE LA CIENCIA.  Cargos docentes en: Univesidad de Buenos Aires, Universidad de Belgrano, Pontificia Universidad Católica Argentina y, por convenio, en otras universidades del interior del país.  Miembro del grupo fundador del Centro de Genética, por convenio entre la Secretaría de Salud Pública de la Nación y la Secretaría de Salud Pública de la Nación y la Asociación de Facultades de Medicina de la República Argentina.  Jefe del Servicio de Genética del Hospital Materno Infantil de San Isidro.  Directora del “Instituto de Genética y Medicina Prenatal de Buenos Aires”  Fundadora y Directora de “GENMÉDICA, INSTITUTO DE GENÉTICA”.  Jurado por invitación para la aceptación de trabajos a publicar en medios científicos argentinos y extranjeros en: Revista Latinoamericana de Genética, Archivos Argentinos de Pediatría, Medicina, Mendeliana, Journal of Basic and Applied Genetics, entre otros.  Miembro del Comité editor de Journal of Basics and Aplied Genetics (ex Mendeliana).  Presidente de la Sociedad Argentina de Genética.

 Miembro del Comité Asesor de la Sociedad Argentina de Genética

148

4.5 El Psicodrama, Divino Tesoro

Autora: Débora Penna A lo largo de nuestra historia, la de cada uno de nosotros, la de nuestras familias, la de la sociedad humana, muchas son las cosas que ocurrieron, muchas son las historias que se cuentan. Algunas parecen olvidadas, y sin embargo, nos encontramos con que una y otra vez tropezamos con ellas en el camino. Esto nos lo cuentan todos aquellos síntomas físicos o psíquicos que enmascaran lo no resuelto en nuestra historia personal, o en lo que llamamos “síndrome aniversario” en lo que respecta a lo familiar, o en síntomas sociales como el hambre, la discriminación, la injusticia, la esclavitud, el autoritarismo, las epidemias y, hoy, la pandemia. Cómo saber entonces cuándo, cómo, dónde, con quiénes y por qué se suscitaron aquellas historias dolorosas, traumáticas, no resueltas, que se transformaron en semillas y como tales cumplen con su función a través de su ciclo vital, ¿cómo evidenciar aquella memoria que sigilosamente guardan en sus genes?.

Es aquí donde nace la psicología intentando múltiples respuestas de la mano de diferentes teorías que, muchas veces, da la sensación de que, más que resolver, siguen agregando velos a esa verdad fundamental encerrada en aquellas historias de origen.

De entre todas ellas se destaca el Psicodrama, una teoría, un modelo que emerge en la primera mitad del siglo veinte, que nos propone ir en busca del origen, “el locus nascendi”, el lugar de los acontecimientos fundantes. Es este espacio/tiempo original, la matriz, universo de acciones e interacciones fundamentales y constitutivas donde se generan todos nuestros roles, donde lo vital, lo esencial, contó con la oportunidad de ser, es allí donde podemos reconocernos en la espontaneidad y creatividad “Divina” de la que nos habla Jacobo Levy Moreno, su creador, quién nos propone, a partir del “como si” psicodramático, la posibilidad de mirar más allá, de develar todo lo 149

que sea necesario para llegar a esa instancia original y fundante, para luego ser capaces de concretar nuestro anhelo más profundo, el de ser quienes deseamos ser. En cada individuo humano, en cada acto, en cada vínculo, en cada instante, coexisten y se coimplican todas las matrices, la cósmica, la genético-biológica, la materna, la de identidad, la familiar y la social, todas poderosamente relacionadas y conectadas entre sí.

Es a partir de esta cosmovisión, que el individuo organiza coherentemente su propia vida y su propia muerte, situando el encuentro tanto en el comienzo como en el final de los tiempos, siendo el desarrollo individual no más que una parte, ínfima pero fundamental, de una gran “evolución en curso”. Para trabajar específicamente en cada uno de estos universos de acciones e interacciones fundamentales y constitutivas, Moreno nos propone distintas técnicas, las que cada uno de nosotros, como terapeutas, vamos adquiriendo y desarrollando en la medida en que nos introducimos en este nuevo mundo, en esta nueva concepción que nos propone el

Psicodrama, donde se nos invita a ir hacia una

búsqueda y ampliación constante de nuestra creatividad y espontaneidad. Fue justamente en esta búsqueda que me fui cruzando con una cuestión que considero esencial y que podría sintetizar en la siguiente pregunta: ¿qué es específicamente la Matriz Cósmica, cuáles serían los roles específicos que emergen y qué técnicas se podrían implementar para poder trabajar en y con ella?.

De la mano de esta pregunta, con la guía de mi maestra, la Doctora Mónica Zuretti, discípula de J. L. Moreno, atravesé un largo camino plagado de escenas, historias que se fueron plasmando una a una en el escenario de psicodrama, y en el que otros maestros (cómo olvidar a Zerka Moreno, y en otro momento a Shirley Barcklay), fueron enriqueciendo mi posibilidad de ir más allá, entregándome las herramientas necesarias para intentar develar “el secreto encriptado en un jeroglífico bien resguardado en el alma de aquella pirámide en la que, en un “como si” tan real como suelen serlo en medio de un psicodrama, entré esa vez que quise ir en busca del 150

origen de mi nombre y que al salir me esperaba una sacerdotisa en cuyo manto se hallaba desplegado un mazo de cartas de Tarot.

Muchos hechos se sucedieron luego de aquel psicodrama, pero, resguardada en el modelo y bajo la guía de mis maestros, me atreví a ir más allá. Entendí al Psicodrama como una filosofía de vida que recorrí atravesada por todas las matrices sabiendo que, por un instante, con ayuda del yo observador que nos propone el rol de Director, podría visualizar en el como si psicodramático, algunas pistas que me guiaran hacia aquello que estaba buscando. Fueron aquellas pistas las que nos decidieron a radicarnos con mi familia a San Miguel del Monte, una pequeña ciudad ubicada a 100 kilómetros de Buenos Aires, donde nos instalamos en una chacra para poder entender todo aquello de lo que hablaba Shirley cuando se refería a la relación profunda entre el Psicodrama y el Shamanismo. Allí, en la tierra, diseñamos un Mandala donde muchos jóvenes vinieron a hacer psicodrama, en particular luego de un accidente en la ruta donde fallecieron seis adolescentes. Ellos aprendieron conmigo a ser parte de un grupo terapéutico y a compartir el secreto profesional. También la comunidad de la Escuela N° 1, en la que el 78% de los chicos está en situación riesgo, abrió las puertas del aula para que juntos, a través del psicodrama, fuéramos capaces de buscar una nueva alternativa, un nuevo camino, para “todo aquello a lo que, hasta ese momento, ellos creían que habían estado predestinados”.

En medio de este ir y venir de escenas, Protagonistas y vivencias, una de las herramientas que utilicé con excelentes resultados, fueron la Cartas del Tarot, que había adquirido después de la dramatización de la pirámide, las que apliqué como láminas proyectivas, desplegadas en un círculo de doce sectores. Fueron muchas las historias encontradas a través de ellas, y cada escena que surgía parecía abrir una nueva puerta

generando nuevos interrogantes que me llevaban a buscar otras

herramientas que ponía en juego en distintos psicodramas intentando posibles respuestas. Finalmente, la combinación del tarot como método proyectivo con mapas iridiológicos, mapas astrales, la idea de mandala, relacionado con diferentes conceptos que nos aporta la física cuántica, la teoría del caos y la geometría fractal, 151

me condujo a lo que creo que devela “el secreto de la pirámide”, el que define la matriz cósmica como el locus nascendi fundante, tal como lo definía Moreno, ya que sería en este lugar espacio/temporal donde se genera la memoria con estructura y dinámica fractal. A partir de todo lo investigado, hoy me atrevo a plantear el siguiente postulado: “La matriz cósmica es el locus nascendi donde la memoria inconsciente se origina como una estructura que determina un sistema dinámico complejo, autoorganizado, de constitución fractal, siendo las huellas mnémicas las que se inscriben, se estructuran y se trasmiten, siguiendo un patrón cíclico natural determinado por la relación temporal solsticio/equinoccio”.

Con esta misma estructura y dinámica fractal, respondiendo al patrón cíclico natural, es como se van a ir incorporando y estructurando las distintas huellas mnémicas en las sucesivas matrices a una escala específica determinada por cada matriz. Es en este contexto donde la estructura espacio/temporal puede ser modificada por una vivencia traumática que se transforma en un atractor extraño o un repulsor extraño, generando lo que se llama una catástrofe (crisis o discontinuidad que se presenta con cierta frecuencia en los fenómenos naturales), siendo esta huella traumática la que modificará la dinámica temporal tanto en su matriz de origen como, muy probablemente, en alguna de las otras, o en todas, dependiendo de la carga emocional del trauma, pudiendo generar distinto tipo de síntomas cuyo origen está en relación fractal con el lugar donde quedó registrada la catástrofe.

Esto en lo que se relaciona con la dinámica de la matriz cósmica y la inscripción de la memoria en las distintas matrices. Pero entonces queda pendiente la determinación de los roles esenciales que se fundan en ella. Considero que, por ser las acciones primarias, la base de todo otro rol, y por ser estas las acciones creadoras por antonomasia, los roles esenciales que se constituyen y constituyen a la matriz cósmica, y siendo ambos necesarios para que el hombre se constituya como tal, son la espontaneidad y la creatividad. Y es esta posibilidad que nos dan estos roles, la que 152

se va restringiendo en la medida en que el hombre no supera los distintos traumas que debe enfrentar cíclicamente a lo largo de su devenir. Por lo tanto, todo aquello que arrastramos generación tras generación, historia tras historia, reduce nuestro caudal de espontaneidad y creatividad, y por lo tanto, restringe el desarrollo del rol.

Por otra parte, a medida que trabajamos en psicodrama y vamos resolviendo las distintas

escenas nucleares

conflictivas

en

las

sucesivas

matrices,

vamos

enriqueciendo los roles de espontaneidad y creatividad.

Trabajar con técnicas específicas que nos permitan acceder a la estructura y la dinámica de la matriz cósmica (trabajar con movimientos oculares, con giros, con las láminas proyectivas del tarot, por ejemplo, siendo estas técnicas las que me permitieron introducirme a lo que hoy defino como la matriz cósmica, dentro del contexto del psicodrama), nos da la posibilidad de encontrar específicamente aquellas huellas mnémicas que contienen las escenas de diferentes matrices que obstaculizaron el desarrollo creativo de los roles de espontaneidad y creatividad, no solamente en nuestra historia personal, sino tembién en la familiar generacional y en la social.

Dado que el psicodrama nos proporciona la teoría y las técnicas que nos brindan la posibilidad de ir en busca de lo fundante, que nos permite ser en el todo y en cada una de las partes, ser en aquel principio de todas y cada una de las cosas, ser la idea, la palabra, la acción en sus infinitas posibilidades, en cada una de las matrices, donde esta búsqueda, lejos de ocultar, nos abre por el contrario hacia infinitas posibilidades, creo que es posible culminar este artículo definiendo al psicodrama como un verdadero tesoro de la humanidad.

153

Débora Penna reside y trabaja en Buenos Aires,. Psicóloga egresada en 1982 de la Universidad de Buenos Aires. Se ha formado como Directora de Psicodrama, Sociodrama y Rol Playing, con títulos otorgados por el Centro de Psicodrama Buenos Aires (1988); el Centro de Psicodrama y Sociodrama Zerka T. Moreno (del que es miembro fundadora), con certificación firmada por Zerka Moreno, en 1992; y por The Dallas Training Institute for Psychodrama

and

Sociometry

(1995).

Miembro del comité organizador del XII International Congress of Group Psychotherapy, organizado por la International Association of Group Psychotherapy (IAGP), realizado en Argentina en 1995. Dicta cursos de especialización tanto en Argentina como en el exterior. Ha presentado distintas investigaciones en varios congresos internacionales. Como investigadora, ha desarrollado el modelo de la dinámica fractal de las huellas mnémicas y de las herramientas que permiten su instrumentación en el ámbito psicoterapéutico; es autora del libro “El Camino del Círculo” y participó en diversas publicaciones de la especialidad. Continúa con su labor de formación de psicodramatistas de distintas nacionalidades desde hace veinte años, y en la actualidad es docente especialista en el curso de postgrado de Psicodrama de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires. También incursionó en el teatro, el canto y el baile, introduciendo todas estas actividades y las herramientas que les son propias, en la dinámica de su actividad profesional

154

5

Aplicaciones en Psicodrama

155

5.1 INTERVENCIONES CREATIVAS EN CONTEXTOS EDUCATIVOS Autora: Natacha Navarro Roldán Objetivos: 

Mostrar las aplicaciones del Psicodrama y técnicas activas dentro del Sistema”escuela secundaria”



Enseñar formas intervención en prevención y educación para la salud con poblaciones adolescentes a través del diseño y la aplicación de programas de intervención en tutorías de un Instituto de Enseñanza Secundaria.



Enseñar formas de intervención en el contexto educativo

Índice INTERVENCIONES EN CONTEXTOS EDUCATIVOS 1. Características del Contexto 1.1 La Educación: un contexto de relaciones interpersonales 1.2. Métodos y encuadres de las Técnicas Activas en la Intervención: Ventajas e Inconvenientes. 1.3. Población y Ámbitos objeto de intervención 2. Modelos de Intervenciones en contexto educativo 2.1 Cómo utilizar las técnicas activas para resolver conflictos en el aula y programas de prevención en el centro educativo a través de la hora de tutoría. 2.1.1. Resolución De Conflictos en el aula

2.1.2. Prevención de hábitos inadecuados: EL BOTELLON O EL TEATRO 156

DE LA VIDA 2.2. Cómo utilizar el psicodrama y las técnicas activas en consulta psicopedagógica: individual, familia: INTERVENCIONES PSICOLÓGICAS EFICACES 2.3. Las técnicas activas y el psicodrama en la formación inicial y permanente

del

profesorado:

roles

profesionales,

profesor,

psicopedagogo.

INTERVENCIONES EN CONTEXTOS EDUCATIVOS 1 Características del Contexto 1.1 La Educación: un contexto de relaciones interpersonales

Este seminario tiene la intención de explicar las formas de intervención posible en este contexto que podemos denominar también como sistema escuela o sistema enseñanza. Comparto totalmente con D. Hargreaves, (1986) que la educación se da en las relaciones de profesores y alumnos, alumnos y alumnos, profesores y profesores, además de la de padres con sus hijos. La educación siempre ocurre entre relaciones interpersonales, y para poder intervenir en este contexto marcado por esta condición, tenemos que entender lo interpersonal y tratar los aspectos interpersonales del proceso. Es mucho más fácil intervenir desde la aplicación directa de la instrucción sobre cualquier materia que sobre un proceso de relación interpersonal, pero precisamente suele faltar una mirada desde este lugar y por eso defiendo no sólo la intervención de profesionales como nosotros en este contexto sino la necesidad de formación de los futuros profesores y actuales profesores en relación con la utilización de las técnicas activas en estos procesos que siempre tienen existencia en el seno de un grupo. Desde este encuadre interactivo, podremos ver y hablar de roles, interacción, vínculo, grupo y estructura de grupo, actitudes y cambios.

1.2. Métodos y encuadres de las Técnicas Activas en la Intervención: Ventajas e Inconvenientes 157

En cuanto al encuadre, podemos definir que en la educación hay un gran objetivo que es la tarea de Enseñar-Aprender. Y que pertenece a una gran organización que puede ser considerada como el sistema educativo, con sus subsistemas por niveles (primaria, secundaria, universitaria…) sus diferentes encuadres legales por comunidades (conjunto de tareas a realizar), etc.… Desde un intento de clasificación de los tipos de grupos con los que nos podemos encontrar, podemos decir que según el ámbito, los grupos dentro de los centros son primarios, temporales(con un objetivo de realizar una tarea que suele tener un tiempo determinado) , de pertenencia ( sus miembros no escogen el grupo sino que son circunstanciales) y de mayor o menor referencia (grupos adolescentes, grupos profesionales

corporativos…)

con

los

que

van

a

identificarse

en

sus

comportamientos, valores y normas. Así, en función del encuadre (setting) y del objetivo podremos redefinir los grupos y su forma de intervención. Podemos reconocer grupos de tareas, grupos para resolver conflictos, grupos de aprendizaje y formación, grupos de autoexperiencia, grupos educativos.(Gil, 2003. Siguiendo con el concepto de este tipo de grupos si me gustaría añadir, por un lado el aporte de la psicología de las organizaciones a este respecto, al considerar que todos los grupos en las organizaciones son “sistemas flexiblemente acoplados en dos niveles, el de los individuos entre sí y el del comportamiento del grupo como unidad en relación con otras unidades sociales dentro del cual se encuentra ubicado (Mc. Grath, 1991 citado en Gil (2003)) y, por el otro, recoger lo que sería la función o tarea última de toda la educación: la función socializadora en la que el centro educativo constituye el segundo factor de socialización, tras la familia (M. A. Casanova, 1991. Esto condiciona asimismo los roles profesionales que son roles sociales y que determinarán el conjunto de interacciones en este contexto. Todo esto dibuja a grosso modo las líneas de este marco en el que podemos intervenir como profesionales no solo de transmisión de conocimiento. Pero aquí debo decir que no está escrito que esa función socializadora no conlleve el crecimiento personal, el cambio y aprendizaje creativo. El campo del”método” o formas de intervenir en educación nos permite un importante caudal de posibilidades. 158

Dibujado el encuadre, podemos plantear los métodos o técnicas más adecuadas para la intervención. El aporte de la Dinámica de Grupos, su concepto y lectura sobre los mismos así como el aporte de técnicas para la intervención y el manejo del grupo, ha sido definitivo (ver lecturas recomendadas a este respecto. En relación con el Psicodrama y las técnicas Psicodramáticas, las técnicas más adecuadas para este contexto son: En el caldeamiento o warming-up, las técnicas sociométricas a modo de calentamiento y de favorecimiento de la mejora de la dinámica grupal, y todas las técnicas de caldeamiento específicas e inespecíficas. Pero para el trabajo más propiamente debemos utilizar el Role-playing Pedagógico. o juegos Psicodramáticos. Siguiendo a P. Población y López Barberá, en su definición de ROLE-PLAYING PEDAGÓGICO: es una “vía de adquisición de experiencia en el espacio de las interacciones de roles entre seres humanos…. Cuya finalidad es aprender y aprender a aprender en estas áreas” P. Población y E. L. Barberá, (2000)) Así pues, en el caso del medio educativo, la mayoría de las veces trabajando con alumnos o con profesores, nos encontramos con los roles sociales y lo que esto significa en la cultura del centro y del contexto social en que se encuentra la escuela. Es difícil separar el rol de profesor de sus roles personales así como el rol de alumno y su estatus, de sus roles personales, aunque a veces tiene mayor presencia uno que otro, en función de la dinámica del grupo. Y como podemos reconocer esos roles que favorecen, bloquean, atrapan o hacen crecer, podemos utilizar el legado que nos dejó Moreno sobre la teoría de roles y los juegos dramáticos para entender y favorecer el cambio en un contexto educativo. Una herramienta como el Psicodrama y el juego dramático que nos permite “vernos a nosotros mismos” y así poder también “recrearnos” y “co-crearnos” es una valiosa herramienta que, aunque es entendida con mucha frecuencia como una amenaza, es una esperanzadora posibilidad de mejorar.

Ventajas e Inconvenientes de la utilización de estas técnicas psicodramáticas El objetivo del role-playing pedagógico es la mejora de un rol determinado frente al 159

role-playing terapéutico o psicodrama en el que se pretende “un cambio estructural de la escena interna” P. Población y E. López Barberá, (2000) Así desde esta idea del “cambio” o creación del rol, podemos hablar de alguna de las limitaciones contextuales con las que tenemos que contar: - Ventajas e Inconvenientes del contexto 1. Debemos tener especial cuidado en no “deslizarnos” hacia intervenciones propias de un encuadre terapéutico y no educativo o de aprendizaje (Alicia Fernandez, 2005). Esto especialmente deberá ser cuidado en grupos de profesores. Se trabaja con el ROL PROFESIONAL y no con el personal (salvo que fuera necesario) 2. Ventajas por el tipo de grupo: estos grupos están acostumbrados a realizar actividades, centradas en las tareas. 3. Se pide a TODO EL GRUPO que consiga el objetivo (frente a individuos o parejas o subgrupos que se agrupan con un objetivo de rendimiento) es decir que el objetivo es en sí el propio grupo y no individuos. Eso supone una motivación especial y una gran posibilidad de inclusión de aquellos individuos con menor reconocimiento (académico o no) en el grupo de alumnos. 4. Tiempo de trabajo supeditado al horario del centro 5. Desconocimiento de las características de la conducción del grupo así como del manejo del liderazgo por parte de los colegas. (presentes en el aula y que mantienen su estatus de profesor, tutor, etc.…) Esto requiere la necesidad de explicar muy bien la forma de intervención así como asignarles un rol claro ( observador, auxiliar) frente al grupo de alumnos. 6. Se trabajan muy directamente los valores y el desarrollo moral con los alumnos, objetivo más difícilmente alcanzable a través de la clase normal y esto puede hacer cuestionar los valores “socialmente correctos”.

- Inconvenientes de las propias técnicas activas 1. Necesidad de calentamiento (en un espacio clase) con poco tiempo y 160

resultando una forma de trabajo “poco usual” 2. Necesidad de entender las formas activas (grupo horizontal, en círculo, sin estatus, sin logros definidos) 3. El grupo no está acostumbrado a mostrarse ante los otros (el profesor trabaja normalmente solo o es mirado por otros “no iguales” 4. En la adolescencia es muy importante el manejo de la vergüenza y el ser observado genera mucha vergüenza 5. El Psicodrama y sus técnicas requieren entrenamiento, no se pueden usar como si fuera sólo un rol play. 6. Aunque no es un grupo experiencial en relación al objetivo del grupo, estas técnicas permiten la autoexperiencia y favorecen el aprendizaje creativo.

1.3. Población y Ámbitos objeto de intervención

El cuadro siguiente muestra las posibles aplicaciones e intervenciones

161

Aplicaciones del psicodrama y de las técnicas activas en un contexto educativo: (Navarro, N) 

Con los alumnos: en el grupo-clase: En hora de Tutoría -Proyectos, campañas, temas transversales (valores y normas) - resolución de conflictos en el aula En consulta de asesoramiento psicológico: intervenciones psicológicas eficaces (pre-terapéuticas) En las asignaturas - para la enseñanza de la materia (especialmente idiomas)



Con el profesorado: - en la formación inicial - el rol del profesor, psicopedagogo, etc. - en la formación permanente -seminarios, grupos de trabajo, talleres, sobre el ejercicio del rol



Con los padres de los alumnos - escuela de padres - grupos didácticos (sobre consumo de alcohol, sexualidad, trastornos

alimentarios

interculturales)

162

y

comportamentales,

grupos

2. MODELOS DE INTERVENCIONES EN CONTEXTOS EDUCATIVOS Características de la población adolescente Perfil psicosociológico de la edad: 

Su referencia son las pandillas y los líderes, que ejercen una gran influencia y marcan modelos de valores, de actuación (formas de Vergüenza u Orgullo) y de Identidad personal. Estas pandillas pueden pertenecer al grupo-clase o no, al Instituto o no.



El alumno no sabe bien lo que se espera de él: es tratado como niño y como adulto al mismo tiempo. (Esta maduro para la sexualidad pero no puede ejercitarla ni se permite)



Quiere dominar el “rol de adulto” pero no puede hacerlo(inmaduro)



Quiere mostrar independencia del adulto pero no puede (Paradoja: dependencia e Independencia a la vez)



La cultura del grupo es la dominante sobre la cultura escuela o familia, en un contexto escolar.

2.1 Cómo utilizar las técnicas activas para resolver conflictos en el aula y programas de prevención en el centro educativo a través de la hora de tutoría. 2.1.1. Resolución De Conflictos en el aula

Conflicto.

Según B. Muñoz (2007) comprender el conflicto es comprender que la vida humana es conflicto y que no hay relaciones humanas exentas de conflictos y que esto no es negativo, sino todo lo contrario, positivo. Los choques no sólo no son inevitables sino que además impulsan las relaciones humanas. Lo negativo no son los conflictos sino la violencia con la que, a veces, cursan. Por ello, comprenderlos es entender que ante posiciones antagónicas de las distintas partes, que en principio puedan parecer difíciles de conjugar, nos encontramos con intereses y necesidades que, en muchos casos se pueden conciliar. Se trata de comprender un aspecto 163

esencial de los seres humanos Winnicott dice “sólo si sabemos y aceptamos que el niño desea derribar la torre de ladrillos, le resultará valioso comprobar que puede construirla” (citado en Alicia Fernandez, (2005) Coincido plenamente en la idea de que abrir un espacio para la creatividad en un niño o adolescente significa enseñarle otras formas de sí mismo y que puede realizar un aprendizaje creativo y no solo a través de la instrucción. Comparto la afirmación de Alicia Fernandez, (2005) “ Las técnicas dramáticas son un espacio riquísimo para trabajar con el despliegue de la agresividad saludable, volcado hacia el trabajo creativo” ¿Qué es pues agresividad saludable? Entendemos que la que se puede contener en el grupo sin que sea únicamente una forma de catarsis y la que permite al grupo crear, jugar y aprender.

En la escuela podemos reconocer diversos tipo de conflictos estructurales:

Cultura escolar



Cultura del centro



Cultura adolescente

Cultura familiar

La hora de tutoría es un espacio idóneo para plantear situaciones de conflictos, de abusos, de intolerancias, exclusiones, etc.… porque no pertenece al espacio propio de aprendizaje de contenidos y los alumnos están acostumbrados e incluso quieren que el objetivo de esta hora se centre en los problemas que tienen en la clase y el centro.

En este sentido, las técnicas sociométricas son idóneas para trabajar especialmente con los más pequeños. Cualquier ejercicio grupal que pretenda incluir, identificar, compartir, será la base de una buena matriz para los aprendizajes cooperativos y experiencias creativas. Así pues, se puede partir de un test sociométrico si es necesario detectar las situaciones de líderes negativos o de enfrentamientos entre subgrupos, para proponer a 164

través de la exploración sociométrica propuestas inclusivas de los miembros excluidos. Un ejemplo sería ir contando una historia y reconstruirla a través de los colores de la ropa que llevan las personas que queremos incluir o mostrar alternativas creativas y no sólo de poder o abuso.( Un niño excluido, que lleva una camiseta azul puede formar parte del cielo o del mar de una historia, junto con el líder del grupo si llevan el mismo color de camiseta por ejemplo)En el caso de los adolescentes, los grupos difíciles suelen tener miembros que han fracasado y de alguna manera rechazan y son “excluidos del sistema educativo”, por resultados o comportamiento, o bien todo el grupo siente que son rechazados y comparados con otros grupos bien por sus características como grupo (resultados bajos), o comportamiento inadecuado. En este caso el trabajo debe centrarse en la inclusión en la institución y hay que buscar propuestas grupales creativas que permitan el reconocimiento frente a la misma, (una campaña o concurso en el que pueda predecirse que ganen o tengan éxito por ejemplo) También en el caso de los adolescentes el cambio de rol, en contexto de role-playing suele dar un buen resultado para poder resolver conflictos en el aula.

Se puede intervenir a nivel preventivo o a nivel de resolución de un conflicto A nivel preventivo: La intervención para la mejora de la Convivencia permite: 1. Detectar y prevenir problemas de convivencia 2. Ayudar a construir una convivencia que se asiente en la capacidad de “ponerse en el lugar del otro” (empatía, “cambio de rol”) 3. Desarrollar la confianza en el propio grupo como contenedor de sus propios conflictos. 4. Identificar posibles alumnos “mediadores” o “ayudantes” reconocidos por el grupo con potencialidad para futuras resoluciones de conflicto. 5. Facilitar cambios de actitud de los alumnos en relación a la comprensión del conflicto y su diferenciación de respuestas agresivas o violentas.

165

A nivel de intervención ante un conflicto dentro del grupo: Intervención en Conflicto

Cuando salta un conflicto en un grupo, suele haber una serie de Consecuencias: 

Posiciones encontradas entre alumnos y centro



Refuerzo de actitud de “resistencia” a la cultura escolar



Incremento de los sentimientos de miedo y vulnerabilidad



Refuerzo de la actitud pasiva ante la resolución de conflicto

De nuevo nos encontramos con algunas limitaciones para poder trabajar con estas técnicas: 

Se dispone de poco tiempo para cada sesión, break inter-clase al que no renuncia (timbre)



No es un grupo “natural” y la confianza y el secreto grupal son difíciles de mantener



El contexto “limita” o mediatiza mi rol



Dificultad del rol del tutor como observador, en el sentimiento de perdidas de autoridad

2.1.2. Prevención de hábitos inadecuados: EL BOTELLON O EL TEATRO DE LA VIDA

En el campo de la prevención esta hora de tutoría también tiene una gran utilidad aunque también desventajas (ver algunas limitaciones en el apartado anterior) Un trabajo centrado por ejemplo en la prevención del alcoholismo permite trabajar con varios grupos la misma temática a nivel exploratorio, para averiguar cuales son las motivaciones o razones por ejemplo que llevan a determinados comportamientos como beber en grupo y tras el análisis, se deben proponer comportamientos alternativos que eviten las consecuencias negativas que el mismo grupo reconoce. Si 166

tomamos por ejemplo la actividad “El Botellón o el teatro de la vida” (Navarro, N, 2005) se trataría de trabajar en subgrupos para construir el “como si” o la historia del “porque se acude al Botellón”, dónde, como, para qué, en el imaginario de esa historia, y a partir de ahí se construyen en los mismos subgrupos los personajes que en definitiva son portadores de un rol, para a partir de ahí ir probando a través del role-playing otras posibles alternativas que van a ser consensuadas por el grupo grande. En esta experiencia, la tarea u objetivo fue la construcción de una campaña para la prevención del consumo de alcohol, con la elaboración de carteles y de un vídeo (propiedad del MEC, Programa Sócrates 2005). Este aspecto es muy importante porque el grupo siente que tiene que realizar una tarea y que el objetivo mismo no es saber sobre cómo se comportan sino sobre qué se puede hacer para evitar consecuencias negativas de salud y cómo decírselo a los demás. Entonces, una herramienta como el Psicodrama nos permite “vernos a nosotros mismos y de re-crearnos” Pero en el caso de los adolescentes, la “mirada del otro”, la exposición hace que quieran mostrar valores, principios, roles buenos o malos en función de su propio rol en el grupo, en el que se sienten atrapados. Por eso una buena indicación es el de construir narraciones y roles y ocupar o elegirlos de acuerdo con aquellos que inicialmente rechazan más. (N. Navarro,2005)

Objetivos de esta intervención preventiva: Ser capaces de desarrollar otras alternativas al “botellón” a partir de lo que el “encuentro” en el Botellón significa para los alumnos, tanto a nivel de grupo de amigos, como de exploración de otros espacios personales como la sexualidad, la seducción, el riesgo, etc., para los adolescentes. Ser capaz de reflexionar sobre la experiencia o “el mito” del botellón,

Vivenciar los motivos, explorar los roles y su presencia en las dinámicas grupales de los adolescentes (liderazgo, influencia, moobing, aceptación en el grupo, etc.)

167

Proponer posibles alternativas que sean elegidas libremente y que signifiquen el encuentro con todas sus dimensiones y componentes sociales y personales…

2.2. Cómo utilizar el psicodrama y las técnicas activas en consulta psicopedagógica. Individual, familia: INTERVENCIONES PSICOLÓGICAS EFICACES Es importante entender el “rol del psicopedagogo” o especialista en Psicología y Pedagogía en la Institución de la escuela pública porque hay pocas referencias fuera de España. Claramente puede entenderse la intervención en dificultades de aprendizaje, en niños o adolescentes que requieren de un apoyo para superar sus dificultades de acceso al currículo.

En relación con esto existen trabajos muy interesantes de intervención especialmente con niños con dificultades con los que al introducir en el espacio de aprendizaje títeres y otros elementos lúdicos, abren la posibilidad de expresión sin utilización del lenguaje, en el que suelen ser pobres y con dificultad de expresión. Pero en la realidad de un centro se dan otros tipos de demandas que tienen que ver sobretodo con la detección de posibles situaciones que requieren un encuadre terapéutico, de tipo individual o familiar. Esta realidad “exige a los psicólogos especialistas de los IES que actúen con o sin conocimiento sobre encuadres y demandas terapéuticas.(N. Navarro, 2003) Quizás por eso en la formación de psicología pedagógica de otros países dan formación en psicodrama y en terapia.

Las técnicas activas y psicodramáticas permiten abordar una exploración “diagnóstica” sobre el problema, problema que normalmente desborda el encuadre de aprendizaje y de vínculo educativo con los profesores. Así, tanto en una intervención individual como familiar, sirven todas las técnicas exploratorias psicodramáticas y las utilizadas directamente en la intervención. Tan sólo cabe reseñar una serie de indicaciones para la intervención. Así pues la intervención en este contexto y encuadre, entendido como una evaluación por si precisa una 168

derivación a terapia, tiene que tener en cuenta:

Características de la Intervención:

1. Informar sobre mi cambio de rol y de encuadre en la intervención, en caso de realizar una exploración clínica. 2. Informar de las limitaciones de mi intervención en ese contexto. 3. Llegar a un acuerdo sobre el conocimiento y forma de intervención de la familia. Especialmente en el caso de pedir a la familia que esté presente o participe, hay que aclarar muy bien lo que se espera de ella pues no parte de ellos la demanda. 4. Conocer sus expectativas sobre mi intervención 5. Mantener el secreto y confidencia en relación con sus compañeros y profesorado. 6. Contar con el apoyo y “conocimiento” de su tutor o del profesor que ha realizado la demanda. Ese conocimiento se funda en la confianza en mi tarea, sin conocer lógicamente los contenidos de la misma.

Y las dificultades o limitaciones más importantes son: (N. Navarro 2003) 1. A menudo la familia no es conocedora de la 1ª demanda y a veces del problema, situación que no se da en un encuadre terapéutico. Es importante insistir en el conocimiento por parte de ésta y valorar su intervención. 2.La institución tiene una función “socializadora” mientras que la terapia tiene una función “liberadora”. Aquí se da un choque entre los objetivos últimos. 3. Espacio y tiempo reales son inadecuados y limitadores de la intervención. 4. En este encuadre, se cae en la tentación de “enseñar” en lugar de acompañar. El rol y la expectativa de rol tienen un gran peso en la contención, que no debería ser de aprendizaje sino terapéutica en muchos casos.

169

Algunos ejemplos de intervenciones eficaces: Ante conductas de acoso: Pasos a seguir con la víctima 1. Testimoniar la agresión sufrida y acompañar el sentimiento de injusticia e impotencia 2. Creación de un “lugar seguro” (individual) para la víctima 3. Acompañamiento de compañeros/amigos a los que se les da el rol de “lazarillos”/mediadores 4. Trabajo con el grupo completo a través de la sociometría sobre comportamientos de inclusión/exclusión y los sentimientos que acompañan a los portadores de estos roles (ver programa mejora de convivencia) 5. Construcción de una matrix grupal segura para proteger conductas de acoso o abuso y favorecer la tolerancia y respeto Pasos a seguir con el acosador (si permanece en el grupo) 1. en función de la gravedad de su conducta hacer entender que fin pretende con su comportamiento y buscar formas alternativas de conseguir sus fines sin necesidad de agredir (de forma individual aunque sean varios los acosadores) 2.Acompañamiento de compañeros “neutros” que pueden encontrar “valores diferentes” en el acosador por los que pueda ser reconocido e incluso admirado por el grupo. Dar a estos compañeros el rol de “mediador” (atendiendo al reconocimiento sociométrico del grupo)

Pasos a seguir con el grupo completo 1. En su momento: trabajo con el grupo completo donde los mediadores son portavoces de comportamiento y sentimientos del agresor y de la víctima en donde se reflexiona sobre los tres comportamientos: agresor(es) – víctima(s) – testigo(s) pasivo(s)

170

2. Trabajo con la cultura básica del grupo (tolerancia ante el miedo, rechazo a la diferencia e incapacidad de expresar discomformidad (“ley de silencio”) para favorecer un cambio en los valores básicos como respeto, tolerancia y el valor de las diferencias individuales. Conclusiones Los adolescentes son por definición seres sociales, definidos por las reglas del grupo social y influencia social.

Es el grupo y en especial el líder del grupo quien marca las normas de convivencia y cultura del grupo. Aunque haya una gran parte del grupo disconfome, si pertenece a otros grupos de referencia, puede distanciarse de estas normas con lo que forma parte del rol del testigo pasivo siendo las víctimas propicias al acoso aquellos que no pertenecen a otros grupos o que no tienen todavía un reconocimiento en ninguno de ellos. Los líderes “impuestos” (que la sociometría no los marca como líderes emocionales o de tarea) impone su liderazgo mientras que estudiantes que potencialmente pueden ser líderes acatan y pasan a ser testigos pasivos de este abuso.

Por eso fomentar la emergencia de estos líderes es una clave para el cambio de comportamiento y valores. 2.3.Las técnicas activas y el psicodrama en la formación inicial y permanente del profesorado: roles profesionales de profesor, de psicopedagogo.

Consideramos al rol del profesor, como un rol social, y como rol social “reclama una interpretación no exactamente de acuerdo con la personalidad del actor (profesor) sino que sienta unas bases generales de cómo se espera que el actor se comporte”(Hargreaves,1986) Así pues, para el actuante de un rol social no es tanto cuestión de asumir un rol sino de construir un rol. (Turner, citado en Hargreaves,1986). Para la construcción de ese rol, tenemos que tener en cuenta que 171

se da en un contexto interactivo y que es normal que el propio contexto ponga obligaciones o condiciones que la persona debe tener en cuenta. No obstante, estos roles no suelen estar explícitos y a menudo el profesional debe responder con espontaneidad. No podemos decir que el rol de profesor es un rol completamente determinado y por lo tanto podemos afirmar el interés de estas técnicas en las que podemos entrenar a futuros profesores, psicopedagogos o profesionales de la educación, para aprender a dar respuestas creativas, a crear un rol creativo, que respete su condición de rol social y que produzca respuestas creativas en el contexto interactivo.

Según esto, hay dos espacios necesarios tanto para aprender la construcción del rol profesional como para su revisión y supervisión. Y aquí entramos en la Formación inicial y Formación Permanente del profesorado.

Numerosos ejemplos en otros países defienden el valor de grupos de supervisión y programas de formación donde entran las técnicas activas, Psicodrama y métodos grupales. En concreto en Argentina, los programas de formación lo recogen y en Francia Ada Abraham (1987) trabajó en los 70 y 80 con grupos de profesores sobre su rol profesional. En España a nivel de investigación en Universidades si hay un cierto interés pero no se aplica normalmente desde los programas institucionales. Mi experiencia de trabajo en grupos de profesores tanto en seminarios permanentes como con profesores noveles, me hace llegar a distintas conclusiones:

Condiciones del rol 1. El profesor está ejerciendo gran parte de su tarea, enseñar, en una situación asimétrica, en la que se le pide que sea un agente socializador y en la que no tiene a nadie que le sirva de espejo. 2. A menudo no sabe qué se espera de él excepto en la transmisión de contenidos, y siente inseguridad ante propuestas innovadoras, actitudes diferentes, etc.… 3. La presión que siente este profesional por parte de los padres, no tiene 172

parangón con otros roles profesionales, pues el tema educativo y socializador pertenece por igual al campo paterno. 4. Tienen gran influencia “los modelos que han tenido en su vida” Navarro, N. (1989), tanto en el intento de emularlos como de evitarlos.( N. Navarro “ escenas temidas del profesor”1994) El condicionamiento es grande pero invisible. Aún sin quererlo, su personalidad es determinante, pues los adolescentes especialmente, están más preocupados de los modelos de adultos que de lo que éstos puedan enseñarles. 5. Es muy importante un buen manejo de lo vincular, del espacio necesario para que el alumno pueda aprender algo, confrontándose o asumiendo lo que dice o hace el profesor. Consejos para la intervención 1. Es muy importante trabajar en el plano de lo profesional y no de lo personal. El profesor debe manejar muy bien esta diferencia en la interacción con sus alumnos.(El “sí mismo profesional” de A. Abraham (1987) 2. Es muy importante abrir el “repertorio de respuestas desde el rol profesional” para evitar un desgaste o síndrome “burn out” profesional. 3. El role-playing es una técnica ideal para este trabajo, tanto en el aprendizaje del rol como en la supervisión. 4. Es indispensable crear grupos de supervisión del rol y de las situaciones de rol, en seminarios permanentes. Quizás aquí la idea de M. A. Fernández sobre “covisión” (A. Fernandez, 2005) tiene mucho sentido: “Relatar lo experienciado en el trabajo pedagógico ante otro que escucha desde una actitud clínica es una necesidad y un deber ético….¿Por qué llamar a esta tarea supervisión? ¿No sería mejor llamarla co-visión? En definitiva, aceptar que los profesionales pueden constituir grupos de análisis desde la co-visión, una vez adiestrados y seguidos por un coordinador, es cuanto menos una idea interesante.

173

BIBLIOGRAFÍA ABRAHAM, A. “El mundo interior de los enseñantes” Gedisa, Barcelona. 1987. ANZIEU, D. (1982)El Psicodrama analítico en el niño y en el adolescente. Paidós, Grupos e instituciones. ARNAIZ , P y ISUS, S.. La Tutoría, Organización y tareas. Graó, Biblioteca de Aula. (1995) BUSTOS, D. M “El Psicodrama: Aplicaciones de la técnica psicodramática”. Plus Ultra. ( Buenos Aires, 1992) CASANOVA, M. A.” La sociometría en el aula” La Muralla, Madrid 1991 FERNÁNDEZ, ALICIA “Psicopedagogía en Psicodrama, Habitando el jugar”. Nueva Visión. Buenos Aires, 2005. GIL RODRIGUEZ, F. y otros “Introducción a la Psicología de los Grupos”. Psicología PIRÁMIDE. Madrid 2003. HARGREAVES, D. “Las relaciones interpersonales en la educación”. Narcea. Madrid 1986. MUÑOZ, B. Educar desde el Conflicto. CEAC. 2007. NAVARRO ROLDAN, N. “El Laboratorio de Psicodrama y Creatividad: un mecanismo diferente para el perfeccionamiento del profesorado”. Revista PAPERS D’EDUCACIÓ, nº 14. Consellería de Cultura, Educació i Ciencia. Valencia, Marzo de 1986. NAVARRO ROLDAN, N. “ Les scènes redoutées par le professeur (une aproche psychodramatique) Revista de L’Institut National de Recherche Pédagogique nº 16. Paris 1994. NAVARRO ROLDAN, N. Taller para la sensibilización sobre el consumo responsable de alcohol: El Botellón o el teatro de la vida”, del proyecto Nuevos métodos en salud del

IES Francisco Salinas de Salamanca. PROGRAMA

SÓCRATES COMENIUS 2002/2005. MEC NAVARRO ROLDAN, N. “Ser profe ¿só un xogo de máscaras?. Revista del Instituto 174

Municipal de Vigo, monográfico “Encontro Expresión-escola”. Junio de 1989 NAVARRO ROLDAN, N “ Conteniendo en diferentes contextos: con contrato y sin contrato” Psicodrama y diversidad cultural. XIX Reunión Nacional de la Asociación Española de Psicodrama. Salamanca. 2003. NAVARRO ROLDAN, N“Psicodrama para saber: las escenas temidas y los roles profesionales docentes”.Primer Congreso Iberoamericano de Psicodrama. Instituto de Estudios de Iberoamérica y Portugal. Universidad de Salamanca. 1997. NAVARRO ROLDAN, N y otros. AEP, Texto oficial de formación en Psicodrama. Cap. 9 (pendiente de edición) NAVARRO ROLDAN, N. “Mediar conflictos en el aula: Una oportunidad de crecer en valores”Comunicación del Iª Conferencia Internacional sobre Mediación de Conflictos y 23 ª Reunión de la AEP. Granada Mayo 2008. PALLARÉS, M. “Técnicas de grupo para educadores”. ICCE.(1993) PAULOVSKY, E. “Psicoterapia de grupo en niños y adolescentes”. Fundamentos. (1981) POBLACION P Y LOPEZ BARBERÁ, E. “Introducción al Role-Playing Pedagógico” Desclée de Brouwer. Bilbao 2000 ROMAÑA, M. A. “Do psicodrama pedagógico à pedagogía do drama. Papirus editora. Sao Paulo. 1996. SOUZA Y MACHORRO Educación en salud mental para maestros. Manual Moderno. (México DF1988) THELEN, H. A. “Dinámica de los Grupos en Acción”. CEPE. Buenos

175

NATACHA NAVARRO ROLDAN, reside y trabaja en Granada-España Es Lic. en Psicología, egresada de la Universidad Autónoma de Madrid; Profesora de E. Secundaria en Psicología y Pedagogía. (orientadora educativa) Posee formación en Psicodrama por el Centro de Estudios y Psicodrama (Barcelona, 1983) y del Instituto Psicoanalítico de Psicodrama de Madrid y en Psicodrama clásico moreniano por el ITGP de Madrid (Madrid, 2000) Es docente y supervisora acreditada (AEP) de Psicodrama. Jefa del Departamento de Orientación del Instituto de Enseñanza Secundaria “Padre Majón” en Granada; Coordinadora Internacional de Grupos multiculturales con numerosas experiencias en temáticas multiculturales (Italia, Turquía, Brasil, Suiza, Ukrania, China, Rumania y España) Co-Organizadora de la XIX Reunión de la AEP en Salamanca El Psicodrama y la diversidad Coordinadora de la 23 Reunión Anual de la AEP en Granada “Psicodrama y Resolución de Conflictos” Codirectora de las Jornadas de la IAGP “Entre Mundos y Culturas”: la competencia intercultural del grupo, desde 2004. La próxima será la 10ª edición y se centrará en la Inmigración y las Familias. Profesora de Prácticum de Psicología de la U de Granada desde 2005-6 Profesora tutora de CAP de la U. Salamanca desde 1992-2005. .Docente formadora del Instituto de Técnicas de Grupo y Psicodrama de Madrid. Co-Directora y formadora del Centro Internacional Jacob y Zerka T. Moreno en Granada Posee una vasta experiencia experiencia en intervención en educación y resolución de conflictos:

Contacto: [email protected]

176

5.2 Cuáles son los Factores Terapéuticos en Psicodrama Observaciones y Análisis del Trabajo en Grupos en Centro Psicodramático Orpheus Compartimos experiencia

Autoras: Galabina Tarashoeva-Katerina Ilieva

1992,Montreal-Canadá- Galabina Tarashoeva y Mónica Zuretti

En el Informe sobre la salud en el mundo 2001 Salud mental: “Nuevos conocimientos, 177

nuevas esperanzas” está escrito:



“Los avances en neurociencia y medicina conductual han demostrado que, al igual

que muchas enfermedades orgánicas, los trastornos mentales y conductuales son consecuencia de una compleja interacción de factores biológicos, psicológicos y sociales.”



Tratar adecuadamente los trastornos mentales y conductuales significa hacer un uso

racional de las intervenciones farmacológicas, psicológicas y psicosociales, de manera integrada y clínicamente válida.”



“La psicoterapia consiste en intervenciones planificadas y estructuradas con las que

se pretende influir en el comportamiento, el estado de ánimo y las pautas emocionales de reacción a diferentes estímulos a través de medios psicológicos verbales y no verbales. La psicoterapia no comprende el uso de medios bioquímicos ni biológicos.”

Factores patógenos:

Factores biológicos

Factores psicológicos

Factores sociales Trastornos mentales y conductuales

178

Factores terapéuticos :

Terapia biológica

Psicoterapia

Rehabilitación psicosocial

Proceso terapéutico

Existen comprensiones diferentes para las relaciones entre la terapia biológica/bioquímica y la psicoterapia:

1. La psicoterapia es un método auxiliar, apoyando la farmacoterapia a través de aumento del cumplimiento del paciente y su familia para la terapia básica biológica.

2. La psicoterapia es secundaria en eficiencia y se utiliza sólo cuando la farmacoterapia es contraindicada – mujeres embarazadas, niños pequeños, pacientes somáticos con enfermedades graves. 3. La farmacoterapia es un método auxiliar, apoyando el básico – la psicoterapia. A través de reducción de los síntomas que disturban la interacción psicoterapéutica, la terapia biológica produzca las condiciones necesarias para la conducción del profundo proceso del cambio terapéutico.

4. La farmacoterapia y la psicoterapia son iguales, métodos básicos, usando 179

maneras diferentes para lograr el cambio terapéutico. Los dos métodos llevan a iguales/similares cambios funcionales y estructurales en el cerebro y la expresión de los genes.

Si utilizamos el psicodrama con objetivo de un cambio terapéutico, debemos saber: ¿Cuál es lo que actualmente cura en psicoterapia, y especialmente en

psicodrama? ¿Cuáles son los factores terapéuticos, utilizados en psicodrama, que

comienzan el proceso curativo? ¿Cuáles son los objetivos de los diferentes factores terapéuticos?, ¿Qué se

influye de ellos? ¿Cuáles son los instrumentos que el psicodrama utiliza para realización de

los diferentes factores terapéuticos? ¿Cuáles factores terapéuticos son universales y cuáles son específicos?

Buscando respuestas a estas preguntas revisamos la frecuencia de los factores terapéuticos en trabajos centrados en el protagonista en los 2 últimos grupos para desarrollo del potencial personal, conducidos en Orpheus, y las técnicas de psicodrama que los activaron. Para este objetivo, utilizamos los protocolos de los sesiones de los seminarios de trabajo.

Los grupos fueron intentados para desarrollo del potencial personal y para obtención de experiencia personal en psicodrama. Las personas que participaron en ellos fueron: 

Profesionales que planeaban continuar con el entrenamiento en psicodrama,



Personas sanas que buscaban desarrollo personal y resolución de problemas personales,



Pacientes que recibieron tratamiento médico o psicoterapia individual y tuvieron deseo de trabajar con sus problemas psicológicos en un grupo.

180

En su conjunto, 20 personas han participado en los dos grupos, y 12 de ellos han finalizado este nivel. Cuatro de los 8 participantes, que se retiraron, tomaron parte en de 3 a 8 seminarios de trabajo y tuvieron de 2 a 4 trabajos centrados en el protagonista.

En su conjunto, 25 seminarios de trabajo fueron conducidos en los grupos estudiados, durante cuales fueron hechos 57 trabajos centrados en el protagonista (TCP)

Técnicamente, vemos nuestro trabajo como una consecuencia del uso de instrumentos terapéuticos, agrupados en intervenciones terapéuticas, que llevan a la activación de distintos factores terapéuticos y el desarrollo del proceso terapéutico.

Instrumentos terapéuticos

Intervenciones terapéuticas

Factores terapéuticos

Proceso terapéutico

Instrumentos terapéuticos Estos son no sólo técnicas psicoterapéuticas, sino que todos los instrumentos para la influencia terapéutica, incluso el grupo terapéutico, la personalidad del terapeuta, etc. 181

Intervención terapéutica El uso de los instrumentos terapéuticos en un orden, en la media terapéutica necesaria, con el objetivo de hacer un factor terapéutico influir el individual y el desarrollo del proceso terapéutico.

Factor terapéutico El agente del cambio terapéutico Un elemento que causa un efecto terapéutico Pensamos que es importante distinguir entre factores terapéuticos y técnicas terapéuticas. Para evitar la confusión, explicamos a nuestros estudiantes que la técnica es lo que el director hace y el factor terapéutico es lo que, como a resultado del uso de la técnica, ocurre dentro del protagonista y lleva al cambio terapéutico.

Proceso terapéutico La contraposición al proceso patógeno, donde el cambio terapéutico se logra a través de la influencia de un conjunto de factores terapéuticos.

Como factores terapéuticos en el psicodrama centrado en el protagonista aceptamos:  Acción catarsis  Acción insight  Experiencia emocional correctiva  Re-integración de la experiencia nueva  Re-educación:

- emocional - cognitiva - interpersonal

Los factores terapéuticos en terapia dinámica grupal – según Irvin Yalom, son: 182



Cohesión



Universalidad



Catarsis



Instalación de esperanza



Altruismo



Insight



Aconsejar



Desarrollo de competencia social



Aprendizaje interpersonal



Conducta imitativa



Reconstrucción del primer grupo familiar



Factores existenciales

Compartir En un grupo de psicodrama en la escena de compartir se usan los siguientes factores terapéuticos: universalidad, instalación de esperanza y apoyo, dar feedback, recreación del primer grupo familiar.

Factores terapéuticos en un grupo de psicodrama En un grupo de psicodrama además del trabajo centrado en el protagonista, que se llama también “trabajo individual en un grupo”, hacemos también trabajo psicodinámico grupal. Además de los 12 factores terapéuticos de Yalom, en el trabajo con el proceso dinámico grupal “ahora y aquíí” – trabajo centrado en el grupo, usamos las oportunidades dadas por la inversión de roles, el doblaje y el “espejo”

Instrumentos terapéuticos en psicodrama psicoterapia para lograr: 

Acción catarsis – “de-blocking” y expresión de emociones inhibidas, después de

concretización, exageración, doblaje y otros 

Acción insight – inversión de roles, espejo, doblaje

 Experiencia emocional correctiva - “re-doing” en una manera que el protagonista

necesita experimentar, en la realidad suplementaria 183



Re-integración – en “re-doing”- espejo, inversión de roles

 Re-educación – en entrenamiento de roles, inversión de roles

Analizando los protocolos de los trabajos de psicodrama centrados en el protagonista en nuestros grupos, observamos que el factor terapéutico (FT) que ocurre más frecuentemente fue acción catarsis (AC) (en 86% de los casos), conseguido por la acción insight (AI) (en 79% de los casos), re-educación (RE) (en 60% de los casos) y experiencia emocional correctiva (EEC) (en 37% de los casos)

Factores terapéuticos 90% 80%

86% 79%

70% 60%

60%

50% 40%

37%

30% 20% 10% 0% Catarsis

Insight

Re-educación

Experiencia emocional correctiva

El factor terapéutico Acción Catarsis fue más frecuentemente activado por la técnica SOLILOQUIO – en 90% de los casos, y más raramente por las 3 otras técnicas.

184

90% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0%

Acción Catarsis

31% 6%

10%

SOLILOQUIO DOBLAJE

INVERSIÓN DE ROLES

ESPEJO

El factor terapéutico Acción Insight más frecuentemente fue activado por la técnica DOBLAJE – en 53% de los casos, conseguido por INVERSIÓN DE ROLES en 44% y más raramente por SOLILOQUIO y ESPEJO.

Acción Insight 53% 60% 50%

44% 27%

31%

40% 30% 20% 10% 0%

SOLILOQUIO DOBLAJE

INVERSIÓN DE ROLES

ESPEJO

El factor terapéutico Re-educación fue activado aproximadamente en el mismo nivel por todas las cuatro técnicas.

185

Re-educación 38% 40% 35% 30% 25% 20% 15% 10% 5% 0%

35% 32%

SOLILOQUIO

DOBLAJE

INVERSIÓN DE ROLES

29%

ESPEJO

El factor terapéutico Experiencia emocional correctiva (EEC) más frecuentemente fue activado por la técnica INVERSIÓN DE ROLES – en 81% de los casos, y considerable menos por las tres otras técnicas – 29% por DOBLAJE, 14% por ESPEJO y 10% por SOLILOQUIO.

Experiencia emocional correctiva 81% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30%

29% 14%

10%

20% 10% 0%

SOLILOQUIO

DOBLAJE

INVERSIÓN DE ROLES

ESPEJO

En el Centro Psicodramático Orpheus para los fines de entrenamiento probamos definir los diferentes procesos terapéuticos y producir algoritmos 186

para las diferentes intervenciones terapéuticas. Hasta ahora el resultado es diferenciar entre 2 tipos de procesos terapéuticos trabajo “en horizontal” y trabajo “en vertical”, y 7 tipos de intervenciones.

Los 2 tipos de los procesos terapéuticos: 

Trabajo centrado en el protagonista “en horizontal” – cuando el protagonista pasa por las actuales relaciones o contradicciones internas, sin buscar su origen atrás en tiempo.



Trabajo centrado en el protagonista “en vertical” – cuando “la pista” se sigue desde las actuales dificultades interpersonales o intrapersonales atrás en el tiempo, por la espiral del desarrollo del proceso traumático intrapsíquico hasta las “raíces” del problema. Aquí, él es rehecho y nos volvemos al presente, a la manifestación actual del problema.

Condicionalmente agrupamos los trabajos centrados en el protagonista en 7 tipos de intervenciones: 

Cumplir un proceso traumático incompleto



Vencer los sentimientos de culpa



Trabajar con pérdidas



Resolver un conflicto interno



Resolver un conflicto interpersonal



Hacer una elección



Átomo social

Pero en los dos grupos estudiados no teníamos ningún TCP “Trabajar con pérdidas”.

Los tipos de intervenciones en los 57 trabajos centrados en el protagonista (TCP) en los grupos estudiados en % son:

187

TIPOS DE INTERVENCIONES 40% 35% 30% 25% 20% 15% 10% 5% 0%

Serie1

32%

37%

17%

4% Cumplir un Vencer los proc. traum. sentimiento incompleto s de culpa 32%

4%

5%

Resolver un Resolver un Hacer un conflicto conflicto elección interno interpersonal 37%

17%

5%

5% Átomo social 5%

En 6 casos de trabajos centrados en el protagonista funcionó 1 FT, en 21 casos hubo una combinación de 2 FTs, en 18 casos – de 3 diferentes FTs, y en 12 casos – de 4 diferentes FTs. Cuando hubo 1 FT (en 6 casos), él fue acción insight – en 4 casos, o acción catarsis – en 2 casos. Cuando hubo 2 FTs (en 21 casos) más frecuentemente fue una combinación de acción catarsis y acción insight – en 13 casos. Cuando hubo 3 FTs (en 18 casos): 

Más frecuentemente 2 de ellos fueron acción catarsis y acción insight – en 14 casos.



más frecuentemente fue una combinación de acción catarsis, acción insight y re-educación – en 14 casos

La combinación de factores terapéuticos que se encuentra más frecuentemente en los diferentes tipos de intervenciones fue:

188

La combinación de FTs que se encuentra más frecuentemente

Tipo de intervención

Cumplir un proceso traumático incompleto

AC, AI, EEC y RE – 14, AC, AI, y RE – 3

Vencer los sentimientos de culpa AC, AI, EEC y RE – 1 AC, EEC – 1

Resolver un conflicto interno

AC, AI, y RE – 6 AC, AI, - 5 AC, RE – 3

Resolver un conflicto interpersonal

AC, AI, - 6 AC, AI, y RE – 3

Hacer una elección

AC, AI, -2 AC, AI, EEC y RE -1

Átomo social

AC, AI, y RE – 3

Conclusiones: 1. El Factor Terapéutico más frecuente fue la acción catarsis; él fue activado en casi todos los trabajos centrados en el protagonista y participó en casi todas las combinaciones de factores terapéuticos. Parece que acción catarsis “deja abierta la puerta” para los siguientes factores terapéuticos. Pero al mismo tiempo la acción catarsis como el solo factor terapéutico no es suficiente para lograr cambio terapéutico. 2. Normalmente hay una combinación de al menos 2 factores terapéuticos, la activación de solo 1 factor terapéutico fue una 189

excepción. 3. La combinación de Acción catarsis y Acción insight fue activada en casi todos los casos. 4. La Experiencia emocional correctiva fue activada principalmente en las intervenciones “Cumplir un proceso traumático incompleto” y “Vencer los sentimientos de culpa”, y existía en casi todos los trabajos de estos tipos. 5. La Experiencia emocional correctiva fue activada principalmente en trabajos centrados en el protagonista “en vertical” (en casi todos estos), y no en los Trabajos centrados en el protagonista “en horizontal”

¿Qué es psicoterapia?

PSICOTERAPIA ARTE intuición espontaneidad creatividad

CIENCIA razones explanaciones lógicas pruebas persuasivas

190

Las autoras residen y trabajan en Sofía-Bulgaria

Galabina Tarashoeva Nació en 1954 en Galiche, Bulgaria, MD – es psiquiatra, terapeuta psicodramátista. Fundadora y directora del Centro de Psicodrama "Orfeo" - instituto privado de psicoterapia (desde 1993). Formador, educadora y supervisora, miembro fundador de FEPTO. Estudios - Facultad de Medicina de Sofía, se graduó en 1979, se graduó como psiquiatra en 1984 - la Academia de Medicina de Sofía. En 1986, tomó contacto con el Psicodrama y psicodramatistas en Zagreb, en el IX Congreso de AIPG. A partir de allí, en próximos 3 años intercambió correspondencia con que escribí cartas a Zerka Moreno y Göran Högberg. Recibió su certificado de psicodramatista psicoterapeuta en la Academia de Psicodrama de Estocolmo y del Instituto Psicodrama de Europa. Organizó el primer grupo de Psicodrama en Bulgaria en el marco del programa de la Academia de Estocolmo de Psicodrama. EsJefe de la Emergencia en Salud Mental de Distrito en la Ciudad Centro de Salud Mental - Sofía. Representante de la Asociación Búlgara de Medicina en el Consejo Nacional de Psiquiatría de la Salud. Coordinador del Programa Nacional de intervenciones en crisis con equipos móviles. Práctica privada: psiquiátrico y psicoterapéutico (individual, familiar, de grupo) la práctica en "Orfeo" Dirección: 54, Atanas Uzunov str., Sofia 1505, Bulgaria, Tel. Móvil: +359 888 209 929 E-mail: [email protected] Idiomas: inglés, ruso

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Katerina ILieva – es psicóloga, psicodramatista. Estudios: en 1989 en AMU - Prague, Czech Republic ; 2006, St Cyril y St Methodius University de Veliko Turnovo, Bulgaria. Actualmente se está capacitando en psicología analítica. Trabaja en terapia individual y grupos bajo supervisión, coterapeuta en grupos para desarrollo personal y primer nivel de grupos de psicodrama en el Centro Orpheus y en el Instituto de práctica de Psicodrama “Chiron”, en Sofía, Bulgaria. Es miembro de la Sociedad Búlgara de Psicología, la Sociedad Búlgara de Psicodrama y terapia de Grupos y la Sociedad Búlgara de Psicología Analítica C: G: Jung. Idiomas: checo, ruso, alemán e inglés Email: [email protected], Skype: infoprim

Phone: +359898464770 (mobile)

192

5.3 Mi experiencia con el Psicodrama Autora: Fany Roxana Aguirre Núñez INTRODUCCION En las diferentes personas que habitan los diferentes lugares del mundo, y de acuerdo a su cultura, idioma, costumbres, educación, etnia, folklore y demás características propias se aplican diferentes formas de tratamiento psicoterapéutico para el alivio de sus males.

En Arequipa, una ciudad que queda al sur del Perú, considerada la segunda ciudad más importante del mismo y con tan solo aproximadamente 822,000 habitantes, la presencia del psicólogo clínico es necesaria, generalmente cuando el paciente padece de algún trastorno considerado grave. Sólo una minoría de población acude a un psicólogo por profilaxis de la Salud Mental.

Partiendo de esta información y en el desarrollo de mi carrera profesional como Psicóloga he tratado de introducir mi trabajo en la población en general, sin que sea necesaria la presencia de un trastorno perturbante, haciendo hincapié en que todos padecemos de problemas rutinarios que si bien consideramos menores pueden ser la semilla de una problema grave que sea más difícil de resolver en su momento.

Es así que en mi búsqueda me topo con el curso de Supervisión y Técnicas Psicodramáticas y leyendo superficialmente sobre el contenido del mismo, me convenzo que es lo adecuado y práctico de aplicar tanto en la población en general como en pacientes que acuden a mi consultorio ( por ejemplo: casos de violencia familiar, de drogodependencias, de síndromes de mujer maltratada, conflictos de pareja, bajo rendimiento escolar, duelos, etc.)

Al inicio tengo la clara idea de que voy a aprender teoría y a tener una que otra 193

practica sobre el tema, la idea que ahondare sobre la enseñanza de Moreno y aplicare mis conocimientos en mi ciudad Así, me atrevo a participar del curso sin saber que la que haría un cambio importante en su vida, era YO.

Con este relato introductorio presento la siguiente monografía académica, que se divide en cuatro partes: La primera que consta de la introducción la segunda que contiene la definición del Psicodrama, la tercera parte que revela una de las experiencias personales que tuve como protagonista, los objetivos y los tiempos en la que se desarrolla la misma y por último, la cuarta parte que contiene la bibliografía utilizada. . DEFINICION DEL PSICODRAMA Según su creador J, L. Moreno (1946), el Psicodrama es una nueva forma de psicoterapia que puede ser ampliamente aplicada. Históricamente el psicodrama representa el punto decisivo en el apartamiento del tratamiento del individuo aislado hacia el tratamiento del individuo en grupos, del tratamiento del individuo con métodos verbales hacia el tratamiento con métodos de acción.

El psicodrama pone al paciente sobre un escenario, donde puede resolver sus problemas con la ayuda de unos pocos actores terapéuticos. Es tanto un método de diagnóstico como de tratamiento. Hace diez años, Blatner (1988) lo presentaba así: El psicodrama es un método de psicoterapia en el cual los pacientes actúan los acontecimientos relevantes de su vida en vez de simplemente hablar sobre ellos. Esto implica explorar en la acción, no sólo los acontecimientos históricos, sino lo que es más importante, las dimensiones de los acontecimientos psicológicos no abordados habitualmente en las representaciones dramáticas convencionales: los pensamientos no verbalizados, los encuentros con quienes no están presentes, 194

representaciones de fantasías sobre lo que los otros pueden estar sintiendo o pensando, un futuro posible imaginado y muchos otros aspectos de los fenómenos de la experiencia humana. Aunque el psicodrama es usado habitualmente en un contexto grupal y puede ser un método muy útil para catalizar el proceso grupal (y, a su vez, ser catalizado por la dinámica grupal), no debe ser considerado como una forma de terapia específicamente grupal. Puede ser usado, como sucede en Francia, con varios co-terapeutas entrenados y un solo paciente. También puede usarse el psicodrama con familias o, inclusive, en una forma modificada, en terapias individuales.

EXPERIENCIA PERSONAL COMO PROTAGONISTA Con el transcurso de los años y ahondando mas en mi carrera de psicología empecé a tener más preguntas sobre las respuestas que encontraba en mi camino. Esto me convirtió en una persona “complicada”. Así mismo, me di cuenta de que tengo muchas áreas que debo desarrollar, pero que estas áreas estaban en el aire y debía materializarlas, poco a poco pensando en el tema me daba ánimos para ser protagonista en una de las clases. Animada y empujada “a”, porque era la única que no había participado o, que había participado poco, me atreví a protagonizar con una falsa seguridad que espero no hayan notado. El tema tenía nombre, se llamaba “Decisiones”, que en este caso eran la decisión de elegir entre “el amor”, “la independencia” o “la familia”. Las tres opciones tenían su representante y su país distante respectivamente que hacían que tomar una decisión que se considera más o menos simple, se convierta en un cambio radical de cultura, idioma, clima, y todo lo que traen los diferentes países. Si bien era consciente de que para lograr hacer un buen papel debía entregarme totalmente al protagonismo, trate de no tocar temas muy íntimos, intenté no 195

introducirme en sentimientos profundos para no quedar “desnuda" frente a mis compañeros... no lo logré... ¡Gracias a Dios! Poco a poco, mientras respondía las preguntas básicas que me hacia mi directora de escena, fui tomando forma y poniéndome el traje de la protagonista, y, sin darme cuenta ya estaba descubierta a la luz de todos y sin poder frenarlo. Mientras pasaba la escena que describía el momento y situación donde transcurría la escena, pude ponerles a los compañeros que hacían los diferentes roles, los sentimientos y emociones que estos personajes llevaban dentro. Todo se materializaba, el lugar, el contexto, los temores, los mecanismos de defensa, los pensamientos, las dudas, los complejos, todo lo que existía pero no consideraba importante, apareció y tenía eco que retumbaba en mi cerebro. Descubrí mas de mí de lo que podía creer. La dependencia familiar, sentimental, la evasión como mecanismo de defensa, todos mis miedos me hicieron sentir una niña, que en escena se iba desmoronando mientras corría la dramatización. Antes de tocar el nivel más bajo de mi derrumbe y no levantarme más, sucedió, escuche la palabra exacta en el momento justo que me hizo “dar cuenta de“. No pretendo idealizar el momento, solo describir como percibí aquella realidad. El “darse cuenta de” es uno de los objetivos principales del Psicodrama. En mi caso, y en el de muchos otros compañeros, este darse cuenta va acompañado de las palabras que repiten los personajes auxiliares sobre la información que uno otorga. Así mismo, uno logra mejorar la comprensión de las situaciones, basándonos en los puntos de vista de otras personas y de nuestra imagen o acción sobre ellas. Durante, la escena se trata de Investigar y descubrir la posibilidad y la propia capacidad de nuevas y más funcionales opciones de conducta (nuevas respuestas) Otro importante objetivo del psicodrama es que el protagonista ensaye, aprenda o se prepare para actuar las conductas o respuestas que se encuentran más

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convenientes Al final de la dramatización, cuando aun una está pensando en la mirada de una misma situación pero de diversos ángulos que le dan otro sabor al momento, recibe una devolución de parte de los demás compañeros, quienes además aportan sus diferentes puntos de vista, apreciaciones, razonamientos, consejos o situaciones similares que pasaron, haciendo que el hecho de compartir algo tan intimo sea gratificado con un compartir. No se pretende en esta situación hacer una catarsis, sino dar una opción de entendimiento de la misma y partiendo de esto darle una respuesta alternativa que nos haga salir airosos y con un aprendizaje internalizado para una próxima vez.. Para terminar, quisiera agregar, que con el desarrollo del curso he podido obtener un crecimiento desde adentro donde no me da miedo encontrarme y donde puedo expandir el conocimiento a las personas a quien en un inicio fueron la inspiración para el desarrollo de este curso.

BIBLIOGRAFIA  Moreno

J.

L.

(1946)

Psychodrama.

First

Volume.

(Cuarta

edición:

1972)Ambler, PA (1985): Beacon House.  Moreno J. L (1995) Las bases de la Psicoterapia. Segundo Volumen. (Segunda edición) Lumen Horme. Buenos Aires.  Perls F. S. (1969) Sueños y existencia: Terapia Gestaltica.(Décima edición: 1994) Cuatro Vientos (1974) Santiago de Chile.  Apuntes tomados en las clases  http://es.wikipedia.org/wiki/Arequipa

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Fany Roxana Aguirre Núñez, es psicóloga. Nació en Perú, en donde reside y trabaja actualmente. ESTUDIOS CURSADOS EN BUENOS AIRES – ARGENTINA: Maestría en Psicología Cognitiva Curso de postgrado “Terapia Cognitiva e Integradora al Trastorno Límite de la Personalidad”. Curso de postgrado “Clínica de la Ansiedad”. Curso de postgrado “Clínica de la Depresión”. Curso de postgrado “Fundamentos en Terapia Cognitiva”. Curso de postgrado "Supervisión y técnicas Psicodramáticas”. TRABAJO DE INVESTIGACIÓN REALIZADOS Tesis para optar título Profesional de Psicóloga: “INTELIGENCIA EMOCIONAL Y ESTRÉS LABORAL, ESTUDIO REALIZADO EN VIGILANTES DE EMPRESAS DE SEGURIDAD PRIVADA DE LA CIUDAD DE AREQUIPA – PERU” EXPERIENCIA LABORAL Consultorio Privado en Psicología en el Centro Médico Arequipa of. 305 PERU-2010 Psicóloga Organizacional en EMPRESA DE SEGURIDAD Y VIGILANCIA PRIVADA ESGA. SAC.- PERU 2010 Psicóloga en la FUNDACION KOLPING DEL PERU – 2010 DEFENSORIA MUNICIPAL – cargo: Conciliadora-PERU-2009 MINISTERIO DE SALUD – Interna en psicología- PERU-2004

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6 RELATORIAS DE CLASES

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Relatorías de las clases desarrolladas a lo largo del año 2005, en el curso de postgrado PSICODRAMA EN LA UNIVERSIDAD, Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires Autora: Dra. Ximena Alexandra Armas Melo – Ecuador

INTRODUCCIÓN

Luego de haber participado un semestre en las clases de psicodrama clínico en la Unidad de Postgrado de la Universidad de Buenos Aires, impartido por la Dra. Mónica Zuretti, y los licenciados Claudio Ojeda, Paula Martinoia y Débora Penna, fui invitada a participar en el siguiente módulo, bajo la consigna de entrenar el rol de quien sistematiza los encuentros psicodramáticos,

En el curso, somos 6 estudiantes, Vicky, María José, Inés, Héctor y Juan, y yo, (quien relata estos encuentros), dos de las asistentes somos ecuatorianas y pertenecemos al mismo país, Todos somos psicólogos la mayoría de los alumnos no ha tenido una experiencia cercana con el psicodrama.

En realidad me encontré con un nuevo rol, el cual requiere de mucha observación y memoria, sobre todo cuando era elegida para escenificar roles dentro de las escenas puestas en acción por los múltiples protagonistas que emergieron, incluso vale la pena añadir que me resultaba muy difícil poder describir las escenas que yo protagonizaba. Por lo que Mónica, solicitaba que otra persona, asuma el rol que yo asumía dentro del grupo. # 1 FACTOR TELE

Después de hacer las debidas presentaciones de los docentes, y de hablar sobre generalidades sobre el psicodrama, haciendo énfasis en el factor tele y el proceso evolutivo del niño, se pide a los presentes (incluyendo a los profesores), que demos paso a la acción explorando el aula donde vamos a encontrarnos durante el curso, 200

añadiendo la consiga que delimitemos el espacio donde se va a trabajar.

La Directora, sugiere que todos tomemos conciencia del aquí y el ahora, que percibamos el espacio, y tomemos posesión del mismo. Solicita además que en el ámbito interno, evoquemos la primera imagen que aparezca en nuestra mente y que nos concentremos en cada detalle que surja de dicha escena.

A continuación, nos invita a que ubiquemos espacialmente esta escena en el escenario, es decir que cada uno se vaya ubicando en el espacio que ya habíamos explorado, quedándonos en un lugar donde internamente sentimos que está ubicada la escena. Todos en silencio de pie, nos ubicamos en círculo.

La siguiente parte del trabajo fue la de buscar a alguien a quien se le quiera describir la imagen que surgió en la mente de cada uno, formándose tres grupos: dos parejas y un trío.

Después de dar paso a que cada uno relate su imagen, la Directora indica que pongamos un título a la escena personal, y luego de compartirla con otra persona, por consenso se elija uno de los títulos para darlo a conocer a todos. Los títulos que emergieron son: 

Y todo concluye al fin



Diálogo con la naturaleza



Lo que ya fue

Se pide que por elección sociométrica escojan el título que más les llamó la atención y la escena ganadora fue:

Diálogo con la naturaleza es la escena escogida. La Directora pregunta al dueño de esta historia si estaría dispuesto a dar a conocer su escena al grupo, a lo que accede y se arma la escena en el escenario. 201

El Protagonista nos comparte que fue una imagen de la naturaleza, en un bosque, donde hay un árbol, asoman las ramas el viento, la tierra, la luz y un tronco de un árbol. Al hacer la inversión de roles, cada uno manda un mensaje especial al Protagonista, hay una característica que me llama la atención, y es que todos los roles tienen movimiento.

Paula, luego de investigar los diálogos de los roles puestos en escena, pregunta al Protagonista si le gustaría estar cerca de alguno de los elementos que están en escena, él decide ubicarse debajo del árbol y menciona sentirse bien allí.

La Directora pregunta al Protagonista, si este paisaje tiene que ver con alguna escena que le resulte familiar. Al Protagonista le parece que sí, pero la escena no sigue por petición del Protagonista.

Se llega al sharing o compartir (tercera etapa del psicodrama donde todos los presentes en el grupo, expresan lo que experimentaron durante la dramatización), se pregunta a los asistentes si algunos de los diálogos que jugaban en cada uno de los roles, tiene cierta relación con la escena que cada uno evocó al principio y muchos mencionaron que los roles jugados tenían que ver con su vida personal, y de hecho se concluyó que los nombres de las escenas, engranaban una con otra. No hubo tiempo para ver las otras escenas, pero en el ambiente hubo mucho silencio al finalizar la actividad (queda expectativa sobre los trabajos o las escenas del grupo)

Referente a este primer encuentro, por mi parte surgen varias preguntas y son: El factor Tele: ¿Cómo se percibe este grupo?, ¿Qué temas andan rondando?, ¿Cómo se va a constituir la historia del mismo?

202

PROCESAMIENTO # 2 Algo muy particular. Al entrar al salón de clases, ya hay una persona esperando, y menciona no saber si había clases ese día, ya que no veía llegar a nadie y añadió que ya era tarde (Claudio uno de los docentes, revisa su reloj y le comenta que ha habido un retraso de 3 minutos nada más….)

Ya en la clase Claudio explica que Paula no podrá estar con nosotros en ese día, y remarca que la función de mi presencia en el grupo, es recapitular todo lo que sucede en las escenas.

En esta clase se habla de catarsis de integración, pero previamente se explica el aporte de Moreno a la psicología, con la aparición del término Psicoterapia de grupo, y la diferenciación entre la formación de grupos espontáneos y la psicoterapia de grupal propiamente dicha.

Luego de ello, se hace hincapié en la pregunta hecha la semana pasada por una alumna sobre la acción del terapeuta en el caso de un desborde emocional, mientras se está trabajando con la técnica de la silla vacía. Esta técnica psicodramática, sirve para dialogar con personas pueden no estar en ese momento en la vida del Protagonista, sea por que la ausencia se deba al fallecimiento o distanciamiento, con los que la persona que la pone en escena, tiene diálogos pendientes, por diversos motivos.

La silla vacía, consiste en pedir al Protagonista que imagine que la persona con la que desea establecer un diálogo, está ubicada simbólicamente en una silla, con la finalidad de hacer que el Protagonista pueda expresar lo que jamás dijo. Esto tiene como objetivo, reparar e integrar en el mundo interno de quien participa de la actividad de ese diálogo.

La respuesta de parte de los docentes a esta pregunta fue, que es importante 203

ayudar al paciente a que pueda expresar el por qué de las dificultades que presenta, para que dé paso a otro momento distinto al que pueda estar viviendo, Claudio empleó el término juego. Creo que se refería a la posibilidad de poder poner en práctica otros nuevos roles que al inicio se juegan, es lo que Moreno describe como role-playing.

Carvalho (1999), señala que el aprendizaje de un nuevo rol, favorece la resolución de problemas y permite encontrar alternativas de respuesta distintas a las ya conocidas como también favorece el entrenamiento de liderazgo y habilidades sociales. Siendo el role-playing, un momento previo para interiorizar y asumir un rol.

De mi parte agrego ante la pregunta formulada por la alumna que, en la intervención psicodramática, una de las premisas es trabajar desde la periferia al centro, es decir que si el Protagonista no está listo para enfrentar emociones fuertes, se hace importante respetar el momento en el que se encuentre y que poco a poco, dará el material a ser elaborado en los encuentros posteriores. Además de esta pregunta, aparecen inquietudes sobre el tiempo de duración de una sesión de psicodrama y cuáles son los criterios diagnósticos para incluir alguien al grupo. Observo que sale un tema interesante: si se incluye o no a personas de varias edades en un grupo de terapia.

El profesor explica que Moreno realizaría esa inclusión con personas de diferentes rangos de edad, pero que en verdad no es así, por la posibilidad de realizar una elección sociométrica de acuerdo a una conserva cultural. Es decir que se corre el riesgo de que alguien en particular sea escogido en diferentes escenas para representar un rol fijo, como el de padre, abuelo.

(Sin embargo, ahora que releo esta parte del texto, aclaro que: dentro del grupo, los miembros que son elegidos frecuentemente para asumir un rol determinado pueden pedir lo que se denomina alivio de rol, que consiste en la posibilidad de pedir un cambio de rol a escenificar. Esto puede resultar revelador para quien lo solicita, 204

permitiéndole interiorizar los roles que más representa frente al grupo y los que le gustaría jugar, mostrar, desempeñar)

Otro tema que surgió es el de transtemporalidad, es decir que el aquí y ahora es algo importante en el psicodrama, por ello al poner en acción una escena que sucedió cuando el Protagonista era pequeño se vive en el momento, con las emociones acaecidas en esa situación. Es decir que existe la posibilidad de poder volver en el tiempo, hacer un recorrido transhistórico en el como si, estar en una escena cuando se tenía 5 años, y sentirla como tal cuando en realidad ya tiene 80 años.

Se habló también sobre la función del terapeuta que es la de ser memoria auxiliar del paciente o del grupo…

Las escenas Ya en acción, o mejor dicho en la construcción de la escena a trabajar, luego de realizar un caldeamiento inespecífico, el Director pide que ubiquen una escena a nivel mental. Una escena del pasado y que sigan su secuencia como en una pantalla de cine, y ya en el momento de conocer las escenas tenemos:

Escena 1 Está en un lugar después de haberse recibido en la universidad, con toda su familia, menciona que el momento actual extraña la compañía de ellos.

Escena2 Recuerda una reunión de trabajo en la que una compañera suya, reclama ciertas cosas, y ante esa postura sus demás compañeros de trabajo toman una actitud de burla.

Escena 3: Es el asombro de su ex novio ante la graduación de su primo. 205

Escena 4 Rememora nuevamente la casa de su infancia.

Sociométricamente se elige la Escena 2, y como segunda elección queda la Escena 3. Ya en la escena, la Protagonista ubica a 3 personajes: la compañera que reclama no haber sido atendida con el material de trabajo, dos compañeros a junto a ella, los cuales intercambian miradas y las comparten con nuestra Protagonista que esta sentada a un lado de ellos.

Claudio pregunta si hay otros elementos u otros roles en la escena, la Protagonista dice que está el jefe pero que no es necesaria su presencia. (Aparece la función del Director, el de ser la memoria auxiliar del Protagonista y/o del grupo)

Ya en la inversión de roles, que en primera instancia se queda callada ante el reclamo de su compañera, expresa su malestar por la actitud de la otra chica que al hacer una inversión de roles y representada por la Protagonista menciona estar reclamando cosas justas.

Entra en escena, a sugerencia del Director, el jefe -el que está ausente-. La Protagonista al representar el papel del jefe no sabe que hacer en ese momento, sólo menciona que alguien debe hacerse cargo del reclamo.

La Protagonista nuevamente en su rol y en el lugar en que ella se ubica en la escena, dice que está bien reclamar y se siente más tranquila con la escena. Claudio le pregunta si esta escena le recuerda a algo similar de su vida o de su pasado, a lo que responde que sí, sin embargo no se pone en acción ese recuerdo, puesto que hay una escena; la de J que está por tomar vida.

Antes de trabajar con el siguiente Protagonista, el Director pregunta si alguien que 206

escenifica en ese momento los roles, tenia que decirle algo a la Protagonista desde ese rol (la finalidad es que puedan expresar algo que haya quedado pendiente desde el juego del rol)

Previo a dar paso a la próxima escena, se hace un sharing breve sobre lo que pasó con cada uno de los asistentes en la dramatización, yo no registro nada que me llame la atención.

La escena que se presenta ahora, muestra al Protagonista en un lugar, festejando su graduación en compañía de su familia. El se ubica entre sus padres y

su

hermano, a un costado de la escena. Más próximo a él esta su madre, y al frente una persona significativa para el Protagonista.

Se hace inversión de roles y cada rol, expresa al Protagonista, lo contentos que están por su graduación. Su madre con afecto le hace sentir lo orgullosa que está por el logro de su hijo, su padre con una postura muy rígida, le manifiesta también la satisfacción por el logro de su hijo, El diálogo con su hermano y su compañera son también importantes para él.

Claudio en la representación pide al Protagonista que les haga un pedido a todos estos personajes. Y en orden, el Protagonista pide más mimos de su madre, le da una palmadita en la espalda a su padre como manifestación de cariño, con su hermano esta mucho más cercano y a su amiga le manifiesta lo agradable que ha sido compartir momentos juntos, el Protagonista menciona, sentirse bien con la escena.

En el sharing los Protagonistas de ambas escenas se sienten bien. La Protagonista de la primera escena comparte que se da cuenta de las cosas que nos son dichas y el Protagonista de la segunda escena expresa lo importante de la palabra, el pedir a los demás. 207

Conclusiones

Hay muchas cosas interesantes en relación con esta sesión Un detalle importante que olvidé anotar de la escena de J es que antes de poner en acción, menciona a un personaje que no se presenta, por pedido del Protagonista, es una paciente de él. Retomo esto, ya que en la primera escena también se hace presente un personaje que se mantiene ausente.

En el sharing, surgen comentarios por la ausencia de Paula, y el posible relevo de Claudio por Débora, ya que se han planificado los encuentros de esta manera, además faltaron dos compañeros.

PROCESAMIENTO # 3

Luego de realizar un resumen de lo visto a lo largo del curso, con el objetivo de interiorizar conceptos referentes al psicodrama, se va caldeando al grupo sobre la base del tema tratado que es el procesamiento de grupo y elaboración del mismo.

Se remarca igualmente que el objetivo de estos encuentros, es que al final se tenga interiorizado el rol de Director de psicodrama. Se propone desde lo que hemos visto en las clases, lanzar la pregunta: ¿Cómo estamos como grupo?

Luego se inicia un caldeamiento que todavía es inespecífico, en el cual se induce a experimentar las actividades que se realizaron desde la mañana hasta llegar al salón de clases, los movimientos son circulares y el trabajo introspectivo.

La consigna enunciada al grupo es que cada uno 208

busque una escena que

represente al grupo.

El grupo se queda de pié en círculo, se pregunta por que lo han hecho, se lanza la idea de saber si es porque ya tienen la escena clara, se oye que estaban cansados, nadie tiene una escena clara, no aparece nada. Sólo un mareo… Se prosigue con un caldeamiento más específico, se pone la silla vacía para hablar nuevamente con Moreno (es una de las primeras actividades que se realiza al inicio del Curso.

Antes de comenzar a jugar ese rol, se busca entrevistar el mareo que es lo único que aparece luego del caldeamiento y se pone en acción la representación de este rol, al principio, este rol parecía que pertenecía a una persona, al darle vida, este mismo rol evocó ser del grupo.

Todos transitan por encarnar este rol que dio datos importantes, pidió a todos más acción (parece que es necesario para llegar a ubicarse); reclama que el espacio es muy pequeño para moverse, por lo que pide que muevan mas las bancas de la sala para poder moverse mejor, por último este rol también se siente cansado y decide descansar.

El Director pide luego que tomen desde el rol de Moreno. Éste habla de la presencia del mareo, y dice a los integrantes del grupo

que sigan investigando sobre el

psicodrama, que existen muchas cosas sobre el psicodrama (me llama la atención que una sola persona transita el rol de Moreno y el rol del mareo fue jugado por casi todos)

Es interesante que tanto en la entrevista al rol de Mareo como el de Moreno, al ser entrevistados por el Director, sobre ¿qué es lo que necesita este grupo? No se menciona para nada el desarrollo del rol de Director.

La Directora (Débora), investiga a Moreno y le pregunta ¿Adónde va a ir este grupo? 209

Moreno pone en escena el futuro; se empieza a transitar por ese nuevo rol y se lo ubica en el otro extremo del escenario. En este futuro, varios transitan por este rol, surge una palabra qué es psicodrama clínico. (Me da la impresión que les está recordando el por qué de este grupo, una diferenciación) Posterior a ello este rol del futuro decide darse la vuelta y ver mas allá, se habla de final, no se sabe bien de qué, si es de la clase o del curso; se indaga más, este habla de las oportunidades que se pueden obtener con el psicodrama, se mantiene un diálogo que no se puede definir bien entre el final de la clase y del curso por lo que se genera confusión, ¡no se sabe el final de qué es!

La Directora, solicita que hagan una inversión de roles.

Con este rol se investiga al Director, se le pregunta a dónde va este grupo y que es lo que necesita. Desde el Director habla de las múltiples posibilidades que tiene el psicodrama, que hay cosas más allá que ese final, que al volver a asumir el rol de Directora, se aclara que en realidad es el final de la clase, era necesario saber que función cumple este personaje en esta escena.

Una cosa interesante, es que el mareo no sale de la escena, a este mareo hay que bancárselo (como dicen acá en Buenos Aires), por ello pide que los yo auxiliares transiten por el rol de Director para ver el mareo al cual todos necesitamos tolerar.

En el compartir, es general el asombro de empezar con una actividad más corporal; comparten que al inicio del encuentro no tenía ganas de escuchar, incluso, alguien compartió que al entrar a la clase tuvo la sensación de que los demás estuvieran en un examen. Por ello, al dar paso a un trabajo mas movido, les resultó raro.

Se retoma nuevamente la ausencia de otros miembros del grupo y hablan de cómo se sintieron identificados con el mareo.

Los integrantes del grupo, mencionan por primera vez el rol de Director, algo que no 210

fue mencionado en toda la dramatización. (Pese a que desde el inicio de la reunión se habló que el objetivo del curso que es entrenar el rol de Director)

Conclusiones: 

Desde el mareo se pide que exista acción, (sin movimiento, incluso el mareo se cansa), por lo tanto la labor del Director, que ponga en juego su rol



El mareo también puede pasar por la información que tiene cada uno de los presentes desde su propio conocimiento sobre el abordaje con pacientes desde otras corrientes psicológicas.



Resultó muy interesante la inversión de roles que se hace desde el Director y el rol del futuro, ya que a mi punto de vista se ejemplifica la postura del terapeuta de psicodrama, que puede ponerse en el lugar del otro, creo que esto va a resultar muy didáctico en el futuro de próximas dramatizaciones.



(Al parecer, al iniciar el curso esperaban conocer sobre los abordajes del psicodrama en la práctica clínica) ese puede ser el futuro, previo a conocer qué es el psicodrama.

PROCESAMIENTO # 4

Luego de compartir el procesamiento de la clase 3 con el grupo, todos nos pusimos de pie y caminamos por el escenario. La consigna es recordar momentos del curso de psicodrama. Caminamos por el escenario, nos estiramos, y vamos pensando en lo que más nos llama la atención del curso hasta este encuentro

Aparecen varios elementos 

El clima creado por Mónica, en el primer trabajo con el grupo, que es la silla 211

vacía de Moreno. 

El asombro de ver gente del mismo país, (de las dos extranjeras que se conocen y en un curso de psicodrama)



Las respuestas que se obtienen de las preguntas formuladas a lo largo del curso.



El mareo, que todavía se mantiene en el espacio.



Un Director de psicodrama.



Mónica que se hace presente para que vean que todo esto que se hace es muy ¿natural?

Se arma la escena la cual es dirigida por Débora -y no recuerdo bien si ella al ver los elementos presentes, toma al Director como elemento nuclear,

o es que

quedaba una persona que no tenía rol y decide ubicarse de Director

Débora busca jugar con el rol de Director, el cual es jugado por J y no recuerdo, si le pregunta si falta algo más en esta escena a ese rol y tampoco me acuerdo bien cuando es que se propone al rol, que dirija esta escena, a lo cual este Director accede.

La Profesora hace un soliloquio y pregunta al Director y yo auxiliar: ¿Qué es lo que piensa hacer con esta escena, por dónde va a empezar jugar con los roles? El Director pregunta a las repuestas si sería necesario hablar con las preguntas. Las preguntas acceden, estas toman voz y hablan de haber encontrado más de lo que esperaban, desde la primera reunión.

Luego de ello, se prosigue a averiguar si cada uno de los elementos que están en la escena deciden hacer una pregunta a las (¿preguntas o las repuestas?)

El clima no quiere preguntar nada, tiene sus respuestas. El asombro también, el mareo sí le hace una pregunta. 212

Todos se quedan con sus preguntas y sus inquietudes satisfechas. Este Director pregunta a todos, en qué dirección se quieren ubicar con relación de las respuestas… ¡Es casi general que todos los elementos de este curso se ubican alrededor de este rol!

El Director de esta escena, vuelve a ser Protagonista; Débora toma nuevamente el lugar y le pregunta a J, como le gustaría que quede esa escena

J, el Protagonista, quiere que todos los elementos estén más en movimiento, todos los elementos hablan y le dan un mensaje para seguir en su desempeño de Director de una sesión de sociopsicodrama.

Finaliza con un Director tomado de la mano de Mónica, quien le da seguridad, y un soliloquio de todos lo roles presentes, las respuestas que mencionan (siempre serán eternas), el clima que es necesario construir, en fin todos los elementos dan un mensaje.

Ya en el compartir el Protagonista dice que sintió comodidad por los roles que estaban caminando por el escenario. El Director que pone en acción esta escena, devuelve al grupo, sobre la buena dirección que se dio por parte del Protagonista, (el rol playing, el ir jugando el rol de Director)

Se devolvió al grupo que cada uno, hubiera elegido un camino diferente para dirigir, eso es el estilo propio del cada psicodramatista.

También se compartió respecto de la apertura de todos los del grupo para el trabajo que protagonizado por J.

Conclusiones:

213

La escena realizada, fue tomando vida, desde las preguntas, que en algunos casos ya estaban satisfechas y por otro, que siempre existirán por parte del Director y (por qué no decirlo) por parte de todos los integrantes de un grupo.

Además de este rol emergen elementos interesantes que un Director puede tener en cuenta, o al menos este grupo los tomó en cuenta para ejercer en el futuro la dirección. La importancia de desarrollar un clima que involucre al Protagonista, las eternas preguntas y respuestas que pueden pasar por el Director, el aval o la seguridad de haber aprendido de la experiencia de otros que ya han transitado este rol por más tiempo, el asombro que produce el encuentro y el mareo que puede existir, al que yo denomino el caos que puede surgir en el momento de la acción.

El grupo está en un momento interesante para empezar a interiorizar, además de los conceptos morenianos, las características para ejecutar un rol de dirección, ya sea que en el futuro decidan profundizar más el psicodrama o en la utilización de las herramientas psicodramáticas con todo lo que implica ejercerlo.

PROCESAMIENTO # 5

La clase pasada se puso en juego el rol de Director y los elementos que este grupo toma en cuenta para desarrollar el mismo.

Los vamos armando poco a poco, mientras Débora aprovecha para poder ilustrar situaciones que se dieron y explicar ciertos elementos técnicos y conceptuales. Se hace énfasis sobre la memoria espacial -en qué parte del escenario se ponen en juego las escenas y en donde se van ubicando los elementos que van apareciendo. Se destaca

la importancia de hacer una lectura del grupo y no interpretación,

remarcando sobre el contrato que se necesita establecer para saber donde están los límites que se tiene como Director.

214

Se explicó a la vez, que un terapeuta entrenado para mejorar su desempeño en el rol, realiza una práctica del entrenamiento del mismo -lo que le llamamos práctica de dirección- en donde el Director se convierte en Protagonista.

El tema de hoy es hablar sobre catarsis de integración, Claudio hace un preludio del tema, su punto de partida son los olvidos. Cuando se hacen presentes, luego de haber jugado roles, es cuando se jugaron cosa nuevas, es una forma anticipatoria de roles nuevos que se van a integrar en lo posterior.

Surge otra pregunta ¿A dónde tengo que apuntar ahora con este grupo?, se remarca que para que exista un Director, necesitamos un Protagonista, por lo tanto el trabajo de hoy es el protagonismo.

Débora sabe que se pueden trabajar escenas personales. Vamos al caldeamiento.

Caminamos, vamos por espacio psicodramático, nos estiramos, nos movemos, Débora nos pide que busquemos una imagen personal, sugiere que al tenerla, todos nos vayamos sentando.

Una vez que todos estamos sentados; Débora apaga las luces del salón, y nos invita a que imaginemos frente a nosotros una pantalla blanca, cerramos los ojos y empezamos a darle vida. Las luces se apagan y Débora nos deja que entremos más en este recuerdo.

Vuelven las luces y Débora pide que compartamos al grupo su escena.

Pide alguien que comparta su historia.

Surge una escena, una alumna relata que está en una convivencia de gestalt, tienen cosas pendientes con una compañera de habitación. Aparece otro personaje, es otra compañera con la que comparte la habitación. 215

La Protagonista tiene dificultades para expresar sus asuntos pendientes con una de las chicas que está en la escena.

El diálogo se establece entre la Protagonista y la otra chica.

La Protagonista entrena el rol para poder decirle su molestia por actitudes de este personaje hacia ella.

El diálogo gira sobre reclamos ante actos de agresión, la Protagonista puede expresarlo y expresa sentirse intranquila, percibe una relación de alianza entre los dos personajes, las dos chicas con la que comparte la habitación.

Débora, pregunta si existe otra escena más personal que esta enmascarando esta escena.

La Protagonista evoca a su padre y a su abuelo. Están en casa de su abuelo, tanto el abuelo como el papá están frente a ella, su abuelo le pide dinero para poder comprar medicamentos para su padre, quien esta muy delicado de salud.

La Directora pregunta, sobre la enfermedad del padre. Este tiene afasia, no puede articular bien las palabras, la Protagonista mencionaque no sientir la presencia de su padre y llega a sentirse como un papá para su padre (valga la redundancia)

Se mantiene la escena y se establece un diálogo entre estos dos. Su padre siente vergüenza por no poder hacer nada y estar inhabilitado para muchas cosas, entre ellas, el poder mantenerse a sí mismo.

La Directora pregunta a la Protagonista: ¿Qué palabras son la que se tragó y no le ha dicho a este padre?

La protagonista habla de la rabia guardada, luego que su padre se separó de su 216

mamà y se fue a vivir con otra mujer, y que a partir de la enfermedad de su padre, dejó eso atrás y empezó a cuidarlo, a apoyarlo en lo que podía.

La escena se restaura con el pedido de esta hija a su padre, para que interese por las cosas que ella hace en la vida y que asuma su rol de padre, que ponga más presencia con esta hija. Su padre acepta, pide paciencia a esta

hija y se

compromete a hacerlo, le menciona que se siente orgulloso de ella.

En el sharing se comparten las vivencias, desde el rol que jugaron, y si hubo algo que les tocó.

¿Qué dice el Protagonista del grupo con la afasia? y ¿Qué es lo que pasa con el rol de padres y Abuelo?

En la puesta en escena, dado que se sugería trabajar el rol de Protagonista cuando la alumna contó su viñeta, se le pidió a ella que elija el Director para que dirija su escena.

En la dramatización, hubo un momento en que Débora pide al Director elegido por la Protagonista, que deje un rato la dirección, para tomarla ella, lo cual se mantiene así hasta el final del trabajo. Por ello en el compartir se manifiesta el deseo de haber esperado que se juegue más por parte del primer Director, con la finalidad que el rol de desarrolle más.

Se habla también de la relación con el abuelo, rol que en la escena no es tomado mucho en cuenta por la Protagonista. La alumna que fue elegida para jugar ese papel, cuenta haberse sentido excluida al encarnar este rol, sin embargo expresa que se siente contenta por ver como se establecía el vínculo entre padre e hija, y expresa que le hubiera gustado mucho haber participado en el abrazo final, con el que se terminó el trabajo. 217

Los profesores piden a los que representaron los roles jugados, que vuelvan al escenario para terminar con el abrazo que se esperaba. (Creo que el tema del abuelo, el padre y el hijo tiene que ver con el tema de los coordinadores, insisto en esto)

Ojo aquí el abuelo se sentía excluido, por ello lo del abrazo al final (qué interesante que en esta escena el Director también quedó excluido)

Se habla sobre el trabajo que se hizo y se remarcó el efecto reparador; la escena reparadora, ya que la clase de hoy trataba sobre catarsis de integración.

Para terminar la reunión se pide a los demás que compartan las escenas que surgieron, producto del caldeamiento inicial, con el objetivo de trabajar esas escenas en el próximo encuentro. Y son: 

Una alumna menciona tener conflicto con la autoridad, ahora que esta trabajado le molesta que su jefa le diga de mala manera lo que tiene que hacer y dice que no le debe molestar eso.



Otro alumno menciona la escena de un encuentro en el grupo en el que fue elegido como Protagonista sociométricamente, comparte que sintió resistencia a trabajar.

Ya se deja caldeado al grupo sobre la escena a trabajar en la próxima clase, se pensará como va a ser el caldeamiento, y si será necesario o no, ya que existen escenas para poder trabajar.

Conclusiones:

Por lo que veo de las escenas que quedaron pendientes y de lo que se ha ido 218

trabajando en este encuentro sobre el Protagonista y el rol de Director, pienso en varias cosas: 

Temor a equivocarse por parte del los futuros Directores.



Una percepción por parte de los integrantes del grupo, que van a ser retados por sus intervenciones en prácticas de dirección (me incluyo)



Los Directores más entrenados no dan totalmente la posta de la dirección



La necesidad de la puesta del cuerpo por los miembros en el grupo en las sesiones.



Temor a algo nuevo PROCESAMIENTO # 6

En esta clase vuelve Mónica a ser parte del equipo, por ello Débora pide que por parte del grupo se haga una retroalimentación de lo que se ha ido viendo a lo largo de los encuentros.

Primero se pregunta a la Protagonista de la semana pasada, como quedó después del trabajo. Esta comparte su asombro por cómo de una cosa tan sencilla pudo emerger una escena tan compleja, y como se llegó a reparar, desde la dirección del Director y su manejo psicodramático. Agrega que la semana pasada recibió una llamada de su padre incluso, que percibió a su padre más cercano a ella.

Débora pide al grupo que haga una retroalimentación a Mónica sobre lo que se ha ido trabajando, y el sentir general de todos es la combinación de la teoría y la práctica, se comparó al proceso experimentado en el grupo como una espiral, en la que cada vez, se está más arriba pese a la presencia del mareo. La confusión es percibida como un paso a superar, y cómo la espontaneidad se hace presente en 219

cada encuentro con cada uno de los trabajos que se van haciendo.

Después del compartir, se remarca, que ya existían temas pendientes desde la otra semana que son:

La imagen de un alumno sintiéndose incómodo al ser elegido como Protagonista, y la de una alumna respecto de la desvalorización que recibe por parte de su jefa.

Se pide a los que comparten su imagen, que ubiquen en qué parte del escenario esta su imagen o el Protagonista, en la elección sociométrica se da un empate.

Débora pide a los potenciales Protagonistas que escojan cual es la escena que se va a desplazar primero. La alumna de la segunda escena menciona no tener problema en permitir que su compañero escenifique la suya primero, pese a querer dramatizarla también.

El alumno menciona sentirse ya Protagonista. La escena con que se inicia

es la de él, el tema es la incomodad de ser

Protagonista.

Débora pide trabajar desde el trabajo del Director de sí mismo, por lo que pide a nuestro Protagonista que elija un yo auxiliar en el rol de Director.

El Protagonista elige a una compañera. Es ella la que debe armar la escena, ayudada por este Protagonista.

Hay confusión, porque se inicia desde el lugar en que se ubica originariamente, que es en donde surge el Protagonista. A partir de este espacio, habla el Protagonista, de la situación anterior en donde fue elegido sin querer.

Se pide que se arme esa escena, él lo hace, recrea la situación como fue y 220

menciona estar incómodo; vuelve a su lugar inicial y surge una confusión para mí, ya que el alumno desde el lugar del Protagonista habla con su Director, como refiriéndose a las preguntas y las respuestas. Yo estoy ubicada en el otro extremo del escenario. Veo que Débora lo lleva nuevamente al rol inicial, el lugar donde está el Protagonista, desde ahí vuelve a mencionar su incomodidad en la elección del encuentro anterior, se hace una inversión de roles.

En este movimiento, el alumno esta siendo elegido por el grupo para dramatizar su viñeta, dice sentirse incómodo, inclusive percibo enojo, falta de ganas, se establece un diálogo entre él como el alumno de la elección sociométrica y el del Protagonista que acepta ser Protagonista, en este lugar, se lo percibe tranquilo, entra un Yo auxiliar que es Mónica para realizar un espejo del rol de la incomodidad, después de intercambiar palabras, el alumno que está ubicado en el lugar desde donde elige dar su escena pide al rol de incomodidad, que se mueva del lugar donde estaba originalmente, lo ubica más cerca de él, enfrente de él, la situación se soluciona ya que se reconcilia con el Protagonista de la escena pasada.

A partir de esto se desplaza otra escena. El Protagonista evoca a su familia, y un diálogo con uno de sus miembros que quiere explorar.

Están su esposa, sus tres hijos todos varones y el perro. Está en una discusión con su hijo del medio, el Protagonista menciona que nadie más está presente en ese momento, pero que a pesar de la discusión que tiene, todos los de la familia están presentes por que saben qué es lo que pasa.

Elige a un alumno para el rol de hijo y a otras compañeras para los roles de sus otros hijos y a mí como su esposa.

Cuando Débora hace la inversión de roles entre la esposa y el Protagonista ,a mí me aclara el rol de I en la escena, ella encarna el propio Director de la escena del Protagonista, (delineo esto, ya que en la intervención anterior no me quedaba 221

claro.), de verdad quien dirige es H, por ello el constante cambio de roles para saber como es que quiere ser acompañado.

La escena se pone en acción con las inversiones de roles correspondientes.

Su hijo del medio dice no sentirse comprometido por su padre, su hijo menor -que a pesar de no intervenir- esta escuchando lo que pasa, su esposa que no interviene escucha y mira pero prefiere tomar distancia y esperar que cada uno asuma su rol, el hijo mayor que no esta presente en el momento de la discusión pero se entera por lo que los demás de la familia le cuentan. El padre que asume su postura y este hijo, que constantemente repite el diálogo de no ser escuchado por su padre, como también el deseo de tener también la razón.

Algo importante en toda esta acción es que La Directora de esta escena, dirige todo el proceso con pequeñas pautas del Director titular (como en una práctica de dirección)

El diálogo de este padre con su hijo, se ve interrumpido cuando Débora pregunta a H si hubo alguien que no lo escuchó, no recuerdo si le pregunta directamente si tiene que ver algo con el padre.

El Protagonista, recuerda un evento con su padre, es algo que no le pudo decir; frente a una situación de crisis que su padre experimentaba ese momento. Se completa esa parte en la que este H le dice a su padre ya fallecido lo que pensaba y el deseo de él, de colaborar en lo que pueda.

Su padre habla, dice que no siempre es necesario que su hijo le diga esas cosas, que siente el deseo de ayudar, le da un mensaje a este Hijo que aunque en esa ocasión no hablaron, y que ahora esté muerto siempre hablan y que siempre siente la presencia de su hijo, ese padre le da una palmada a su hijo.

222

El Director (Débora) pide que H se quede con ese anclaje corporal de la mano, la escena cambia, está de nuevo con su hijo, y le dice que a veces aunque no le guste a los hijos, los padres tienen razón, sin embargo acepta que su hijo también la tiene en parte, Su hijo habla y acepta que su padre tenga la razón y que esta en camino de querer tenerla.

Se pregunta por parte el Director como percibe la escena en el aquí y ahora, H pide poner ahora al grupo en círculo y tomados de la mano, todos los que jugamos los roles de la familia nos agrupamos. I quiere entrar en el círculo, el Protagonista pide que no ingrese su rol de Director por que esta escena es de su familia. Héctor habla con su familia y se compromete estar más presente y escuchar.

Se invierte el rol con su Director y pregunta si le falta algo a este Protagonista para terminar esa escena. Se invita a I a que forme parte del grupo, comparte desde el rol del Director de H. Tomados de las manos nos indican que volvamos a nuestro rol y pasamos al compartir. (Estamos con el tiempo justo.

Ya en el compartir, J nos dice que se siente muy identificado con el rol que juega en la escena ya que hace de hijo del medio. V menciona que en el rol de su padre, ella no sintió que fuera justa la palmada en el hombro. Yo desde mi rol comparto mi confusión al inicio de la dramatización y cómo me resultó más claro cuando apareció la escena familiar, Además hablo sobre el rol para el que fui elegida: el de ver, escuchar y callar. Comparo con el rol que cumplo o que sentía estar cumpliendo en este grupo, además de manifestar mi deseo por dirigir una sesión que hace rato no lo hago.

Se habla sobre la posición del Director de mantener y aclarar al Protagonista quién es. Aquí en este punto yo pienso ya en la matriz indiferenciada, la brecha entre la fantasía y la realidad.

Mónica también señala que no se espere que después de este curso, se pueda 223

tener plenamente el rol de Director ya que los nervios y el miedo o el susto de estar frente al grupo, es algo que le pasa a Directores con mucha experiencia….

M J nos comparte que no se identificó con el trabajo de Héctor inclusive que sintió rabia en el momento, de no estar escenificando su escena, la cual queda pendiente para la próxima semana.

Conclusiones: 

En el comienzo de la clase se percibió en general por parte de todos lo miembros del grupo la presencia de autocrítica, la culpa y la vergüenza; por los temas que surgieron, el empate y por la devolución que hizo Mónica respecto de la autocrítica, que pasa por algo personal de cada uno.



Considero oportuno el trabajo de hoy ya que como grupo se está dando permiso para tener la razón, es decir sentirse con más cancha para ejercer el rol de Director.



El grupo puso el factor tele en acción al dar los roles en el trabajo de hoy, de acuerdo a su aquí y ahora.



Con el tema de la temporalidad, que es algo que me ha estado dando vueltas y no daba con las palabras para explicarlo; lo vinculo con el tema del mareo, el grupo esta ubicándose y está entrando en otra instancia.



A partir de la escena de hoy, en el diálogo entre padre e hijo, reconocer la razón en el padre y en el hijo es dar paso a generar independencia del desarrollo del rol de Director

PROCESAMIENTO # 7

Luego de recapitular el encuentro anterior, no hace falta realizar un caldeamiento inespecífico, ya que desde clases anteriores se ha estado imaginando la posibilidad de ver la escena de M J. Débora nos pide que nos acerquemos, ya existe una Protagonista, falta elegir al Director. 224

Expreso mi deseo de ejercer ese rol y se le pregunta a la Protagonista quién quiere que dirija su escena.

Asumo la dirección, y se me juntan dos sensaciones: el deseo de acompañar a M J y el obtener seguridad en el rol que juego hoy (luego de mucho tiempo)

Algo que me resulta difícil al inicio, es ser clara con la Protagonista, para que ella arme su escena. Por un momento tengo la idea que como ya saben psicodrama es más fácil que se pongan en acción con un simple ¿Qué escena quieren trabajar?, ¿Por donde quieres empezar? (refiriéndome a la inversión de roles, ese rol lo tengo interiorizado desde mi formación en Ecuador)

Y la verdad que al ver el rostro de confusión en la Protagonista quien no entendía mis consignas, bajé un cambio y fui más lento.

La escena disparadora se pone en acción, está en el lugar de trabajo, y su jefa de llama la atención por llegar

tarde, además de esta jefa está presente otra

compañera más. Se realiza la inversión de roles y mientras hago eso, Mónica me sugiere preguntar por algún elemento de esa escena, algo físico pero yo no realizo la sugerencia de ella.

Se hace la inversión de roles, su jefa, le dice que deja el precedente del mal ejemplo con su llega tarde, hago un espejo de la Protagonista pidiendo a ella a que elija alguien para que juegue ese papel.

Aparece la voz de los reclamos justos, que le menciona que reclame el buen trato. Al jugar este rol, la Protagonista adopta otra postura y el deseo de ser tratada adecuadamente se hace presente.

Volviendo a su rol, y al escuchar nuevamente el diálogo con su jefa, esta parte suya 225

que pide reaccionar de la Protagonista, se queda paralizada y menciona que existe otra parte, una contraparte y es la de quedarse callada, por lo que se convoca a ese rol, quien menciona que le hace sentir vergüenza y que es mejor que se quede callada.

Mónica

me recuerda que existe un rol que no ha sido investigado, es de su

compañera de trabajo. Al indagar qué es lo que tiene que decir este rol menciona no importarle mucho, hay una postura de indiferencia.

Vuelvo a retomar el rol de la vergüenza, y el que pide que hable, y yo no veo una posible escena conflictiva... se disuelve la escena y pasamos a otra en la que aparece ella, que no quiere hablar el no mostrarse y otro rol que luego es una escena disparadora.

Antes de indagar sobre la presencia de los roles, pido a la Protagonista que los ubique en la distancia que los siente presentes (nuevamente vuelvo a asumir que ya tiene incorporada mi forma de dirección por lo que tengo que hacerme entender) Aparecen tres roles: el no querer hablar, el quedarse callada y el sentirse menos. Al entrar en el rol de sentirse menos, aparece un recuerdo y es ahí donde me siento acompañada por Mónica cuando pide a la Protagonista que busque una escena desde ese rol. Rememora un momento de la infancia, donde está viendo que otras niñas están jugando, ella pide participar del mismo, pero no le permiten jugar.

La escena es así, hay varias niñas jugando un trencito y hay una niña que lidera este juego. La Protagonista le pide a ésta poder jugar, la niña la rechaza. Yo, al ver esta escena le pregunto si necesita a alguien para pedir ayuda, por ejemplo: una profesora. La Protagonista acepta que aparezca la profesora pero cuando le propongo la inversión de roles con esta, ella no quiere jugar ese rol, ya que le mueve otra escena en la cual no quiere entrar. Mónica vuelve a intervenir y pregunta si quiere ir a esa escena que le surge, pero la Protagonista lo rechaza.

226

Volvemos a la escena con la maestra y para terminar pido a la Protagonista que hable con esta profesora (en tono firme, para dar una resolución a la escena)

la Protagonista pide ayuda a esta profesora para que la dejen jugar. Se va dando a la inversión de roles que va haciendo conmigo para que le Protagonista exteriorice que es lo que necesita para sentirse acompañada.

Hay un diálogo entre esta profesora que pone limites a las niñas que no le dejan jugar, y le aclara a la Protagonista que pida ayuda cuando sea grande ya que esta profesora no va a estar (ya se habla del futuro)

La profesora pide que dejen jugar a la Protagonista y a la niña que lideraba el juego pasa a segundo plano

la Protagonista se da un abrazo con la profesora. Ya se habla de otro personaje, se repara ente encuentro simbólicamente y al final se trabaja a ese nivel

Se vuelve a la escena inicial con la jefa y menciona que el rol que no habla está presente pero más lejos, los demás roles ya no están, ella reclama sus derechos y a la vez recibe una disculpa de esta jefa.

En el compartir todos expresan lo que les movilizó personalmente desde el rol que jugaron.

Conclusiones y preguntas

Como construcción del rol del Director a lo largo de otras intervenciones y esta última, veo que los temas son muy interesantes, los padres que hablan con sus hijos, hijos que quieren ser escuchados, contenidos, respetados y hoy niños que aprenden a pedir ayuda, y adultos que remarcan que en un futuro no estarán para cuidarlos. Por lo tanto, aprender a hacerse cargo de uno mismo es una prioridad 227

(prioridad es salgo me surge a mí en este momento en que escribo esta relatoría)

El grupo está interiorizando el rol del adulto que respeta, escucha y acompaña y este niño que aprende a pedir ayuda, a hablar.

Pienso en este ejercicio que se ha ido haciendo a lo largo de los últimos encuentros sobre invertir con el rol del Director es muy didáctico para ejercitar el rol que en estos encuentros se quiere construir. Como dice Mónica se hace la pregunta internamente de cómo quisiera el otro que ser acompañado, tiene que ver con lo que dijo en el compartir: redescubrir o sacar a flote el genio que somos todos, el cual se lo despierta con la espontaneidad.

Por mi parte creo que como grupo en algún momento llegaremos a la escena en que se hable de las cosas que no se han hablado, el silencio por ejemplo, que fue algo que surgió a partir de la dramatización de María José

En lo que a mí concierne, aprendí mucho con esta dirección. En primer lugar, aprendí la importancia de permitir que me ayuden. En segundo lugar, aprendí que hay que es positivo dejar la omnipotencia (la mía) respecto de saber cómo hacer algo -se presenta nuevamente el tema de las certezas.

El camino lo va marcando el Protagonista, a quien el Director acompaña.

Por último me doy cuenta que yo también sigo buscando mi rol de Director.

Aquí viene una sistematización que no escribí yo, debido a que sociométricamente soy elegida Protagonista.

PROCESAMIENTO # 9

Se inicia la clase con una retroalimentación de la sesión anterior, que por cierto 228

movilizó mucho al grupo, por la puesta en escena de varias situaciones sin que exista un compromiso de la Protagonista, especialmente, en el momento que aparecen sus padres y ella en una discusión donde los niños tienen que callarse mientras los adultos conversan, y no pueden reclamar lo que está bien o mal.

Mónica comparte que en esta dirección no sabía que camino tomar. Por la falta de compromiso de la Protagonista, sin embargo al indagar sobre el silencio, se logró esclarecer un mensaje importante para el grupo.

Antes de detallar sobre esto, Mónica en el procesamiento comparte con el grupo una pregunta ¿Qué era lo que estaba escondido en la escena?

La escena era buscar el rol de Director y dio cabida al silencio, lo que no se dice, el cual es descubierto por un camino distinto al que todos hubieran imaginado, incluso yo, por el lado de las raíces. El mensaje es buscar la esencia.

Luego de dialogar sobre este trabajo, I comenta haberse quedado con la sensación de quedarse callada, y dice haber estado en una situación similar en esta semana.

En general, el grupo menciona que justamente I, no ha trabajado una escena personal

Mónica después del receso pregunta si existen otras personas que quisieran poner algo en escena, así que cada uno explora esta posibilidad, sin embargo es unánime el protagonismo de Inés.

Para este trabajo, es elegida Mónica como Directora. La escena que aparece es la siguiente.

La Protagonista está en un ensayo de coro, está ella, sus compañeros y el Director en un sótano, todo esto transcurre en una iglesia danesa (también se representa a la 229

Iglesia)

I, la Protagonista ( en el rol de iglesia): Soy un lugar chiquito, de madera, tengo el salón bastante amplio, es lindo normal, cómodo para que canten aquí. Ellos me alquilan no hay relaciones afectivas entre el lugar y ellos.

Mónica: ¿Tienes algo para decirle a Inés?

La Protagonista (en el rol de Iglesia): la he visto en varias ocasiones, en el coro, viene a cantar, y viene alegre, el año pasado se pudrió todo por la relación con el Director y los más antiguos.

Mónica ¿Qué le dices a I?...

I, al escuchar eso se ríe.

La Protagonista Iglesia (en el rol de Iglesia): Hay que mantener la esencia, gente nueva está viniendo por que sabes que la mitad de tus amigos se fueron del coro tristes, enojados y sé que esto le molesta.

Mónica ¿algún consejo a Inés? Iglesia: Vas a tener que pasar por este proceso y vas a tener que hacer…. Mónica: ¿Qué apareció? Inés: Muchos se fueron y vivieron otros Mónica: Vamos a la escena que en que algunos se van del coro.

Se presenta la escena en la que está I, el Director de ese coro y los compañeros. Los nuevos y los viejos. Rol de los nuevos compañeros: ¡No sé que pasa acá nosotros venimos a cantar! Rol de los viejos compañeros: ¡Hay dos que siguen en el coro y los que ya se 230

fueron, que no hinchen las bolas nosotros lo fundamos hace 15 años al coro, estamos enojados y cansados! Director del coro: Ya acabaron de cantar, me gusta como cantan, estamos en un momento de transición y cambios.

Mónica: ¿Usted eligió estos cambios?

I propone al Director del coro, que se reúnan para charlar, ya que ha ingresado gente nueva y quiere conocer las expectativas del grupo.

Director: ¿Terminaste? Futuros festejos no hay. ¡Ya está!. Al que no le guste, que se lo banque, el que no se lo banque que se vaya, yo no eché a nadie.

Mónica hace una inversión de roles: ¿Qué vas a hacer en este momento? I: La verdad es que la escena fue más fuerte. Y vuelve al rol de Director y maximiza más lo dicho. Mónica: ¿A quién le dice que se vaya? Director: El que me quiere cuestionar, que se vaya, yo puse las reglas del juego, ¡Estoy harto que se defienda a otros! Mónica: Explique, por qué. ¡Es Interesante esto que dice!

Se hace una inversión de roles con todos, I oye todo.

Mónica le pregunta a I: ¿Qué sale? ( Y le pide a I que salga de la escena y vea desde afuera lo que está sucediendo. Luego, le pregunta si existe algo que quisiera cambiar.

I dice que le hubiera gustado otra respuesta por parte del Director, hay un gran silencio en la sala.

I, la Protagonista, vuelve a la escena, tomando el rol de Director y menciona que 231

está muy triste “No puedo mostrar mis sentimientos, estoy muy dolido por todo lo que me pasó, me siento traicionado y yo soy de enojarme ¡No puedo soportar hablar de esta situación!”.

I, la Protagonista vuelve a su rol, y nuevamente Mónica le pregunta quién en su vida ocupa el rol de la tristeza. Aparece la madre, se cambia la escena para saber qué es lo que esta mamá tiene que decir.

I, la protagonista en el rol de su madre: - No puedo expresar la tristeza, hubo muchas cosas que me hicieron ponerme dura, me cuesta conectarme con

mis

sentimientos.

La Directora de esta escena, invita a la mamá a que concretice los sentimientos que no puede expresar. La madre dice que está esperando a I y que antes de su nacimiento, el abuelo y la tía de la Protagonista fallecen

A partir de esto la madre, representada por I, abre una escena.

Está ella en el hospital, ya ha dado a luz y no conoce a su hija; I esta en una cuna en la sala de bebés.

La madre se siente sin energía, está muy triste por la pérdida de su padre y de su hermana, le hubiera gustado mucho que este conozca a su nieta, ella está sola en el hospital porque su esposo está trabajando

Mónica le ofrece la oportunidad de que su abuelo venga a conocer a I, entonces se entabla el diálogo entre abuelo y la madre de I.

En esta escena, el abuelo sugiere cómo tiene que hacer esta mamá para poder ver a la niña y cargarla

232

(Algo que me llama la atención es lo que Mónica le pregunta al abuelo, y es: de dónde saca la nieta el don de cantar, y él le responde que justamente lo hace por parte de ese abuelo que ya no está.

La Madre, no se anima a cargar a la niña, por lo que el abuelo le indica cómo. Entonces, aparece el canto. Este abuelo entona una canción de cuna, que arrulla a I en los brazos de su madre, en este momento la escena se torna muy emotiva. Mónica llama al padre para que juntos -el abuelo, la madre y el papá- acompañen a la niña.

Luego de tener interiorizado este canto, Mónica, pide a I que se vuelva a la escena inicial del Director. En este momento I le pide a este que la tristeza no se transforme en bronca sino en algo más constructivo.

CONCLUSIONES

Pienso que esta escena, bien podría ser integradora para el grupo, ya que el silencio manifestado a lo largo de los encuentros se trasformó en canto, (lo expreso desde mi perspectiva), este cantol fue por el abuelo, rol que ya es familiar para el grupo.

Relaciono esto, a la escena en la que se aparece Moreno y alienta a todos los miembros del grupo a que continúen en el camino de descubrir el psicodrama; en esta escena el abuelo marca la transición de la melodía. (Me viene a la cabeza en este momento la espontaneidad).

Otra cosa, que me parece interesante resaltar es lo que I le dice a este Director del coro, “Transformar la tristeza”

233

PROCESAMIENTO # 10

En la lectura de la relatoría llama la atención de Mónica, que todos olvidamos detalles del trabajo anterior. Ella nos señala que es lógico que nos hayamos olvidado ciertas cosas, pues el grupo ha trabajado un tema muy intenso a través de la Protagonista I : la vida y la muerte.

Agrega también lo que M J nos contó antes de terminar el trabajo de la semana pasada, sobre su amigo que falleció, por lo que ella estaba muy afectada Sin embargo estuvo presente en ese encuentro pese a no haber asistido a ningún otro lugar, desde que se enteró de la noticia. (Ojo es un dato que omití en la descripción del trabajo anterior)

En este encuentro ella no está. A todos no llega su ausencia ya que nadie ha hablado con M J durante la semana. Mónica nos pide hacer una inversión de roles con M J.

V habla en el rol de M J: Me siento dolida por lo que pasó, sigo sin querer trabajar. Mónica – ¿necesitas algo del grupo? Rol de María José - Que me acompañen un poco, pide a V que cuando tenga tiempo, de vez en cuando que la llame.

I es la siguiente que se sienta en el lugar de María José: -No puedo creer, me siento rara, tengo miedo, ¿por qué lo conocí? Pide apoyo del grupo y también la posibilidad de trabajar en un Zoológico.

Claudio en el rol de ella nos dice: – Me hubiera gustado que me llamen a pesar del dolor en especial de parte de equipo conductor del curso. Se hace inversión de roles, Claudio oye lo que dice M J y él le pide disculpas por el olvido y valora que haya llegado a la clase.

234

Alexandra: Le digo que estuve pensando en ella pero que no la llamé para no parecer que la estoy tomando como pobrecita En la inversión de roles me dice BOLUDA me hubieras mandando un mensaje o llamado

Héctor. -Estoy muy sola, más porque estoy acá, me siento olvidada, nos dice algo importante – además mi ausencia es la vez un mensaje que estoy decepcionada que no haya en Buenos Aires mucha gente que tenga para compartir también es una oportunidad para que ustedes piensen en mi si y específicamente a Héctor le dice ¡Vos tenías mi e-mail!

Héctor le responde que se olvidó, pide perdón por no mandar el mail

Mónica agradece María José por la oportunidad que da al grupo de pensar en la persona que tenemos al lado, menciona que también ella tendría que haber llamado a Inés después del trabajo que ella dirigió.

Inés acepta eso.

Luego de eso se pide hacer inversión de roles con Juan quien es otro integrante del grupo que no asiste a esa clase, yo invierto con él y percibo desde el rol también que lo llamen y que se siente a veces fuera por no venir en algunas ocasiones.

Luego en la inversión con Débora, Inés menciona que no asistió por el frío.

En el compartir se habló sobre el frío que rodeó este trabajo Mónica nos menciona que esta vez el Protagonista fue el grupo ya que a todos impactó el trabajo de Inés y la noticia de María José.

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Recalcó el nivel de intimidad en el grupo al presentar los trabajos que hemos ido construyendo

Además, el nivel de acompañamiento que se hace con el otro

# 11 Historia de unas sillas

Después de un caldeamiento, en donde nos sugirieron que tomemos conciencia de cómo caminamos. El Director de este encuentro ubica dos sillas, ambas muy distintas y nos pide a todos, que nos paremos enfrente de estas dos sillas, y solicita que charlemos con estas, bajo la consigna de que cada uno busque en cuál de estas sillas está el Director y en dónde está el que habla con este rol, el trabajo principal es que los presentes podamos establecer un diálogo con el Director personal.

El espacio está abierto para que cada todos los que estamos en la clase pueda dirigirse a este Director, la primera en dirigirse es I, Claudio averigua en donde está el Director de I, ella lo ubica en la silla azul, el diálogo es: – Hoy sigo digiriendo el trabajo de la semana pasada, quiero mantener perfil bajo. En la inversión de roles con este Director, escogiendo a su rol de Directora Débora, el rol toma vida y la respuesta es. - Está bien.

En este diálogo el Director está de pié. I se expresa hacia él desde el círculo que se formó de una manera espontánea. Con el punto de partida que da I para hablar, con el rol convocado, se delimita cómo los demás vamos a ubicarnos para hablar con el Director interno.

I agradece la compañía del rol, y valora lo que se ha podio aprender del rol, al ver como otros Directores han desplegado sus conocimientos.

236

J participa en el diálogo, curiosamente en este momento no recuerdo lo que menciona a su Director, rol jugado por Vicky. (Tampoco tengo el registro de lo que le mencionó)

Hhabla con este Director y le dice que ha aprendido mucho de este y de la importancia de su rol y de lo indispensable, o importante que es meterse en cada lugar del escenario, lo importante de sentir de indagar, de acompañar al Protagonista (esto último es un agregado mío). El contra rol, es jugado por J, en este, Juan olvida lo que tiene que decirle a H. (En ese momento yo siento un poco de ansiedad por que pienso en reproducir lo que se dice en el rol) Me llama la atención que no se hace un doble a J para que pueda reproducir lo que faltaba al diálogo, Siento que por parte de H no hay problema por que no escuchó tal cual a su Director.

V entra a escena, habla con su Director, no recuerdo lo que le dice, lo que sí registro ahora es que M J reproduce tal cual lo que V en el rol del Director dice, (que paradójico)

J habla con su Director, el elegido es Héctor para representar su rol de dirección.

Entro en escena, mi diálogo es muy parecido al de Débora, de hecho Agradezco a todos lo Directores por sentirme acompañada y por su generosidad en brindar sus conocimientos.

Claudio, que está cargo de la dramatización asume el rol del Protagonista, su Yo auxiliar asume el rol de Director, esa es la escena nuclear del grupo, y desde este rol se ponen en juego muchas cosas que ya se han presentado a lo largo del curso. Claudio en el rol del Protagonista, trae a un Director con mucha experiencia, luego de un silencio, que a mi modo de ver permite dar tiempo para poder formular las preguntas que fueron dos.

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La primera: Si se le ha ocurrido alguna vez trabajar con familias, y la segunda si le han hecho preguntas que no ha podido contestar.

En el rol de su Director, pone una postura muy segura, pide al conductor que estaba a cargo de la escena, que le pase el saco del traje, desde ahí habla con el Protagonista, respondiendo sus preguntas. Este Director habla…… en secreto para con este Protagonista, le recuerda que va hacer una infidencia; acepta que se equivoca, que busca que sea poco y que también existen ocasiones que no sabe que hacer, que cuando tiene una pregunta las piensa las estudia y cuando no sabe responder cierta pregunta se las deja a otros para que las respondan.

Débora le pregunta a Claudio en el rol de Director, si valdría la pena entrevistar el saco del traje, a lo cual el Protagonista de la escena asiente. Se concretiza la imagen del saco que le dice que él Director sentía frío y para eso es necesario abrigarse, que valen también las respuestas sencillas.

Vuelve a su rol, de Protagonista escucha a este Director, después de ello, Claudio vuelve a tomar su rol de Director del trabajo en general y pregunta si existe alguien que quisiera volver a decir algo a este Director. M J, pregunta si es obligatorio pasar a trabajar, la respuesta es que no es obligatorio. El trabajo termina ahí.

En el compartir, salieron muchas cosas interesantes. Se habló de la importancia del Yo auxiliar en el trabajo psicodramático, valorando que el rol que desempeña es poner la postura física y el diálogo para poder generar el efecto deseado en el/la paciente y el grupo.

También se comparte que no recuerdan todos los diálogos hechos por los integrantes del grupo durante la dramatización. M J comparte que no deseaba dramatizar por estar triste debido a los eventos vividos las últimas semanas, el grupo la comprende y la acompaña de acuerdo a lo que ella misma desea, sólo ser escuchada, el grupo de ha convertido en un lugar 238

de contención.

Como conclusiones

La puesta en escena del rol de Director, permite valorar la función del Yo auxiliar y la capacidad de quien lo realiza para reproducir todo lo que el Protagonista expresa durante la escena.

Se reconocen las limitaciones que se tienen desde el rol de Director, quien no tiene todas las respuestas, y también que puede confundirse mientras dirige, por lo que se resalta la posibilidad o el permiso de dar respuestas simples

Surgió un silencio que no causa problema, es mas un silencio reflexivo, para darse tiempo de hablar, de actuar.

# 12 UTILIZACIÒN DEL PSICODRAMA Y LA ACTITUD DEL DIRECTOR

Al leer la crónica en la que trabajamos la semana pasada, M J comparte que se sintió importante por el interés del grupo hacia ella y hace una observación muy linda y es que en esa semana se le cumplió lo que deseaba, el sentirse acompañada por los miembros del grupo.

Mónica nos dice que es el mejor ejemplo de tele y consciente, Lo que se emite a distancia y el contacto de lo coinconsciente lo que el grupo percibe. (A mí me queda clarísimo ya eso)

Se pregunta a J cómo se ha sentido y si tiene algo que decir al grupo luego de sus ausencias por haber estado resfriado.

Juan menciona que no tiene nada en

particular para decirle al grupo y que se ha sentido mal por faltar a las clases, lo cual le ha generado cargo de conciencia. 239

M J nos dice que sí siente que necesita trabajar algo pero que todavía no sabe qué escena, eso queda pendiente en el grupo.

Ya para trabajar con el grupo Mónica sugiere hacer un trabajo con todos los integrantes del grupo y que, así como M J no sabe que escena dramatizar, y J sobre su cargo de conciencia, nos dice que a lo mejor en el grupo hay algo que decirse.

Al hablar del trabajo escrito que hay que presentar para la finalización del curso, se plantea ver la escena de J, la intervención con psicodrama en pacientes autistas.

La escena es así:

Hay un el telón, hay una auxiliar y J, el Protagonista detrás de este, dándole vida a los títeres -un cavernícola y una

muñequita Lucía-. Del otro lado están dos

pacientes significativos, para J: Matías y Ana, acompañados de un auxiliar que está para contener a los pacientes.

La inversión de roles se presenta de esta manera:

Trae a Matías, está sentado en una esquina del salón, está arrodillado, hace movimientos esteriotipados, se escoge a V para que juegue este rol.

Adrián es el auxiliar de los pacientes, Está de arrodillado, sentado a lado de Matías, esta con ganas de divertirse, y quisiera estar del otro lado del telón.

Ana es grandota, es histriónica, se sienta a lado de Adrián, está expectante de lo que va a pasar.

Del otro lado del telón, están J, la auxiliar y los títeres la cavernícola y Lucía. 240

J en su rol dice que el cavernícola se parece mucho a Matías y por eso está dirigido a él esta función (esto es lo que entiendo)

Hace un doblaje con el títere, que es representado por Claudio, sabemos en la inversión que hace J que el títere fue diseñado por Juan. I que es la auxiliar, esta dándole vida a Lucía, su función es representar el rol de respuestas amables de lucía.

Lucía que es jugada por M J reproduce los roles de cortesía, es el contra rol del cavernícola.

La escena toma forma de esta manera:

El cavernícola está pidiendo mate de manera grotesca a Lucia, quien responde amablemente al pedido del cavernícola.

La reacción de Matías es de auto agresión, se muerde la mano y grita: ¡Así soy yo!, ¡Basta, basta!

Juan en su rol del coordinador del trabajo menciona estar asustado y preocupado por la reacción de Matías y su auto agresión.

En la inversión con el auxiliar dice que está también asustado por que no se lo puede contener debido a su excitabilidad.

Mónica luego concretiza la mordida de la mano de Matías,

y es ahí donde se

obtiene información sobre la relación de los padres.

Una vez en el rol de coordinador, J acerca los títeres tanto el de Cavernícola como el de Lucía a Matías. En esta parte de la dramatización los títeres le dicen que están para jugar nada mas, que los toque que no le van a hacer daño, Matías se nota más 241

tranquilo, y pide distancia del auxiliar y les dice a los títeres que está bien que estén cerca pero que también necesita distancia y termina diciendo “si me siguen encima me muerdo al mano”.

La escena queda en este momento.

El grupo comparte sus vivencias respecto de lo escenificado.

J plantea hacer un trabajo con psicodrama para ir más allá de la angustia, descubrió que estas actitudes del paciente, tienen que ver con lo que esta pasando en la casa.

H le pregunta de manera insistente a J por qué hizo ese trabajo con esos chicos, por lo que Mónica pide que en el compartir se hable desde la vivencia del rol en que cada uno participó. (Siento tensión en este momento)

I expresa que es difícil trabajar con estos pacientes y saca a luz la paciencia que se necesita para intervenir con esta población.

M J percibió que el cavernícola era muy demandante y frente a esa demanda, en el rol sentía ganas de morirse, sin embargo el cavernícola hace lo que sea para mantenerle vivo.

Claudio comparte lo difícil que es ejercer el doblaje espontáneamente. A

ello

Mónica agrega que en verdad, la única que dobla a Matías (el paciente de J) es Lucía.

Claudio dice que en psicodrama se interviene con psicóticos con muchos Yoes auxiliares. Mónica agrega que la personalidad del paciente de estas características esta desparramada por todo el espacio.

V expresa que todavía está cargada con el rol del paciente por lo que Mónica le 242

pide que se descargue del ese rol.

Una vez que V descarga, H pide permiso para doblar a Juan sobre la pregunta que le hizo a él y la respuesta que va recibiendo desde este doblaje.

Y desde su silla Héctor le pregunta: En el momento en que hiciste esta escena, ¿sentiste que se te movió algo dentro?

Y el doble, responde: - Si se movió algo, Yo diría que se movió, y eso que se movió… por que pasamos una puerta que estaba buscando pasarse, cuando quiera que esta puerta cerrada se abra, cuando se abrió me asusté y sé que por alguna razón estaba cerrada y no se si tenía derecho de abrirla”. Esto se lo dice a Mónica, que es elegida por Héctor para representarlo, luego Mónica en su rol de Héctor dice “Mónica, no sé si tienes bien claro a donde va esto...”

Al volver todos a sus roles, Mónica le pregunta a J si acepta el doblaje, él dice que lo toma como válido pero no es como piensa. H dice lo mismo del doblaje de Mónica.

Mónica sintió que todo el trabajo estaba en cuestionamiento y que empezó cuando se entrevistó a Matías, que es abrir una caja de Pandora ya que no hay la brecha entre la fantasía y realidad.

Luego sale una pregunta que tenemos de este autista, M J dice que lo ve como el cansancio de J al trabajar con esta población porque de verdad desgasta.

Se termina el compartir y Mónica sugiere que si alguien tiene una población con la que se trabaja con psicodrama que la traiga. Yo propongo traer una escena de mi trabajo con mis pacientes de Ecuador.

# 13 Esto es aporte de Vicky 243

A va a trabajar su escena que va a dirigir Claudio. Es una escena con un paciente de 34 años cocainómano: Galo Son cuatro pacientes adictos que se encuentran en una fundación. Galo es Héctor, Juan toma el rol de Andrés, Majo el rol de César e Inés toma el rol de Luciano. Son las 9 de la mañana y Ale viene de su casa con tiempo al grupo de terapia, donde la esperan. Hace inversión de roles con todos los personajes: Galo: ante la pregunta de Claudio “¿Qué hace acá?” él responde: “Acá me trajeron, y encima tengo que ver a esta tipa que es mi psicóloga. Siempre con sus cosas de que juguemos, de que hagamos. Yo quiero salir”. Andrés: “Yo estoy aceptando el tratamiento. Ella me ayuda bastante pero nos hace jugar. Me sirve pero no quiero. Consumí todo y me trajeron. ¿Qué nos vas a hacer? Seguro unos jueguitos” (le dice a Alexandra) César: “Todos ya te dijeron, somos adictos y esta tipa me dispara un montón de cosas. Es una hija de puta y yo se lo hago sentir”. Luciano: “Yo chupaba y ahora estoy acá y tengo ganas de dormir. Cuando nos hace hacer cosas me siento mejor pero no tengo ganas de hacer nada. Yo quiero chupar. Ayer tuve síndrome de abstinencia y por poco no lo mato al Guía”. Claudio le pregunta a Alexandra: “¿esta coordinadora que hace con esto?”. Alexandra: Sé que con el psicodrama yo puedo hacer mucho con esto. Y cuando lo veo a él se me hace así (expresión de fastidio) Se juegan los roles todos juntos. Alexandra dice que Galo le da miedo. Se trae al miedo (Vicky) que le hace temblar las piernas a Alexandra, que se quiere ir porque sabe que ella puede con esa 244

situación. Alexandra toma el papel de Galo y Mónica su lugar, Galo dice que ella lo sabe todo, la empieza a apurar para que haga algo, que él puede hacerlo mejor que ella. No recuerdo bien si en esta parte es Mónica la que sugiere que Galo juegue el rol del Alexandra, y al pasar a ese rol, se hace una burla y entra la agresividad a juego. Se cambia la escena (esta parte no me acuerdo yo) si me hace un espejo, y Mónica me dobla no me acuerdo que es lo que hace que yo solita me hago un soliloquio y digo que me da una buena idea, Así que vuelvo al mi rol y hablo con el grupo, que está bien, si no se quiere hacer nada. No hagamos nada por esas dos horas que nos toca quedarnos en la sala de terapia. Ya no queda más tiempo. Claudio propone guardar la escena: Alexandra les dice a todos que no hagan nada, que hagan lo que quieran pero que no pueden salir porque ya conocen las reglas de la institución. CONCLUSIONES 

Sale el tema de lo que se debería decirse entre el grupo y salta el tema de los autistas luego, se trae el trabajo con mis pacientes el decirse de una manera que pueda ser agresivo



El tema del cansancio y el compromiso.



El tema del cuestionamiento del trabajo del Director que se concretó mucho en mi escena.

Bueno esto se podría trabajar en este grupo antes de terminar el curso para trabajar como se ven de Directores

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# 14 LOS ÚLTIMOS MOMENTOS

Luego de leer los procesamientos hechos durante el curso de psicodrama clínico, me encuentro con que en este documento, no consta con la última sesión, voy a apelar a lo anotado en esa clase y a mi memoria para reproducir lo que sucedió en esa clase, y quizás emerjan diálogos no dichos por los presentes, y desde ya pido disculpas a mis profesores y compañeros por la adición y omisión que puede presentarse en este intento de darle un fin a este texto.

Al estar caldeada con toda la historia del grupo, y al ser parte del mismo, acá va el relato de la última clase:

Es el último día del curso, todos quienes participamos, estamos presentes con el trabajo final, además es una clase en que todos los profesores están presentes, (no recuerdo si Paula, asiste a esta clase, ya que durante el curso entró en labor de parto)

Se inicia la clase con un comentario que hace Mónica sobre el atuendo con el que viene Juan, quien señala que tiene ascendencia Libanesa, a partir de este diálogo se comienza a hablar de los ancestros, se habla de los judíos, los árabes, españoles, lo que nos lleva a hablar de la matriz de Moreno, sus orígenes Judíos de la línea sefardita. Mónica señala, lo importante que es hacer memoria transgeneracional, así como de la Matriz Cósmica,

Continuando con la clase, J menciona que durante la semana pudo reflexionar sobre la escena de la clase anterior, el poder hacer contacto con la angustia que le generó su paciente y la sensación de desequilibrio, añadió que si se cerraba a esa sensación podía perder algo de humanidad, menciona textualmente “no se puede estar sonriendo como Lucía, la tristeza y la ansiedad son necesarias”, acotó que eso le permite ir a trabajar, (queda pendiente poner en escena lo que pasa institucionalmente, señala la resistencia que puede percibir de parte de los auxiliares 246

que colaboran en su lugar de trabajo)

Esto permite que se hable de las escenas pendientes y sale a relucir lo que M J ha ido mencionando “el no saber que escena trabajar, la ansiedad” a lo que Mónica señala que si se hubiera puesto en acción esta escena, el grupo hubiera procesado el tema que de una manera ha estado rondando a lo largo de las clases, (Que tiene relación con el rol del Director, el asumir una dirección)

Acá surge una dramatización que, en honor a la verdad, no recuerdo qué matiz tiene, -pero por los apuntes que tengo- Claudio en la retroalimentación, se refiere a la importancia de poner límites, por lo que me atrevo a decir que frente al contrato de construcción del rol de Director y al tema del curso que es Psicodrama Clínico, el grupo necesita interiorizar el siguiente punto: Si bien es el Protagonista es, quien establece la escena a trabajar, el Director necesita tener claro en donde está su propia escena y marcar el contexto y el rol que está ejerciendo, por lo tanto, también está convocado a ponerse límites, caso contrario no se favorecería el desarrollo de la espontaneidad del Protagonista, o del grupo.

Con esto retomo a algo que Claudio me ha ido mencionando a lo largo de mi estadía en Buenos Aires: el aprender a lidiar con la incertidumbre, que en lo personal es saber que no tengo control sobre el texto por lo tanto es un acto de supervivencia la aparición de respuestas nuevas que en sí, se asemeja al concepto de espontaneidad que Moreno nos ha enseñado “dar una respuesta adecuada a una situación nueva o una nueva respuesta a una situación antigua.”1[1]

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BIBLIOGRAFÍA

Bello, María Carmen,

“Introducción al Psicodrama Guía para leer a

Moreno”Colibrí, México, 1999.

Boria, Giovanni. ,

Sánchez, María. , Hernández, Ernesto. ,

Pérez, Rafael. ,

Metodología para una Existencia Creadora el Psicodrama Clásico, Itaca, México, 2001. Carvalho, Esly, “Manual de Psicodrama” Plaza del Encuentro, Ecuador, 1999. Ramírez, José Agustín “Psicodrama Teoría y Práctica” Desclée de Brouwer, España, 1997. Schutzenberger, Anne Ancelin., “Introducción al Psicodrama en sus Aspectos Técnicos”, Aguilar, España, 1970.

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La Dra Ximena Alexandra Armas Melo reside y trabaja en Quito, Ecuador. Es Doctora en Psicología Clínica, egresada de la Universidad Central del Ecuador en Quito; Psicodramatista Clínica Otorgado por la Asociación de Psicodrama y Sociometría del Ecuador; Clínica en EMDR Nivel I y II ; Terapeuta brainspotting nivel I II ;Actualmente cursa la Maestría de Prevención y Asistencia de las Drogodependencias Universidad de Salvador Buenos - Aires Argentina (tesis en construcción) Ha formado parte del equipo técnico del "Hogar de Acogida para la Mujer" ; A.S.A Asociación Solidaridad Acción- Programa de Apoyo y Acogimiento Familiar parte del equipo técnico de Acogimiento Familiar; Coordinadora del proyecto de Asistencia Domiciliaria desde Octubre del 2001 a Abril del 2002; Docente de la APSE Asociación de Psicodrama y Sociometría del Ecuador; Parte del Equipo del CAMPUS GRUPAL Instituto Ecuatoriano de Psicodrama y Grupoterapia, Instructora de talleres en Acogimiento familiar y Drogadependencia Campus Grupal Quito- Ecuador Ha completado su pasantía Centro Enrique Biedak Buenos Aires, Argentina. Docente de la UDLA Universidad de las Américas; Docente unidad Semipresencial UCL Universidad Cristiana Latinoamericana; Psicoterapeuta de Dejando Huella, AngamarcaEcuador de Mayo del 2006 a Marzo del 2007; Asistente de Cátedra del Módulo de Psicoterapia de grupo en la Maestría de Psicoterapia Universidad Central de Ecuador Facultad de Ciencias Psicológicas. Ha realizado la Maestría en prevención y Asistencia de la Drogadependencia Universidad del Salvador, Buenos Aires Argentina,

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